07-05-10 19:20 | #5256549 -> 5251899 |
Por:matina-p-f ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis Marcelo?.No hay más ciego que quien no quiere ver.Es tan meridiana la raiz del problema que necesitan toneladas de argumentos para convencernos de nuestra responsabilidad en el asunto,o para que nos estemos quietos aceptando mansamente las recurrentes embestidas de las consecuencias de su egoismo feroz. De la nota que nos trasmites me quedo con ese párrafo resumen de la eterna dinámica del sistema:"es el axioma capitalista lo que dicta la socialización de las pérdidas y la privatización de los bensficios" Bueno,que gracias por recordarnos de que va la movida y un abrazo. Matina | |
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26-05-10 16:14 | #5414183 -> 5256549 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis LLAMAMIENTO A UNA MOVILIZACIÓN EUROPEA CONTRA LA DICTADURA FINANCIERA 25 de mayo por CADTM Internacional (Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo) Desde hace meses se están celebrando en Grecia manifestaciones contra el plan de austeridad que el gobierno, los dirigentes europeos y el Fondo Monetario Internacional han decidido imponer al pueblo griego. Hoy la dirección del país ya no esta en manos de sus electores sino que está tutelada por el FMI y las instituciones europeas, fuera de todo control democrático. Desde comienzo de 2010, respondiendo al llamamiento de los sindicatos y de los partidos de izquierda, se han llevado a cabo muchas huelgas generales. Esta lucha ejemplar es el eco de las de los pueblos de Europa oriental (Rumania, Hungría, Letonia, …), a las de los países de los Balkanes (Bosnia …), de Irlanda y, recientemente, Islandia, todos ellos confrontados a planes de austeridad similares. Los pueblos de todos los países de Europa han sido, son o serán víctimas de estos ataques que pretenden hacer pagar a los asalariados, a los jubilados, a los parados, los efectos de una crisis profunda de la que no son responsables. Son los “mercados financieros” (bancos, aseguradoras, fondos de pensiones, …), con sus prácticas especulativas al servicio de los accionistas y rentistas, quienes son responsables de esta crisis financiera que tiene como blanco la deuda pública de los países. ¿De dónde viene esta deuda pública? Principalmente es fruto de políticas fiscales favorables a los individuos más ricos y a las grandes empresas. La bajada de ingresos de estos regalos a los ricos han llevado a los gobiernos a financiar por medio de créditos una parte cada vez mayor de sus presupuestos. Más recientemente la caída de la actividad económica ha tenido como consecuencia una reducción de los ingresos fiscales. Por último, los planes de salvamento de los bancos han agravado aún más los déficits públicos, pero los poderes públicos no han aprovechado para hacerse con el control del sector financiero y cambiar sus prácticas. ¿Qué se ha financiado con ella? La deuda pública de los Estados no ha servido para financiar la creación de empleo, ni para la mejora de los servicios públicos o las infraestructuras. Sólo ha servido para salvar a los culpables y para satisfacer los déficits presupuestarios provocados. ¿A quien aprovecha? Precisamente a aquellos que ya se han beneficiado de los bajos impuestos (los más ricos), los bancos y las grandes empresas que, al mismo tiempo, especulan con los títulos de la deuda pública y se embolsan los intereses de las obligaciones del Estado. Una doble recompensa para los culpables. ¿Quién va a pagar? ¡Y un doble castigo para las víctimas! Es a las poblaciones pobres, a los que viven de su trabajo, a quienes hoy se va a exprimir para correr en ayuda de los beneficiarios de la deuda: Bajada de los salarios y las pensiones. Ruptura de la protección social. Destrucción de los servicios públicos. Cuestionamiento del derechos al trabajo. Aumento de la fiscalidad por consumo, particularmente el IVA Estos planes de austeridad no sólo no servirán para arreglar las causas reales de la crisis sino que van a hundir a millones de seres humanos en la miseria y la precariedad. La red-CADTM-Europa hace un llamamiento al conjunto de fuerzas políticas, sindicales y asociativas a organizar en la unidad, -a escala nacional y