Terrer - Zaragoza

¿QUÉ SE COMÍA? Segunda parte.

Sigue del artículo anterior. . .

Los conejos y las liebres obtenidas en los montes se comían cocidos o asados encima de piedras. Eran tan abundantes en todo el territorio actual de España que los primeros griegos que llegaron denominaron a España como “la tierra de conejos”. Por lo que podemos afirmar que ya eran abundantes antes de que llegasen nuestros antepasados Belos.

También se cazaban aves: palomas, tórtolas y otras viajeras. Las monedas de aquella época presentan, por su cara, un jinete con su lanza ( muy parecida a las que aparecían en las monedas de perra gorda de los años 40), acompañado, unas veces de un AZOR (ave de presa que se usaba para cazar otras aves) y otras veces de una leona. ¿Habría leones por aquí? La verdad es que parece una leona; pero podría ser otro animal parecido. Seguramente, se referiría a algún símbolo, en vez de una realidad. Pero los azores sí que existían y se usaban para cazar aves.

El trigo se consumía en grano y en harina. En grano se utilizaba para llevarlo en los viajes y en las guerras, porque era fácilmente transportable por cada guerrero o viajero. Entonces no había fondas. Se consumía mezclado con agua ( a ser posible, hirviendo, a modo se sopa). Y en harina, se comía bien en forma de gachas o bien en forma parecida al actual pan. , aunque sin levadura, sólo o mezclado con otros cereales

El centeno y la cebada se consumían en harina con las mismas funciones que el trigo. No se consumía en grano.

La avena, aunque llegado el caso también se consumía en harina como el trigo y el centeno, lo normal es que fuese utilizado en grano para el ganado y, a veces, tierna, como forraje.

También hay constancia de que en nuestra tierra había vides. No se ha podido averiguar qué tipo de vid era, pero sí que no tenía que ver con el resto de las vides mediterráneas, sino que era autóctona de estas tierras. Ahora, algunas bodegas quieren relacionar la uva garnacha nuestra con la de los celtíberos; pero no hay pruebas.

Lo que no sé si comían sólo las uvas o hacían vino. La técnica de hacer vino fue introducida por los fenicios y no está probado que hubiera relación fluída de los Belos con los fenicios, aunque vaya Vd. a saber. En épocas posteriores, como veremos, ya sí que se hacía vino.

Está probado que bebían cerveza, que la hacían destilando cereales: trigo, cebada, avena etc. Esta era una tecnología que los Belos ya traían cuando vinieron a nuestra tierra. No se nos olvide que los Belos tenían origen celta y la cerveza era la bebida de toda la antigua Europa celta. La bebían en vasos individuales o en jarras de cerámica.

La miel era otro alimento natural que se podía recolectar en nuestros montes.

No se han descubierto platos en las excavaciones realizadas en Segeda, aunque sí vasos y grandes cuencos de cerámica, con adornos en negro y rojo, lo que puede significar que no se comía de forma individual, sino que lo hacía la familia entera comiendo todos del mismo recipiente. (Esta costumbre la he visto yo mismo en casa de mis abuelos). Como no consta que hubiera utensilios parecidos a las cucharas o tenedores actuales, es de creer que comían con la mano.

Continuará.

Hola Contador de cuentos.

La cultura celtibérica es un tema apasionante. Tu lo estás haciendo muy bien y además eres muy sabio (sólo los sabios son capaces de reconocer que siempre estamos aprendiendo).

Añadiré algunas cosillas de la dieta alimenticia.

Para empezar con alegría vamos a beber. Entre sus bebidas favoritas, además de la cerveza y el vino ( y el vino con miel), estaba la que denominaban "caelia". Segun Orosio " se hacía con trigo fermentado, extrayendo por medio del fuego el jugo del grano de la espiga humedecido, seco después y reducido a harina, que se mezclaba con un jugo suave, cuyo fermento le daba sabor áspero y un calor embriagador.."

Espero tus "continuará".

Un saludo.

Lug.

