Aldeamayor de San Martín - Valladolid

El Gobierno dijo la semana pasada que el esfuerzo en este campo se mantendría

El recorte en los programas de educación es de 623 millones de euros, un 21,9%
La partida para becas y ayudas al estudiantes del Ministerio de Educación será en 2012 de 1.265 millones de euros, es decir, 166,4 millones menos que en 2011, según los Presupuestos presentados en el Congreso. Y ello, a pesar de que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo la semana pasada que este presupuesto se iba a mantener. La gestión y dotación de las becas es la principal tarea que le quedó al Ministerio de Educación cuando se transfirieron las competencias en la materia a las comunidades autónomas hace una década.

Por lo demás, el dinero destinado a Educación (tomando la clasificación funcional del texto del proyecto de ley de presupuestos), se ha reducido en 623 millones de euros, es decir, es un 21,9% menos que el año pasado (porcentaje de bajada similar al de todo el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte: 21.2%). Así, el monto para programas educativos será de 2.220 millones de euros y hay que remontarse al año 2006 para encontrar una cifra más baja en los presupuestos.

Aunque el dinero que invierte el Gobierno central en escuelas y universidades (básicamente el del Ministerio de Educación) supone un porcentaje pequeño del gasto público total en esta materia (en torno al 6% o 7%), muchos especialistas defienden que su misión es muy importante. No solo por las becas (que suponen el elemento central de la política de equidad), sino por los programas de cooperación con las comunidades (el ministerio pone dinero a medias para planes concretos) que pueden marcar una gran diferencia en unas autonomías que dedican las mayor parte de sus presupuestos educativos a pagar nóminas.

Con este recorte, sumado a los que ya han hecho las comunidades autónomas en materia de enseñanza, los presupuestos para la educación española han perdido en los dos últimos años más de 3.400 millones de euros. Eso, como poco, porque aún hay tres comunidades sin presupuestos aprobados para 2012 (Castilla Y León, Castilla-La Mancha y Asturias), que probablemente ahonden algo más el tijeretazo.