Santa Olalla del Cala - Huelva

El clima político impulsa las ventas de «cava» andaluz

encarna freireabcdesevilla / sevilla

Día 23/12/2012 - 17.19h

Una decena de bodegas de la región elabora vinos espumosos

Hace más de veinte años que la Cooperativa Agroalimentaria Virgen del Rocío de Almonte lanzó «Raigal», el primer champán andaluz. La bodega onubense tiene acreditado este pedigrí en el registro de patentes y marcas. Actualmente, ya hay en el mercado más de diez etiquetas de espumosos de la región, la mayoría elaborados con el método tradicional champenoise, de doble fermentación en botella, con el que se logra que el CO2 (dióxido de carbono) se quede en el líquido y se produzca la efervescencia.

En conjunto, puede estimarse que se venden más de 200.000 botellas de «cava» andaluz, una partida muy modesta todavía, si se tiene en cuenta que solo Codorniu comercializa 105 millones y Freixenet, unos 90 millones. Sin embargo, la cosecha andaluza va a más y este año, según los bodegueros, se está vendiendo «como nunca». La mayoría de esta firmas vinateras ha vendido a estas alturas toda la producción, en algunos casos en la misma bodega, sin llegar siquiera a los puntos de distribución.

El primer motivo del éxito del espumoso andaluz, según coinciden las fuentes consultadas en el sector, es el clima político. La consigna «independízate del cava catalán» se está propalando en las redes sociales. Este boicot sordo —o no tanto— recuerda al que brotó en el año 2005 cuando Carot Rovira arremetió contra la candidatura de los Juegos Olímpicos de Madrid.
Champán del Aljarafe

Otra razón de la buena aceptación del champán andaluz es que el consumidor autóctono empieza a eliminar recelos y tabúes y a apreciar que la calidad del espumoso de la tierra es similar, y en algunos casos superior, a la de la arrolladora competencia catalana. Como nota curiosa, algunas bodegas andaluzas se atreven a colocar sus marcas en la meca del cava. Es el caso de Salado, que ha llevado su «Umbretum» a las tiendas de la mismísima Barcelona. Este primer y único cava de Sevilla, elaborado en el Aljarafe, saltó a los lineales en el año 2006 y ya lanza 15.000 botellas. Elaborado con «garria fina», uva autóctona de la comarca aljarafeña, es de los últimos en comercializarse.
Hay marcas que están rompiendo el mercado con botellas a menos de dos euros
En precios, la oferta regional es bastante competitiva, pese a que, como sucede en otros productos de consumo, la crisis está rompiendo también el mercado del «cava» con botellas a menos de dos euros. A estos caldos baratos —aseguran los expertos— se les puede pedir poco. Ni aroma a panadería, como requiere un buen champán, ni un buen perlage con gran densidad de pequeñas burbujas, ni persistencia de la esfervescencia en boca. Todo lo más, el «pum» del descorchado y adiós a todo el gas.

Los precios de las marcas andaluzas oscilan entre 5 y 7 euros. Pueden encontrase etiquetas desde 3,50 euros, como el «Matahermosa» de Campoameno de Jaén, hasta los 14 euros del brut nature «Barranco Oscuro», de la bodega del mismo nombre de la Sierra de la Contraviesa, en la Alpujarra granadina. Esta firma saca una partida pequeña (5.000 botellas) y es una de las primeras que se atrevió a criar champán en Andalucía, dando una vuelta de tuerca al método champenoise eliminando cualquier aditivo, con una vendimia más tardía de la uva «vigiriega», que se añade al vino para que fermente en lugar de la levadura. Es mosto sobre vino, con lo que se consigue un«cuvée» artesanal.

El procedimiento manual es también seguido por otro de los más antiguos en este sector, la bodega almeriense Valle de Laujar, que hace ya 14 años que encorcha su «Viña Laujar» un brut nature seco, que pasa unas treinta veces por la mano del hombre durante el proceso de rima, en el que se va girando la botella para que el líquido se aclare y los posos vayan agrupándose en el gollete, cerca de la boca, hasta ser expulsados en el degüelle. En este mismo pueblo de la Alpujarra de Almería, Laujar, donde hay 1.000 hectáreas de viñedos, hay una segunda marca de «cava», el brut nature, «Laujar de Andarax».

Barbadillo es la bodega andaluza que lanza el mayor volumen de espumoso al mercado: 40.000 botellas ya este año. Su marca «Beta», la única de espumoso de Cádiz, pudo descorcharse por primera vez en la Navidad de 2009, después de dos años de investigación y pruebas. Está elaborado con un 79% de uva palomino reforzada con un 30% de chardonnay, variedades cultivadas en su finca de Gibalbín. Monserrat Molina, enóloga de la bodega, destaca que el suelo calcáreo de Cádiz, de tierra albariza, se asemeja al de la región de Champagne y por ello da unos espumosos de burbujas muy finas que recuerda el «ritmo» del champán genuino.
Apuntes
Denominación de Origen: Andalucía está fuera de la Denominación de Origen del Cava, que comprende 160 municipios, casi todos de Cataluña y residualmente en La Rioja, Aragón, Valencia, Extremadura, Navarra y País Vasco. La comarca vinícola del Penedés, al sur de Barcelona concentra más del 95% de la producción total.
Marcas de Andalucía: En webs especializadas figuran las etiquetas granadinas «Barranco Oscuro», «Marqués de la Contraviesa» y «Veleta». En Almería, «Viña Laujar», «Laujar de Andarax» y «Dama del Este. Otras dos marcas se elaboran en la comarca del Condado de Huelva: «Raigal», la pionera, y «D. Infante». En Cádiz, Barbadillo saca un espumoso, «Beta». «Matahermosa es el cava de Jaén y «Umbretum», criado en elAljarafe, es el único champán de Sevilla.

https://ww.abcdesevilla.es/economia/20121223/sevi-cava-andaluz-burbujas-201212221842.html

el nuestro es mejor tiene mas grasia