Había pensado retrasar un poco los cuentos, en espera de que escampase la madre de las tormentas; pero, ante una firma como la tuya, no tengo más remedio que seguir.

LA RELIGION EN TIEMPOS DE LOS BELOS.

Al tratar este tema, quiero advertir de antemano la gran importancia que tenía la religión en todas las sociedades antiguas. Para aquellas culturas, la religiosidad era un complejo de creencias y sentimientos sobre las fuerzas naturales, ante las cuales se sentían impotentes. Nada que ver con nuestra cultura fuertemente tecnológica, que intenta y consigue en muchos casos controlar las fuerzas de la naturaleza. Parece que ya no se necesita la religiosidad entendida en este sentido. Sólo cuando se produce algún desastre natural, algunas personas se refugian en sus creencias religiosas.

Por tanto, en este tema yo no quiero tener opinión, sino, simplemente, contar lo que las fuentes escritas o epigráficas ( dibujos, etc) nos han dejado.

La cultura celtíbera , ( en el caso de los Belos era de origen celta) se transmitía oralmente hasta que, más tarde ( por influencia de los íberos) se utilizó la escritura. Y la mayoría de los escritos son de la época de la conquista romana y éstos traducían los nombres de los dioses celtíberos a los nombres de sus propios dioses.

No obstante está documentado lo que voy a transmitir:

La LUNA era una divinidad femenina importantísima, de tal manera que era TABU y no se le podía nombrar ( era La Innombrable) . A esta diosa que dominaba la noche se le danzaba en las noches de luna llena. Las hogueras nocturnas que se hacen en toda la actual celtiberia, y en Terrer para San Antón y San Blas ( por lo menos, antes) son reminiscencia del culto a esta diosa. Y así aparece en numerosas estelas, monedas, etc.

LUG ( o LUGUS) es la principal divinidad masculina solar. Se ha encontrado en un pueblo de Teruel una cueva donde se representa un dibujo con la cabeza de LUG. Debía de ser un santuario.
Se decía de LUG que era tan brillante que nadie podía mirarlo. LUG es el mejor guerrero y el más habil en todas las disciplinas. Es experto en todo. Tiene como arma al Arco Iris, por cadena, a la Vía Láctea y su lanza simboliza los rayos del sol que dan la vida, el calor, las curaciones; pero también pueden dar las enfermedades y la muerte. Su festividad se celebraba el día primero de Agosto. Y se le suele representar por un toro.

Estas dos eran las divinidades más importantes: La Innombrable dominaba todo lo que pasaba en la noche y LUG todo lo que pasaba en el día.

LAS MATRES son divinidades femeninas que simbolizan la maternidad y la fecundidad de la tierra y sus criaturas y el agua.

EPONA era una deidad femenina que protegía a los difuntos y a los caballos ( tan importantes eran en aquella sociedad). Su atributo era el cuerno de la abundancia. Se simbolizaba con el caballo. Era costumbre que cada vez que se elegía a un jefe, para asegurar su jefatura, éste realizaba una cópula en la plaza pública ( es de creer que ficticia, aunque nada se dice) con una yegua blanca que simbolizaba a EPONA . Era el signo de que su jefatura iba a ser muy productiva.

CERNUNOS. Es un dios de carácter infernal y funerario. Estaba representado por un lobo, que es animal feroz y temido. En otras representaciones aparece como un hombre con cuernos de ciervo, que es el símbolo de la inmortalidad. Hay que tener en cuenta que los Belos creían que cuando uno se moría, se iba a otro sitio: a la Luna , donde tenían su morada una vez muertos y el dios Cernunos les ayudaba en el tránsito. (Si recordamos las creencias cristianas de que cuando se muere uno, también se va a otro sitio, los Belos no estaban tan atrasados).