europea- las movilizaciones necesarias para oponerse a estos ataques contra los pueblos de Europa. ¡Neguémonos a pagar la crisis. Preparemos un amplio movimiento social contra la deuda y las causas de esta crisis!! En lugar de estos planes de austeridad es necesario atacar las raíces del problema: Expropiando los bancos y su transferencia al sector público, bajo control ciudadano. Realizando una auditoría ciudadana de la deuda pública con objeto de anular la deuda ilegítima. Instaurando una verdadera justicia fiscal y una justa redistribución de la riqueza. Luchando contra el fraude fiscal masivo del que son responsables las grandes empresas y los más ricos. Poniendo bajo la lupa a los mercados financieros por medio de la creación de un registro de propietarios de títulos, prohibición de ventas a descubierto, … Reduciendo radicalmente el tiempo de trabajo para crear más empleos (reparto del trabajo), manteniendo los salarios y las pensiones. Socializando las muchas empresas y servicios privatizados durante los últimos 30 años. Creemos una amplia movilización popular, más allá de las fronteras. Es necesario hacer converger las luchas locales al terreno internacional para atacar las políticas de regresión social. www.cadtm.org | |
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29-05-10 12:49 | #5433480 -> 5414183 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis LAS PROPUESTAS MISERABLES DEL FONDO MONETARIO INTERNACIONAL Juan Torres López 29-05-2010 El Fondo Monetario Internacional tomó de nuevo las riendas hace meses y se dispone a seguir imponiendo doctrina, ahora con la excusa de que las medidas que propone son las imprescindibles para salir de la crisis y del problema de deuda que ésta ha provocado. Los economistas del Fondo que han venido a dictar sentencia a España, como hacen en tantos otros países, son los que predican austeridad a quienes ganan unos cientos de euros mientras ellos se fijan a sí mismos sueldos multimillonarios, los que exigen recortes de gasto a los Gobiernos desde hoteles de cinco estrellas y limusinas que pagamos los contribuyentes. Los que se declaran políticamente neutrales pero tratan con favor a los dictadores y alteran sin rubor las decisiones democráticas que toman los poderes representativos. El Fondo es la institución que reclama buen gobierno a los Estados pero que actúa con una opacidad absoluta y sin control alguno, la que dice defender la libertad pero tiene internamente un funcionamiento completamente antidemocrático. La que reclama rigor y acierto a los gobiernos pero que nunca ha realizado una autocrítica efectiva ni evaluado seriamente sus múltiples y fatales equivocaciones. El Fondo Monetario que ahora dice a España lo que tiene que hacer es una institución doctrinaria que aplica siempre un mismo credo sea cual sea la circunstancia o el país que analiza: recorte de gastos públicos, privatizaciones, liberalización de servicios, desregulación financiera, libertad de movimiento para los capitales, apertura de puertas al capital extranjero... siempre lo mismo, siempre el viejo credo liberal, sea cual sea la gravedad de los problemas que origina su aplicación. Pero el problema más grave del Fondo no es ni siquiera que sea doctrinaria sino que es una institución incompetente. Sus economistas fallan constantemente y de forma estrepitosa. Sus prejuicios ideológicos no les permiten contemplar y analizar correctamente la realidad, se equivocan en los diagnósticos, no saben hacer predicciones adecuadas y, lógicamente, nunca logran los objetivos que se proponen cuando actúan (salvo, eso sí, el de dar vía libre a los poderosos). Podrían traerse a colación docenas de ejemplos de errores y fallos garrafales en sus informes y de previsiones completamente equivocadas, más propias de aficionados que de auténticos profesionales. Valga como una simple muestra el despiste colosal que manifestaron los economistas del FMI sobre la situación de la economía mundial en abril de 2007, cuando ya otros muchos, más inteligentes y mejor preparados, o simplemente más honestos, habían advertido lo que estaba pasando. Decía entonces el Fondo en "Perspectivas de la Economía Mundial" (página XII): "los riesgos para la economía mundial disminuyeron desde