Cambrils - Tarragona

Todos los años me digo lo mismo:nunca más y en lugar de esas absurdeces que uno promete tras la última campanada tales como dejar el tabaco,gimnasio diario y menos madera al estómago,me digo que no han de volverme a pillar por el centro de Barcelona en estas fechas en busca del enésimo detallito que me faltaba.Más de siete horas entre un pelotón de gente,cargado de bolsas estratosféricas y con la tarjeta echando chispas,con colas interminables para que te atiendan,para que me lo envuelvan bonito y sin lazo éste pero a este sí se lo pone,para pagar y hasta para coger el coche de la última planta,para salir de ese mismo parquing,para llegar a casa entre semáforos interminables y torpedos que van a paso de tortuga buscando un sitio en la misma puerta del Corte Inglés.Subo el volumen del cd,aspiro profundo el humo y mi paciencia y me pregunto,ante este gentío de gente y gasto,¿dónde está la crisis?.
Estamos locos,seguramente.Quizás gastamos en estos días aquello que nos hará falta pasado mañana pero si cambiamos cómo somos ya no seríamos los mismos.Por lo tanto,ancha es Castilla y si después de reyes sólo hay papas y agua,al carajo,pero el nene bobalicón tiene su wii por cascabeles y no uno ni dos,hasta tres juegos ¿pasa algo?.Por no hablar de los restaurantes o los bares de copas.Ayer salgo y tuve serios problemas para que Jaume me viera y atendiera con la celeridad acostumbrada.Cómo sería que (la confianza da asquito)se me acercó y nos dejó la botella,una cubitera y medio saco de quicos para que no lo molestáramos.
¿Crisis? Pero sin miedos que todos los días sale el sol y mañana ya veremos.
Y siempre nos quedará la vocecita de los niños de San Ildefonso que si no me toca a mí,que sea a uno de vosotros.
Ya ha empezado el espectáculo y vamos a ver cómo manejamos este submarino.
Salud,compañeros.
El Tamboriler del Bruch.

Si, salud y forza al canut, no sé, si así se escribe, pero si se entiende lo demás no debe importar.

Salud para todos, para los no amigos, para los indiferentes y para los otros, y que a todos os atropelle el tren de la lotería con un buen coñazo, y tengáis que llevar los reales al banco con carretilla, pero si no os atropella, bueno mala leche, pero por lo menos que haya de lo primero, en abundancia, trataré de nombrar a los asiduos de este mentidero, sin tener en cuenta querencias, pasiones o políticas, culturas o credos.

Bnb.- Parece estos son otros tiempos entre nosotros, te deseo lo mejor, lo que más se acomode a tus necesidades y gustos.

Tamboriler.- Deja la fumadera, te matará, y creo no merece la pena entregar el pellejo con los pulmones acartonados y medio respirando, para tu persona lo mismo, y gracias por la defensa de mi neurona.

D. Félix, has cambiado tu forma de entender el mundo, estás más centrado, eso me satisface, y sí, creo que al final los de esta página defendemos lo que creemos son nuestros valores, y no estoy seguro que nos entendamos al completo, ni mucho menos, pero hay más sosiego, salud, pesetas y forza a la castañeta.

Muñoz.- Uno, dos o tres, o Uno solo, ídem de lo mismo, y que el próximo año no tengas que estar de mudanza, y si te termina de atrapar el Gordo lotero, compras esa oficina y pal carajo con las mudanzas, parece ser no te ayudaron tus amigos, pero estoy seguro que si tus hijos.

El Apuntao, deja de joder, acá cada quien tiene su cuero curtido, y no conseguirás hacerle cambiar de dirección, menos con vainas raras, usa la cabeza para algo más que tirar piedras, y usa las manos para recibir una parte del gordo, que tal vez lo necesites para tapar algún hueco.

Ciudadano Mas…, que termines el año habiendo profundizado en el árbol genealógico, hasta el mismísimo castillo, del Pelayo ese, y consigas ver si en tu entidad hay ríos o hilillos de sangre pelaya, u como las averiguaciones cuestan lana, que también te atropelle el tren de la fortuna, y de paso te compras un buen telescopio, para vigilar al Bnd y nos lo chismeas.

Al resto, a los que de vez en cuando asoman la gaita por estos lares, lo mismo de lo mismo, no es fácil que todos reciban de la misma nube, pero a veces un rociíto no le cae mal a nadie, aunque esté bien empapado.

Si no vuelvo a entrar, y antes de que empiece la danza de millones, la mejor de las loterías para todos es salud y voluntad de vivir, y que el próximo no sea peor que este, vaina bien difícil, pero que Oños, ese es el deseo de:

UNO MAS.

Uno Más, como bien sabes, las cosas verdaderamente importantes de la vida son las que no se pueden comprar con dinero. Pero aún así, no estaría de más que nos hubiera tocado un pellizco bueno a todos. Empiezo por aclararos que yo no he sido afortunado. Ojalá alguno de vosotros hayáis tenido suerte.

Gracias por tus buenos deseos hacia mi persona, y quiero que sepas que te deseo lo mismo, agrandado si puede ser, que todo te vaya muy bien y que no tengas que utilizar esas tablas numeradas que tienes debajo del catre en muchos años. Es cierto que son otros tiempos para nosotros, menos mal, después de todo lo que llovió en su momento, ahora sale el sol. Me alegro.

Y aunque parezca que no pega mucho con nosotros, los que no somos creyentes, la felicitación de estas fiestas, nada más lejos de la realidad. Los buenos deseos valen para todos. Lo que yo nunca he entendido es que ese espíritu de bondad y amistad no se extienda a todo el año. Y precisamente los más cristianos son los que menos cumplen con eso, todo son parabienes en Navidad y luego se olvidan de tantas buenas intenciones. Ahora practican eso de “siente un pobre a su mesa”, y el resto del año lo apalean.

De manera que aprovechando la contestación a Uno Más, hago extensiva la felicitación a todos los demás, sin excepción. Espero que el nuevo año le traiga un poco de cordura a mi amigo Muñoz, y abandone la triple personalidad, que vuelva por donde solía. También le deseo cosas buenas a Félix, y a ver si no tiene esos ramalazos y rebotes que de pronto le dan. Y que le voy a decir a mi hermano el Tamboriler, pues que todo le venga de cara, o si prefiere, como marinero que es, que el viento le venga de popa y le ayude en la travesía. Vamos, que todo le vaya redondo, como se merece, menos en una cosa, esa que él ya sabe. Aunque me parece que ni Dios ni el Diablo podrán truncar la marcha de su equipo, que no hay quien lo pare esta temporada.

Suerte a todos. Y un abrazo.

Bnb