Muelas de los Caballeros - Zamora

Difícil labor la de escribir poesía. Hace años luz que desistí de componer poemas: ni en la intimidad, que después salen a la luz de sopetón y uno desea que la tierra se lo meriende.

¿Cuál es la receta para componer poesía? A ver si Mariano nos aporta sabios consejos, y los más osados se animan a coquetear con el género literario más maltratado. Yo, cuando intento componer poesía, me convierto en un matajari de la palabra: la poesía deviene en pobresía.

No soy el único, lo sé. Y es que algunos pretenden crear poesía y el resultado es pobresía. Nunca supe escribir un poema: me sale un churro dominguero, una falla de medio metro, una canción sin música ni estribillo...

A veces he leído poesías de barrio, experimentos mañaneros, y me deprimo al comprobar que la poesía es asunto de minorías. Qué duro es escribir poesía... Qué duro es leer algunas poesías...

Saludos de un pobreta,

Agustín

Hay algunos en plan irónico que aprovechan las circunstancias para hundir al prójimo. Pero si existe la poesía, poesía eres tú: "domingero pesimista" por no ofender a otros.

Siempre he admirado a Mariano, él bien lo sabe, pero esas cosas dificilmente se aprenden, vienen del Cielo. Cada cual tiene lo que se merece y Dios a él se lo ha dado, sin embargo, ni a ti ni a mi nos lo ha otorgado, ahora bien, a ti si que te ha dado una lengua viperina que ha hecho romper mis pequeñas vacaciones que me había propuesto tener en el Foro para no resultar cansino. Un saludo.

Pues el caso es que vengo del fútbol, donde he intentado hacer un poco de filigrana, que es la equivalencia de la poesía en este deporte.

Lo que me ha salido, en cambio, es un churro sabadeño, muy parecido al de Agustín. Además, me dieron una patada en la espinilla y un rodillazo en la rótula que me ha dejado una especie de moratón y... Bueno, acabé con un aductor pidiendo la hora.

Pero estoy vivo y coleando, como las sardinas que nos sacaron después, en el bar, que no estaban muertas, estaban tomando cañas con el Gitano Antón.

Jugábamos contra un equipo de holandeses, que eran más altos que nosotros, pero les hemos ganado. No han sonado himnos, sino flautas, porque yo he marcado un gol...

¿La poesía? Me está esperando en la cama, para echar juntos la siesta... A ver si logro ablandarla, para quitarle algo de ese carácter duro que le atribuye Agustín...

Un abrazo

Agustín, me alegro de tenerte nuevamente en el Foro, hecho de menos al profesor (José Miguel dice catedrático). Coincido contigo cuando dices “cada día confío menos en el ser humano, el simio pensante más arrogante del planeta”, por lo que creo que la única solución para evadirse de las miserias de esta vida pasa por la música y la poesía.

La poesía es simplemente la más deliciosa y perfecta forma de expresión que las palabras humanas pueden alcanzar, la poesía debe ser excelente o no existir. Creo que el carnicero auténtico, el que cuida el filo de sus cuchillos, nunca podrá ser un poeta, ni el cobrador del frac, ni el sargento de semana; la poesía es necesaria al hombre y quien no la ama, debe tener un alma turbia. También creo que se puede ser poeta sin hacer versos, y viceversa, es decir, escribir mucha poesía sin sentirla. Tan importantes son los que beben de la poesía como los que la escriben.
En la mirada de algunas personas se puede apreciar poesía, porque esta tiene su origen en la emoción que se recoge en la calma, cuando se contempla el descubrimiento de una orquídea, o cuando sale la luna por detrás de un mar en calma, sin más testigos que la brisa de la Sierra Gelada, o ver una presentación del Ballet nacional de Cuba en el Teatro Nacional de la Habana. Y digo La Habana, porque esa ciudad tan apasionante, tan culta, tan libre (no políticamente), hace que te calmes, te reencuentres y dispongas para el gozo de un espectáculo exquisito. A la belleza hay que aproximarse con suavidad, con delicadeza y sentimiento, mucho sentimiento, de lo contrario, pasa desapercibida.

Un saludo.

¡Hola, Fernando!
Pues, creo en el SER Humano, hay de todo, pero pienso que son más los buenos que los malos!!!!
También creo, como persona y como docente, que si a los chicos/as, se les enseña a amar la música, a disfrutar con un poema, lograremos mejores personas, porque se les está cultivando el espíritu, de ello estoy segura, y es algo, que se suele olvidar, por desgracia, en los planes de estudio!!!
Pienso como tú, que se puede ser poeta sin escribir un poema, porque para mí, profana en la materia, la poesía es un sentimiento, la capacidad de disfrutar, de emocionarse con una puesta de sol, con un amanecer, con la contemplación de una flor, con la serenidad o bravura del mar (que lo amo tanto!!!), o el asombro (para mí lo es, es asombroso) del otoño!!!, contemplar esos cambios tan maravillosos del color de las hojas!!!
Algunas personas, como Mariano, tienen la capacidad de plasmar esos sentimientos, esas emociones, con palabras en un poema, y otras...pues las llevamos en el corazón y en la memoria!!!
Un abrazo desde Canarias, con un día espléndido, de un azul intenso, que me hace estar alegre!!!
Natalia

Bueno, pues ahora va más en serio...