la edición de septiembre de 2006 (...) lo que nos parece más probable es que el vigoroso crecimiento mundial perdure (...) comparando los datos actuales con los de septiembre (2006), no hay tantas razones para preocuparse por la economía mundial (...) la economía estadounidense se mantiene firme en general". O también el error de diagnóstico sobre lo que podría ocurrir en nuestro país cuando en marzo de 2009 decía que el déficit público español sería del 6% en 2009 y 2010, justo la mitad del efectivamente registrado. Con semejante carencia de ojo clínico, es normal que el Fondo Monetario Internacional no consiga nunca lo que se propone, ni siquiera en términos de tasas de crecimiento y mucho menos de estabilidad macroeconómica y financiera. La evidencia empírica indiscutible es que en la época en que se vienen aplicando las políticas que recomienda el Fondo Monetario Internacional, desde los primeros años ochenta, el crecimiento de las economías (mucho más si no se considera el de China y otras naciones que no siguen sus políticas) ha sido mucho más bajo que en las etapas (o en los países) en que no se han aplicado. Y un trabajo reciente ha demostrado que ha habido más crisis cuando han predominado las políticas liberales que propugna el FMI, en los años treinta y a partir de los ochenta del siglo XX, y que hay una gran correlación entre la mayor movilidad del capital (otro de los principios políticos del Fondo) y las crisis bancarias. (Carmen M. Reinhart y Kenneth S. Rogoff, Banking Crises: An EqualOpportunity Menace, National Bureau of Economic Research, Working Paper 14587, 200 ![]() Los poderes financieros internacionales se benefician de las políticas del Fondo no porque sean eficaces para lo que dicen buscar (crecimiento, empleo, estabilidad...) sino porque son las que les proporcionan las mejores condiciones para aumentar sus beneficios. Y eso lo pueden conseguir porque el Fondo nunca evalúa el impacto social o sobre la desigualdad y la pobreza que tienen sus políticas, como él mismo ha reconocido (IMF, Poverty and Social Impact Analysis in PRGF- Supported Programmes, Washington, 2002), porque es completamente ajeno y ciego respecto a cualquier asunto relativo al bienestar social o al cuidado del medio ambiente. Y es esta institución de economistas bastante incompetentes la que ahora viene a España a decir qué debe hacer un Gobierno legítimo elegido por los ciudadanos para hacer frente a una crisis que ha provocado la banca internacional. Sus tres propuestas principales son exactamente las mismas que hacen la patronal, la banca, el Banco de España y los economistas que están a su servicio. La primera es la privatización progresiva de las cajas de ahorro. El FMI no dice nada de la banca española, se calla para ocultar que su situación es exactamente igual que la de las cajas. No reclama transparencia, no hace ni dice nada para obligar a que la banca sea lo que debería ser: la fuente de financiación de la actividad económica. Nada propone para que las empresas y las familias vuelvan a tener el crédito que se necesita para recuperar la actividad. La banca es quien ha quebrado y la que ha provocado la crisis y lo que el FMI propone es que como premio se les entreguen las cajas de ahorros. Es difícil imaginar una bellaquería más grande. Con mucha palabrería pero sin destapar la situación de la banca, lo único que busca el FMI es poner las cajas de ahorros en la bandeja del capital privado para que así se recupere una banca quebrada, aprovechando el mercado que dejarían las cajas y adquiriendo sus activos, como en tantas otras ocasiones, a precio de saldo. La segunda propuesta del Fondo es ya conocida, la reducción del gasto público. He explicado en otros textos que en una coyuntura recesiva eso sólo puede conducir a la depresión y a hundir aún más nuestra economía. Es lo que ha ocurrido en muchísimas otras ocasiones y en otros países cuando se ha actuado así. Como acaba de señalar el Premio Nobel Joseph Stiglitz, "la austeridad lleva al desastre" (Le Monde, 22.05.2010), y ahí es donde nos quiere llevar el FMI para que los bancos y las grandes empresas ganen más dinero todavía. La tercera propuesta es la reforma laboral "radical y urgente" en la línea que solicita la