Muelas de los Caballeros - Zamora

Hace muchos años, tuve la suerte de conocer a Mariano Estrada, poeta, infatigable y defensor de Muelas, su pueblo, que ha magnificado en los muchos poemas que le dedicó. Por las lecturas de sus libros, Tierra conmovida y Trozos de cazuela compartida, por la manera tan apasionada que siempre hablaba de su tierra,sentí el deseo de conocer Muelas de los Caballeros y sus alrededores. Con Mariano y sus amigos descubrimos el nacimiento de los arrollos, los secretos de las pedreras, los robles caídos abrasados por el sol y disfritamos de las sombras de castaños y robles centenarios. Hablé con pastores, los que todavía crian mastines para auyentar a los inexistentes lobos. Fotografié varios molinos de agua en plena molienda, el viejo puente de madera del río Fontirín, humeros, cucumillos y la gente tan amable y tan interesante de Muelas, Donado, Justel, Vega del Castillo. A este primer viaje siguieron muchos más, disfruté de la vija casa familiar de Mariano, de sus noches marcadas por la campana del reloj de la iglesia y las esquilas del ganado al amanecer. Comimos castañas asadas en la cocina de leña y las dulcísimas manzanas de secano cuyo olor inundaba una de las estancias. El tiempo parecía detenerse junto a los avellanos del camino de Vega, su fertil huerta, en la que su alcalde trabajaba y se dejó fotografiar junto a un artístico espantapájaros.
Desde mi último viaje, algunas cosas han cambiado: ampliación de carreteras, tala de árboles, etc. Solo espero y deseo que los que tienen la responsabilidad comprendan el tesoro natural que tienen, que tienen la obligación de hacerlo respetar y de que se cuide tal y como está
Estamos proyectando un nuevo viaje, tal vez al pasar el verano.
Un saludo codial a todos los habitantes de Muelas de los Caballeros y pueblos mencionados. Fernando Medrano.