Santiago del Campo - Caceres

COSAS QUE HAN PASADO YA.
El cierzo vate la llanura en este nublado y desapacible noviembre. El grupo de eucaliptos que rodea el cortijo (donde pasé buena parte de mi infancia) se inclina vencido por las fuertes ráfagas del mistral; con el sonido característico de sus hojas al chocar entre sí.
Los labriegos se tomaban un corto paréntesis, esperando la llegada de las cigüeñas, ya por S. Blas, con “febrerillo el loco” así llamado por los campesinos, dada su cambiante meteorología .
Desde el viejo caserío, hacia el sur, el horizonte se dilata hasta la sierra de La Mosca. Que enmarca el viejo asentamiento de lo que hoy conocemos como Cáceres. Construida sobre un otero de escaso
relieve. Su derruida muralla que alguna vez rodearía el casco antiguo. Se aproxima al arroyo de manera que el agua estaba asegurada en los posibles asedios, en tiempos ya de la reconquista, por el sur. Sus torres; luego desmochadas por los R.Católicos. Fueron levantadas por los nobles en la baja Edad Media. Sobre los cimientos de anteriores civilizaciones de Celtíberos, romanos y árabes. Lugar de fácil defensa por el sur. Donde un arroyo de escasa corriente ofrece sus aguas al visitante, en cualquier estación del año. Aún permanecen las ruinas de rudimentarios molino movidos por este mismo elemento. Acumulado en pequeñas valsas.
La cueva de Maltravieso; al sur. Nos cuenta como los hombres de las cavernas ya se establecieron
por aquí en lo que en tiempos serían inmensos encinares, bien provistos de caza. Milenios antes de
que Extremadura fuese preferida por los pastores de la trashumancia de Castilla y León, buscando la adelantada primavera y los suaves invierno para sus rebaños.
Hoy nos quedan los recuerdos de tiempos pretéritos.A los extremeños. La bizarría de otros tiempos, se nos trocó en humillante trato, respecto a otras regiones. De promesas incumplidas y nula consideración de nuestras prioridades.
No hemos aprendido la lección. Somos teledirigidos por el político de turno. Que nos seguirá engañando con falsas promesas. Mientras atiende a quienes nos humillan, las supremacías del norte. Emirey. Octubre. 2018