patronal y que principalmente se basa en reducir la capacidad de negociación de los trabajadores mediante la descentralización de la negociación colectiva y el establecimiento de nuevos tipos de contrato. Decir que se puede resolver el problema del empleo flexibilizando el mercado laboral al mismo tiempo que, como acabo de señalar, se deprime la actividad debilitando la demanda efectiva es sencillamente una mentira gigante y grotesca. De esa manera es imposible que las empresas (sobre todo medianas y pequeñas) creen puestos de trabajo. Sólo se consigue que ganen más las muy grandes que tienen demanda cautiva gracias a su poder sobre el mercado, que es lo que se trata de salvar. En definitiva, el Fondo Monetario miente cuando presenta sus propuestas para la economía española porque no dice lo que de verdad pretende; oculta los efectos reales que tendrán las políticas que propone; y, para colmo, no permite el debate social sobre ellas sino que se limita a imponerlas porque su incompetencia le impide argumentarlas científica y rigurosamente. Juan Torres López es catedrático de Economía Aplicada en la Universidad de Sevilla, colaborador habitual de Rebelión, editor de www.altereconomia.org y miembro del Consejo científico de ATTAC-España. Su web personal: www.juantorreslopez.com | |
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29-05-10 13:51 | #5433758 -> 5433480 |
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RE: La crisis ¿DÓNDE ESTÁ LA GENTE? I Daniel Guerra 29-05-2010 Hace unos días tuve una interesante conversación con un alumno, un estudiante de Filosofía inteligente, que razona sus argumentos y analiza cabalmente el entorno sociopolítico. Se preguntaba cómo acabaría la crisis del capitalismo, y esperaba una reacción popular, la aparición de una nueva izquierda y la extensión de la democracia participativa. Yo le mostré mi escepticismo. La mayoría de ciudadanos estamos de acuerdo en el análisis: los agentes que han provocado la crisis han sido ayudados por los Estados con fondos públicos, mantienen sus posiciones de dominio y condicionan la recuperación económica a su favor con ataques especulativos contra focos de debilidad como la zona euro. Desde la caída de Lehman Brothers, llevamos dos años escuchando por parte de los gobernantes cantinelas sobre la refundación del capitalismo y la regulación de los mercados, pero al cabo de ese tiempo seguimos igual, si no peor. No cabe esperar grandes regulaciones del mercado por parte de políticos liberales, conservadores, socialdemócratas y democratacristianos que volverán al sector privado tras su paso por la política. El aplazamiento de la regulación europea de los hedge funds a petición de Brown fue muy sintomático: el líder laborista, supuestamente de izquierdas, temía los efectos electorales de una medida de izquierdas. El líder laborista no quería molestar a los sindicatos, sino a los financieros de la City: el mundo al revés, o ya no tanto. Paradójicamente, las únicas intervenciones activas de los gobiernos han sido para ayudar a los bancos y recortar derechos sociales. Las ayudas a los bancos se han justificado por el temor a su falso chantaje: si caen ellos, caemos todos. No es cierto: si caen ellos, caen los accionistas y los directivos, pero no los depositantes, cuyas cuentas están cubiertas por los Fondos de Garantía de Depósitos. Y si de crédito a familias y PYMES se trataba, lo propio era que el Estado, mediante un banco público, lo facilitara directamente. Al final, los fondos públicos han sido utilizados por la banca para equilibrar sus balances, pedir préstamos al BCE al 1% y comprar deuda del Estado al 4%: negocio redondo. En el caso español, habría sido más lógico que un Gobierno supuestamente socialdemócrata prestara dinero público a los bancos a cambio de acciones antes que de activos financieros. Así, el Estado ha perdido la oportunidad de entrar en el capital social de los mismos y de poder controlar el destino del dinero facilitado. | |
