La Vilueña - Zaragoza

Hoy es jueves lardero, el dia del tallo, la unica vez que yo recuerde, que celebre este dia, tenia 6 años, todos los chicos, durante la semana estabamos exultantes, era la primera vez que ibamos a poder ir de excursion a comer "El Tallo", nuestra excursion fue hasta la torrecilla, entre nosotros contabamos con algunos chicos de 8 años, que nos acompañaban, fue un dia delicioso, sin las alas protectoras de nuestros padres, con todo el mundo conocido a tus pies, la primera sensacion, verdadera, de Libertad.

Al bajar de la torrecilla, vimos la clasica reunion de "hermandad" de los mas mayores, con los de Munebrega. Los gritos, las amenzas, los improperios, en fin lo clasico, pelea de piedras, insultos y algun adulto que aparece y calma los animos, el caso que recuerdo fue mi tio Custodio, el que puso paz.

Tambien recuerdo que ese dias llegamos rendidos a casa, pero no por eso, deseosos de que llegara el sabado, Dia de la Culeca....jo, dos dias casi seguidos, con lo bien que lo habiamos pasado ese dia, cuantas aventuras, y solo despues de dos dias volviamos a tener mas de lo mismo......que....bien....lo pa s are m osssssnnnssssssnnnnnnnsssssn.zzzzzzzzzzz.... Y quedabamos dormidos placidamente.

Bueno pues para los mostilleros que recuerdan cosas parecidas, os cuento como ha sido hoy despues de 45 años:

La verdad es que no me he levantado pronto, he dejado pasar el tiempo, para que el sol estuviera ya fuerte al levantarme, despues de desayunar un cafe con leche, me he ido a casa de la Paquita, pues me habia prometido unos tallos como los que hacia mi madre. Jolines.

Asi que una vez cobradas esas piezas, en casa me he hecho un bocadillo con dos tallos, un poco de vino en una botella pequeña de agua, otra de agua, y sin pensarlo dos veces, me he encaminado hacia la Herreria. Bajando al barranco he enderezado camino de la torrecilla arriba por la Balsa el real, al llegar a los riscos me he quedado anonadado por la imagen agreste de las aristas y de las piedras que se aguantan en las mismas, parece que estan haciendo equilibrio, espectacualr, siguiendo despues por el camino alfonbrado de musgo, al penetrar en el bosque de pinos, siempre subiendo y echando mano del agua, al llegar arriba he girado a la izquierda y enseguida me he encontrado en el altiplano que domina la comarca, osease, "la torrecilla", alli sentado y con la mejor vision que se pueda pedir a un restaurante, me he almorzado, los tallos en cuestion regandolos con buen vino, aunque han venido a mi aquellos años, relatados anteriormente, en aquellas disputas de los jovenes de distintos pueblos, y me he acordado de todos los que no estabais disfrutando como yo de un dia "del tallo", como mandan los canones en La Vilueña, y pensando: Al año que viene hay que montar una gorda el dia del Tallo.

Con cariño, el nuevo habitante.EPDA

QUE ENVIDIA......