Puente Castro - Leon

Vaya por delante mi reconocimiento personal a un buen tipo y mejor profesional. Tiene la mala suerte de soportar a jefes infumables y perder el trabajo cada vez que el PSOE se empeña en privatizarnos el agua. Esto va dedicado a ti José Manuel.

Después de este desliz personal vamos al grano. El PP ha anunciado que se adhiere a cuantas iniciativas lleve a cabo la Plataforma contra la Privatización del Agua de León. Supongo que será eso porque la Plataforma todavía no sabía un día después que solicitaba su integración.
Qué problema hay. Supongo que ninguno. Todos sabemos que se unen por populismo, el Partido de las Privatizaciones está dispuesto a vender su ideología por unos cuantos votos. Lo hacen otros y estamos acostumbrados, no pasa nada. También es verdad que elegir de portavoz para hacer pública esta decisión al mismo concejal que exigía privatizaciones masivas a comienzos de legislatura no ha sido muy inteligente. ¿Que el PP con Mario Amilibia intentó privatizar el agua hace dos legislaturas? No pasa nada rectificar es de sabios y la moción de censura protagonizada con Pelines paralizó el último intento. Entonces, ¿qué problema hay?.

Uno mucho más grave. Al parecer, incluyendo a alguna buena gente que no ha hecho deméritos para merecerlo, el Grupo de Concejales del PP fue sentenciado hace tiempo a no oler más los plenos municipales la próxima legislatura, salvo desde la categoría de público. No tienen nada que perder y su representatividad real del partido está bajo mínimos. ¿Eso es malo? ¿Impide que tomen esta decisión? Para nada, pero les da cierto mérito enfrentarse de esta manera a su partido aunque sea sabiendo su destino ya escrito. Después de todo con esta decisión han hasta firmado esta sentencia de muerte. Su división interna y el ridículo que supone es otro cantar.

El problema no es el Grupo de Concejales Populares en el Ayuntamiento de León, son un cero a la izquierda. El problema es el Candidato “in pectore” a Alcalde de León por el PP dentro de dos años y medio. Este sí que manda y se llama Cecilio Vallejo.

Pues bien, todos sabemos cual es la empresa que se quedará con el agua de León. Ya disfruta de este privilegio en un Ayuntamiento limítrofe con la capital. Pues bien, resulta que CV, mientras fue concejal con Amilivia y su mano derecha, demostró méritos suficientes como para ser calificado como el chico de confianza de esta empresa. Si saliesen a la luz las irregularidades de este periodo se prepararía un escándalo de narices. La etapa actual no le va a la zaga.

Muy bien una persona cercana a los intereses de esta empresa manda realmente en el PP local, resulta que su hermano trabaja para esta empresa, y no precisamente de peón. Entonces, ¿cómo valoramos el anuncio contra la privatización del agua hecho recientemente por los concejales del PP?

En pocas palabras, no pasará de ahí. Quien espere recursos a la decisión final, contenciosos heroicos contra la concesión o acciones verdaderamente eficaces contra el robo del agua, que no partan de la sociedad civil y alguna fuerza política de izquierda que vaya abriendo los ojos porque el PP tiene tanto interés en privatizar el Servicio de Aguas de León como el PSOE y la UPL.