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29-05-10 13:58 | #5433785 -> 5433758 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis ¿DÓNDE ESTÁ LA GENTE? Daniel Guerra 29-05-2010 El capitalismo no está en crisis, sino en reestructuración. Una cierta izquierda lo plantea como derrota del neoliberalismo por sus devastadores efectos: todo lo contrario, pues para el neoliberalismo tales efectos no son intrínsecamente indeseables, sino contingentes. La mano invisible descrita por Adam Smith (*), esa mano que está detrás de todas las operaciones y que acaba ajustando los factores económicos, actúa en clave de selección natural, en la que los fuertes se están comiendo a los débiles. No estamos, pues, ante una crisis DEL capitalismo, sino EN EL capitalismo; no una crisis del sistema, sino de algunos de sus componentes, que otros no sólo no la sufren sino que se benefician de ella. El sistema se está adaptando, y tras los necesarios ajustes -con la agradecida ayuda de los Estados- resurgirá con más fuerza que antes. Para el marxista, el capitalismo ha fallado; para el neoliberal, han fallado los débiles y los chapuceros, pero el sistema tiene larga vida porque no hay otro. Algún día, esa mano invisible hará encajar las grandes cifras macroeconómicas y todos volveremos a vivir por encima de nuestras posibilidades, que son cuatro días. En este contexto, ¿dónde quedan los ciudadanos, la democracia, la izquierda? Ni están, ni se les espera. En el combate entre Estado y Mercado, claramente vence el segundo. Constatamos que los bancos y los especuladores se aprovechan de la situación y consolidan sus posiciones de dominio económico y político. El abuso es manifiesto y provoca más desempleo, más desigualdad, más recortes sociales y mayor dependencia de los Estados, cuya soberanía se ve limitada. Todos lo vemos. ¿Reaccionamos? No. Algo en Grecia, la primera víctima propiciatoria, pero poco más. El sentido internacionalista de una verdadera izquierda se tomaría las revueltas griegas como el anticipo del fantasma que va a recorrer Europa. Presentaría a los ciudadanos griegos como la vanguardia del movimiento popular europeo que se alzaría contra este capitalismo arbitrario y salvaje. Sin embargo, las revueltas griegas se ven como eso, específicamente griegas, lejanas, televisivas. De momento, parece que no hay riesgo de contagio y los capitalistas siguen tranquilos. En el caso español, ni los sindicatos se atreven a convocar la Huelga General. Su dependencia de las subvenciones estatales les ha llevado a una identificación excesiva con un gobierno débilmente socialdemócrata, y en este momento no gozan de la credibilidad necesaria para provocar la contestación popular. Por otra parte, el sindicalismo de clase se ha convertido en un sindicalismo de empresa: se movilizan los empleados de un centro de trabajo ante un cierre o un ERE, pero eso no provoca la solidaridad automática de los demás trabajadores. En una sociedad tan estratificada como la actual, el concepto de clase se ha diluido. La dualidad creciente entre obreros empleados y desempleados identifica a las centrales sindicales con la defensa de los primeros y el olvido de los segundos. Por ello, observamos cómo las respuestas a la crisis son mucho más individuales que colectivas: cada uno se busca su salida, lo que detrae energías para una contestación masiva. La escasa asistencia al reciente Primero de Mayo es un ejemplo de la apatía y del desinterés de muchos ciudadanos por articular una respuesta de clase o cívica contra la crisis. Ni los sindicatos ni las izquierdas están en condiciones de movilizar a la sociedad. La supuesta izquierda gobernante es la que, con todo el dolor de su corazón, recorta los derechos sociales como les mandan los mercados y la UE; y la izquierda alternativa no encuentra ni su espacio ni su discurso, envuelta en interminables refundaciones y peleas internas. A falta de líderes y de un discurso coherente, el juez Garzón se erige en icono de una izquierda que se moviliza por causas del pasado más que del presente. | |