Además de estas deidades principales, cada tribu tenía sus deidades particulares, en función del sitio donde habitaban. Así tenemos:

- Determinados cursos de agua, y algunas fuentes y manantiales eran sagrados porque, en muchos casos, curaban enfermedades. (El caso de Alhama, tan cercano a nosotros).
- Algunos montes y bosques: en la celtiberia, el Moncayo era el monte sagrado por excelencia y el llamado “bosque de Duratón” ( pueblecito cerca del Moncayo) era lugar de peregrinaciones periódicas.
- Algunos árboles: el roble, principalmente, y otros. En tiempos posteriores cristianos, surgió la costumbre de situar imágenes de la virgen en oquedades de grandes árboles sagrados, en un intento de cristianizar este culto tan arraigado en pueblos agrícolas. (Ya hablaremos en otros capítulos, las consecuencias de estas prácticas en el culto actual)
- Algunas aves: el buitre, animal necrófago que era el encargado de comerse a los guerreros que habían muerto en el combate y llevar su alma al lugar donde moran los dioses. Y otros, como los caballos, los toros, etc., por no extenderme en demasía.

Los Belos no construían santuarios porque pensaban que a los dioses no se les puede encerrar y celebraban sus ceremonias al aire libre: las puertas de las casas, la plaza pública común del lugar, un claro en el bosque, una cima de montaña, una cueva, una fuente, etc. Y tenían muy pocas imágenes. En cambio, han llegado a nuestros tiempos alguna pintura, como la de la cueva de un pueblo de Teruel, al que nos hemos referido antes.

Yo soy de la opinión que, en nuestro pueblo, el monte de Santa Cruz y el cabezo de San Gregorio actuales, ya eran sitios donde nuestros antepasados iban a venerar a sus dioses; pero es sólo una opinión, porque no he encontrado nada escrito. Aunque a mí me gustaría que fuese así. (Esto es una broma mía).

Continuará.

Este artículo apareció en el Heraldo y está dedicado a todas aquellas personas que les interesa el tema y en especial al Contador de Cuentos.

Y creíamos que los más listos eran los egipcios!!!! (con todos los respetos, claro está).

Un abrazo.
Lug


"...El santuario celtibérico de Segeda, en Calatayud, que data del siglo II de nuestra era, es el único calendario de ciclo lunisolar conservado de la antigüedad en todo el mediterráneo. Así lo constatan los últimos descubrimientos, que han demostrado que la base de esta construcción se levantó teniendo en cuenta distintas orientaciones astronómicas.
Según Francisco Burillo, los celtíberos construyeron este santuario alineándolo con el solsticio de verano, los equinoccios, el norte astronómico y la Parada Mayor de la luna, que marca un ciclo de 19 años denominado Ciclo de Metón.
Los descubrimientos han demostrado que el santuario de Segeda es una construcción única en el mundo, ya que permite aumentar los conocimientos sobre la sacralidad en la cultura celtibérica, muy desconocidos hasta la fecha, como por ejemplo, que la plataforma no tenía cubierta.
Esto se relacionaría con las culturas galas, que afirmaban que sus dioses eran tan importantes que no podían estar prisioneros dentro de un edificio -ha remarcado Burillo-.
También ha explicado que una de las cosas que más llamó la atención de los investigadores fue la "extraña" forma de la base de la construcción, que tenía forma trapezoidal, y un ángulo muy poco común, de 120 grados, en la piedra angular.
Esto significa que utilizaban el sistema sexagesimal, lo que lo relaciona con otras corrientes mediterráneas de la antigüedad.
La base de este trapecio coincidiría con el norte astronómico, mientras que el lado mayor de la plataforma está orientado a la Parada Mayor de la Luna, es decir, cuando la luna está más alejada, cuando se encuentra "muy alta" en el firmamento.
Esta construcción demuestra el interés de las poblaciones celtibéricas por los movimientos del sol y la luna como forma de medir el tiempo"...

Muchas gracias por el artículo y por el recuerdo que haces de mi persona. Yo soy un estudioso apasionado de la cultura celtíbera; pero sólo estudioso, no historiador. Pienso que muchas de nuestras costumbres arrancan de esta época.
Muchas gracias de nuevo