ESTOY DESEPERADO SAURA ME HA ABANDONADO Bajo a la bodega. Hace apenas una hora que he llegado. La casa está llena de una neblina azul. No quiero abrir las ventanas para disiparla, ni quiero tocar nada. Todo permanece en una serena quietud. Tomo una botella de Carinius Gran Reserva del 98. Saco una copa de la alacena. Filtro el vino, con una "manga" de tela, sobre una jarra de cristal. Y de pronto aparece el néctar de los dioses entre mis manos. Gira como un tiovivo. Su color es rojo granate. Aproximo la nariz a la copa para aspirar sus aromas. El olor de mi tierra me inunda. Me siento bien y siento que el mundo es el pequeño círculo azul que me rodea. Viajar a cientos de kilómetros en sólo un trago es una experiencia singular. Fuera se siente el silencio de la calle. Algún perro ladra y su sonido lo esparce el cierzo de la tarde por todas las esquinas del pequeño lugar. Luego el vino pasa a la boca y ocupa todas mis preocupaciones. Me hace salir de la gran ciudad. Adormece mis sentidos. Me tranquiliza. Serena mi espíritu. Suena el tiempo en la torre. Aquí el tiempo se detiene a la espera de que el reloj marque sus cuartos y sus horas desde la maciza torre medieval. Hoy no saldré a la calle ni iré al Casino. Tengo tabaco y unos bocadillos en la mochila. Nadie sabe que estoy y nadie me hará preguntas. Odio las preguntas. Odio las preguntas bienintencionadas de las gentes del lugar. El vino es un buen amigo. El vino no hace preguntas. Ambos nos fundimos en una sola naturaleza y en un mismo espíritu. Somos cuerpo y alma a la vez. Un solo ser y dos naturalezas distintas. Vuelvo a tomar la copa entre mis manos como hace el cura en la consagración. Es un licor prodigioso, capaz por si mismo de transformarme, de darme vida nueva. No pienso en apurar la copa. Pienso en la felicidad que me da. En su enorme poder. En su belleza inigualable. Poco a poco mis músculos se van relajando. Me siento cómodo y bien. No quiero más felicidad que la que me da el vino. Mi amigo el vino. Compañero para siempre... Saura vuelve, te amo. Bilbao a 4 de Enero de 2008.
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