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29-05-10 14:07 | #5433811 -> 5433785 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis ¿DÓNDE ESTÁ LA GENTE? III Daniel Guerra 29-05-2010 El alumno de Filosofía, impecable en su discurso cívico, confía en las posibilidades de Internet y de la democracia participativa. Cuidado: la red abre espacios de democracia de opinión, pero no necesariamente de movilización. En términos de Manin (**), amplía los márgenes de la democracia de audiencia, pero no de la participativa. Podemos expresar abiertamente nuestra opinión más radical e intransigente en los numerosos foros abiertos en la red, pero no está claro que eso inquiete a los poderes financieros si no se traslada a la calle. En cuanto al desarrollo de la democracia participativa y deliberativa, la Ciencia Política sigue analizando más o menos los mismos casos desde hace años: los ensayos de democracia local en Porto Alegre y el Suroeste de Brasil, el voto electrónico y las listas independientes de los caucus norteamericanos, la elaboración social y abierta de los presupuestos en algunos ayuntamientos, y las consultas que de vez en cuando se convocan en diversos municipios. La democracia participativa se mantiene en un contexto local y en una fase experimental. La representativa, por su parte, sigue mediatizada por las élites de unos partidos cerrados, poco flexibles al debate interno y reacios a las listas abiertas y desbloqueadas. Mediante las redes clientelares que extienden en los territorios que gobiernan, estrechan sus relaciones con los poderes económicos. Los sistemas de partidos nacionales están bien encauzados por las élites dirigentes, y mientras tanto la Unión Europea sigue con su déficit democrático. La ofensiva actual del neoliberalismo contra el poder político hace que el mercado condicione al Estado y la economía a la política, cuando debería ser al revés. La democracia liberal acaba siendo una quimera. En esto, no le faltaba razón a Marx. Por lo tanto, muchos ciudadanos conocemos el problema y acordamos el diagnóstico: el capitalismo no funciona, es injusto y socava la democracia: hace falta una alternativa. Pero ¿quién la define, quién la defiende y quién la aplica? El comunismo fracasó y la socialdemocracia se ha vendido. ¿Quién le pone el cascabel al gato, y cómo ha de ser este cascabel? Sinceramente: no lo sé. Hay activistas, políticos y un pensamiento económico de izquierdas. Pero no hay líderes ni organización. No falta la alternativa teórica, sino la práctica. Falta el referente. Y falta lo básico, el agente protagonista: el pueblo, cuya soberanía está en discusión y no hace gran cosa por evitarlo. Por desidia, por desengaño, por cansancio o por individualismo, no se prevé una contestación social en un país con casi cinco millones de parados. Con la que está cayendo, la pasividad es la nota dominante. La actitud de la clase política no es modélica, el desencanto derrumba la esperanza, la educación se resiente y la televisión nos inunda con programas en los que los modelos sociales son personajillos que triunfan sin estudiar ni trabajar. Programas deleznables que son vistos diariamente por millones de personas. Nuestro entorno cultural no es cívico, crítico y social, como en el norte de Europa. Nuestro entorno cultural es consumista, materialista, individualista y, en cierta medida, comprensivo con la corrupción. La corrupción económica, la política y la cultural es la que define en buen grado esa mano invisible de la que antes hablaba, y que penetra en todos los resortes del poder. Este es el entorno que nos envuelve, en el que vivimos y respiramos. Es un entorno cultural capitalista, y no es fácil impedir que nos contamine. La izquierda alternativa juega, voluntariosamente, en terreno visitante. El resultado es una encrucijada pirandelliana: o la izquierda no encuentra a su pueblo, o el pueblo no encuentra a su izquierda. Económicamente, el pueblo no se plantea otro sistema, y políticamente vota a una izquierda de mentirijillas para que no gane la derecha de verdad. Las diferencias políticas cada vez son más inapreciables, pero aún nos creemos que sirve de algo votar a Sagasta para que no gane Cánovas. Hace más de treinta años, Lluís Llach nos contaba, en Damunt d´una terra, que la gente lo tenía más claro: “en Maurici sap molt bé / que si només dubta poca cosa té / En Maurici sap què fer/ trobarà els companys i sortirà al carrer” (“Mauricio sabe muy bien / que si sólo duda poca cosa tiene / Mauricio sabe qué hacer / encontrará a los compañeros y saldrá a la calle”). Mauricio sabía qué hacer: no dudar y salir al encuentro de la gente. Entonces la gente, los compañeros, estaban ahí. Hoy están viendo la tele, tomando unas cañas, preparando las próximas vacaciones o buscándose la vida como pueden, que no es poco. La gente está demasiado ocupada para pensar en revueltas contra el sistema. Por favor, no molesten. Nota: (*) Smith, Adam (1776, ed. 2009), Una investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones, Madrid, Alianza Editorial. (**) Manin, Bernard (199 ![]() | |
