Puebla del Príncipe - Ciudad Real

Matia tenia treinta y seis años y Mariana treinta y cuatro, Vivian en una casa no muy grande, construida con piedra y barro, de una sola planta y cuya techumbre era de brezo y retama, estaba situada en una calle que partía de la plaza de la iglesia en dirección a poniente, a unos cuarenta metros de la misma. Estaba compuesta de varias estancias, la mas cercana a la calle era la mas importante, era de unos cuatro metros de largo por tres de ancho, se accedía a ella por una puerta o postigo que estaba dividido transversalmente en dos mitades., en esta estancia a la izquierda estaba la chimenea, flanqueada a un lado por una mesa baja no muy grande donde se disponían algunas fuentes de barro esmaltado y vasos de madera, en el otro lado se amontonaban en un recipiente de esparto hojarascas y paja utilizada para encender la hoguera; frente a la chimenea había dos huecos que comunicaban con dos habitaciones independientes una de otra, eran dormitorios, en cuales había jergones y alguna mesilla de madera rustica, en las paredes había estacas de madera que hacían las funciones de perchero. Frente a la puerta que daba a la calle había otra puerta que daba paso a un corral donde había una cuadra y otros habitáculos de paredes bajas donde se tenían los cerdos y las gallinas, en el centro del corral había una higuera y junto al tronco dos piletas de piedra una de ellas mas tosca, que servia para que bebieran los animales, y la otra se mayores dimensiones, que tenia la utilidad de lavadero y fregadero al mismo tiempo.