Miguel Esteban - Toledo

17/05/2014 DCLM
Dieciséis de Mayo de dos mil catorce. Noticias Cuatro. 14.00 horas.
"Sois y seréis malditos, ¡Malditos jetas!"

"Pleno del Ayuntamiento de Toledo. Jueves 15 de Mayo. Horas vespertinas. El Presidente del pleno (Page) otorga la palabra a una madre con hijo (o hija, que me da igual) oncológico, o con cáncer que es lo mismo aunque suene más sombrío. En nombre de una Asamblea en Defensa de la Sanidad Pública, tal madre intenta exponer la situación actual en que se encuentran los afectados por tal padecimiento- cáncer…cáncer- así como la relación hospital-enfermo (¡niños, niñas!, que si bien el mal es el mismo que en adultos y viejos, no así la cantidad de años potencialmente perdidos de vida, que es descomunal).

Me deshago súbitamente de la audición rutinaria y repetitiva y, con ojos cual platos y orejas dumbescas, miro la tele como si quisiera engullirla de un iracundo trago.

¡Inaudito!…es inaudito lo que veo y oigo (en las dos acepciones académicas: "nunca oído" y "monstruoso, extremadamente vituperable"). Se levanta un tío de su asiento parlamentario (¿parlamentar no significa hablar y escuchar para zanjar cualquier diferencia? Pues de ser eso, los humanos opositores al tal Page se lo pasan por el forro), hace un gesto con su cocorota- ampliamente grandiosa, a mi gusto- y camina dejando su barrigón reposando sobre su correa, formando, en armonía anatómica, con su zona bragueteril la imagen dos senos de mujer inmensos pero en vertical, y diciendo a sus compinches de estrado,: chicos… ¡a tomar viento fresco que aquí no se nos ha perdido nada! mientras coge una carpeta- de apuntes chiveteros, quizá-; los compadres y compadras se levantan casi al unísono siguiéndole en manada y fila india. Uno de ellos, que debe pensar que es un guaperas-chulapón-isidril, se enfrenta en actitud pendenciera a un hombre, va moviendo su brazo derecho, con el dedo índice para arriba y para abajo- como amenazando o algo así- y apuntándole al corazón; a la salida consistorial, otro hombre (padre quiero pensar) le habla llorando, llorando.

Hasta aquí todo podrían ser matices personales y discutibles si quiere usted, estimado lector…discutibles.
Lo que ya no me parece nada discutible es el motivo por el que esa recua de malditos- después explicaré el por qué de llamarles "malditos"- se levantó y abandonó su asiento parlamentario, según refieren los informativos y fuentes bien informadas y no capciosas.

De ser discutible tendría sus vaivenes; pero decir, mientras escapan cual manada borreguil, que les importa un carajo el problema (cáncer…se llama cáncer) que tengan esos niños, niñas y… sus familiares, porque es un mal que lo padecen todos, de una u otra manera, ¡ah, amigos!, eso es harina de otro talego (donde debería estar toda esa recua de ser ciertas las palabras que dicen que dijeron: no caeré yo en la tendenciosa trampa de dar más pábulo a unos que a los otros… de ser cierto lo que dicen que dijeron…repito y repetiré)!

Luego, y como siempre, piensan que con una disculpita y una excusa tan infantil y boba como es el escudarse en el típico…"es que nos estaban insultando"… (no he encontrado un solo insulto que pueda calificarles) pues creen que ya están sanos, salvos, perdonados y caminito directo al cielo- de fenecer- sin necesidad de ser ungidos por mano sacerdotal alguna.

Pues a mí no me sirven sus disculpitas ni sus excusas siempre "a posteriori" ¡ya ve usted! Y para mí que al demonio tampoco…no irían ni al dantesco infierno…por malos.

He buscado profusamente en todos los diccionarios de insultos y tacos y ninguna palabreja les viene al pelo por la actuación mencionada, ni siquiera la merecen.

Me quedo con el calificativo que expresó un verdadero hombre que a pesar de no comulgar con sus ideas, si con su ética, con su integridad, su gallardía y su coherencia; me refiero a Anguita (Julio) cuando le comunicaron la muerte de su hijo durante la invasión de Iraq de 2003, cuando un misil iraquí le alcanzó en Bagdad (lo mismo que a Couso, pero menos sonado):

¡Malditos seáis!

Pues, -repito lo de "de ser cierto lo que dicen que dijeron ustedes"- eso es precisamente lo que me parece que son y serán ustedes…unos Malditos ("el que no es de quince no es de veinte, dice la voz popular").

Ni está en mi intención ni en mis plegarias que sufran ustedes o sus familiares tal mal- cáncer…se llama cáncer- ¡Dios me libre! Pero si para su desgracia lo sufrieren, ruego a tal Dios que les permitan ser escuchados y, a ser posible - que les dispongan de los medios técnicos, materiales y personales idóneos para su cura o, en su defecto, su mejor cuidado sin necesidad de partir a tierras más o menos lejanas de su hogar, como viene a ser lo que solicitan de ustedes esos padres y cuya respuesta fue la más cobarde fuga hacia adelante por su parte.

¡Sepan ustedes, Malditos! (que va a ser que ni lo saben), un Hospital sin personal suficiente para poner en marcha todos los medios materiales y técnicos, por más sofisticados que sean, se queda en pura y dura arquitectura. Más o menos guapa o fea, pero arquitectura de cemento y ladrillo. Y…nada más.

Unos padres que se sientan escuchados y atendidos en su dolor por el hijo condenado por tan asesina enfermedad como el cáncer- se llama cáncer- quedarán,-como poco, reconfortados…el final siempre será lo que Dios quiera pero habiendo puesto los medios oportunos.

Ustedes no solo no los ponen…se limitan a pirárselas, a escurrir un bulto que ni de lejos resulta demasiado grande. Ni siquiera es un bulto sino una obligación moral y electoral (¿acaso no están ustedes, Malditos, en esos escaños por votos electorales?)

¡Mala peste a los Malditos!


Francisco R. Breijó-Márquez"

No puede estar explicado de mejor forma el dolor, la indignacion y la impotencia que describes en el articulo, petete. Eso segun legislacion sería un DELITO DE OMISION PARLAMENTARIA muy grave.

Yo si vi en television el RUEGO DEL PADRE DEL HIJO ENFERMO, IMPLORANDO a los politicos NINIS que se abstuvieron de escuchar el dolor ajeno.
Bastante triste. Y...SRES POLITICOS NINIS la enfermedad la tenemos todos detras de la esquina, pero sí es cierto que no contamos con las inflencias suficientes para tener "un cirujano amigo del SESCAM" que podamos llevarlo a casa para que cure anuestros familiares.

TODO ES UNA MENTIRA

PERO SI ES CIERTO QUE COSPEDAL HA CERRADO LA PLANTA DE ONCOLOGIA INFANTIL DEL HOSPITAL DE TOLEDO.