¿Es duro escribir poesía, entendiendo la poesía como un género literario? –pregunta Agustín- Y yo le digo: no sé, para unos más, para otros menos, supongo. Lo realmente duro es la aceptación de que la poesía no tiene lectores, por decirlo con rotundidad, sin eufemismos. Pero una vez que lo aceptas, te das cuenta de que no sólo no es duro, sino de que en realidad es liberador. Escribir poesía sin urgencias ni mandatos, escribir la poesía que uno quiere escribir, escribir poesía sin pensar en lo que ocurra después, si no es la única forma de escribir poesía, es, sin duda, la mejor. O a mí me parece que es la mejor. Desde luego, yo no conozco otra. Y si la he conocido alguna vez, no la recuerdo. O ya la he olvidado.

Y ahora viene la segunda parte, porque, a mi modo de ver, la poesía no es sólo un género literario, sino también una actitud ante la vida. Y no hablo de cosas muy raras, hablo de que hay personas que en normal desarrollo de su vida tienen una actitud tan positiva, tan espléndida, tan amable, tan generosa, tan desprendida, tan entregada...que muy bien puede tildarse de poética. Y no me refiero sólo a las formas, sino también, y sobre todo, a los hechos.

Pero esto se desvía un poco del tema, que era el siguiente: ¿es duro escribir poesía? A lo que yo sigo diciendo: no sé, podría decirse que sólo es cuestión de escuchar, de ver, de sentir.... Y luego de rumiar... Y luego de tener la fortuna de cara a la hora de seleccionar y ordenar las palabras. Ya sabéis lo que dijo Borges a este respecto: “La poesía no es menos misteriosa que los otros elementos del orbe. Tal o cual verso afortunado no puede envanecernos, porque es don del Azar o del Espíritu: sólo los errores son nuestros”.

Por otra parte, y con esto ya concluyo, la naturaleza está llena de poesía. Para explicarlo, transcribo este fragmento del prólogo del libro Trozos de Cazuela Compartida. Dice así: “...Hurgando entre los libros de estos dos pueblos, cuyo número está por dilucidar por temor a las resultas, nadie hubiera encontrado uno solo que fuera exclusivamente de poesía, puesto que ésta se daba en retales y siempre con una brocha muy gorda. Claro que la poesía, la auténtica, estaba allí con nosotros, en el aire, en el humo de las chimeneas, en el vaivén de las mieses bajo la brisa, en el nido amoroso de los pájaros, en las bardas de los corrales, en las flores cárdenas del brezo...”

¿Le es duro a la Naturaleza escribir poesía? No creo, la verdad, porque la Naturaleza es en sí misma poesía. Lo que pasa es que la mano de los hombres está resultando tan larga, tan codiciosa y tan negra que, en determinados lugares, y aun en general, le está obligando a echar innumerables borrones. Borrones que a día de hoy ya son enormemente preocupantes.

Quiero decir, por último, que para la inmensa mayoría de la gente, es duro escribir poesía, por supuesto. Y más que duro, imposible, como da a entender Agustín. Pero estamos hablando de nuevo de la poesía como género literario, que es sólo un aspecto de la poesía. Tal vez no el mejor, ni el más grande.

Un abrazo

Me alegro de que algo que empezó de coña entre Agustín y yo, haya tomado un cariz serio y sirva para debate.

Desde pequeño, cuando descubrí la rima de G.A. Bécquer de dice:

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a sus cristales
jugando llamarán.

Sentí deseos de componer algo similar, pero no dejaba de ser una admiración igual que la que sentía por Kubala o Distéfano, que también soñaba con sustituirles cuando dejaran su plaza vacante.

Pero no dejaban de ser sueños de juventud. Volviendo a la poesía a pesar de intentarlo alguna vez, lo único que me salía es lo que me dijo Agustín el otro día: Un churro. Por eso cuando descubres a alguien que tiene esa facilidad, don, o lo que queramos llamarle, sientes una admiración grande. Eso me pasó con Mariano, y aunque él dice, y es cierto, que no es un género que se lea mucho, debe ser una satisfacción muy grande cuando terminas una composición, aunque sólo sea para el disfrute propio y de algunos pocos.

Menos mal que Fernando ha aliviado mis ansias de poeta con su afirmación: Que se puede ser poeta sin hacer versos. Pero lo que es cierto, que si sabía que era difícil construir poesía, anteayer, motivado por una pequeña composición que debía hacer, acabé dándome cuenta que todavía es más difícil de lo que pensaba. De ahí viene el comentario de Agustín, y así, queda aclarada la historia. Él es más bromista y optimista de lo que él mismo piensa, y aprovecha, con esa arma que le ha dado la Naturaleza y la Facultad, cualquier motivo para crear guerra. ¿Será también la juventud? No sé, porque a mi también me gusta.

Un abrazo