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31-05-10 01:15 | #5441164 -> 5433811 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis ¿RECORTES EN EL DESARROLLO HUMANO? Adela Cortina,30-05-2010 Cuesta creer que la recuperación de la economía española tenga que pasar, entre otras cosas, por recortar la inversión en colectivos especialmente vulnerables: las personas dependientes, los jubilados, que verán congeladas sus pensiones, y las mujeres que van a dar a luz, con las que había un compromiso. No parece que ninguno de ellos sea responsable de la crisis económica, ni tampoco de otras crisis que oscurecen el horizonte, y justamente para ellos, por su especial vulnerabilidad, el recorte es a todas luces dramático. Es en estos casos cuando se hace patente que hay ciudadanos de primera y de segunda, y que los de segunda están en permanente situación de riesgo, un riesgo que no sólo se corre, sino que se transforma en amarga realidad. Pero falta un cuarto colectivo, que ni siquiera parece contar por su lejanía, el de las personas que viven en países en desarrollo. Lo bien cierto es que a cuenta de la crisis se retrasa todavía más el propósito de alcanzar los célebres Objetivos de Desarrollo del Milenio, que proclamó en 2000 la Asamblea General de Naciones Unidas, contando con los líderes mundiales de 189 países, objetivos cuyo cumplimiento se preveía inicialmente en 2015. Realmente, no pueden ser más básicos, calificarlos de modestos es poco: erradicar la pobreza extrema y el hambre, lograr la enseñanza primaria universal, promover la igualdad entre géneros y el empoderamiento de la mujer, reducir la mortalidad de los niños menores de cinco años, mejorar la salud materna, combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades, garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y fomentar una alianza mundial para el desarrollo. ¿Puede pedirse menos en materia de justicia? Pues los recortes por la crisis de distintos países y del nivel global retrasan su cumplimiento no a una fecha por lejana que sea, sino ad calendas graecas, teniendo en cuenta que los griegos no tenían calendas. Por si faltara poco, nobleza obliga, y la presidencia de la Unión Europea debería llevar aparejado un plus de ejemplaridad, especialmente relevante en temas de desarrollo humano, que afectan a los más desprotegidos. Ciertamente, la salida de la crisis vendrá de reformas estructurales y sobre todo de cambio en los modelos de vida, apostando por la transparencia, la profesionalidad, la generación de confianza y de amistad cívica. Pero, en lo que afecta a reducir gastos, podría muy bien prescindirse de asesores, ministerios, direcciones generales y un buen número de cargos superfluos, poner tasas a las transacciones financieras, mirar con lupa fraudes y corrupciones, y sobre todo no invertir lo recaudado en todo aquello que lleva a conseguir votos, aunque sea estéril o incluso esté contraindicado. Pero reducir la ayuda al desarrollo humano es radicalmente inadmisible. Adela Cortina es catedrática de Ética y Filosofía Política de la Universidad de Valencia y directora de la Fundación ÉTNOR | |
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31-05-10 01:47 | #5441230 -> 5433811 |
Por:Marceloo ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: La crisis FMI:EL ENEMIGO DE LOS PUEBLOS Francisco Morote Costa Archipiélago Noticias 30-05-2010 Cuando el Fondo Monetario Internacional ( FMI ) hace acto de presencia en un país, es como si lo visitase uno de los jinetes del Apocalipsis. A cambio del préstamo que recibe para el pago de su deuda y la reducción de su déficit el Fondo, que opera en beneficio de instituciones crediticias privadas, le impone un plan de austeridad conocido como Programa de Ajuste Estructural ( PAE ). Lo característico del PAE es que las medidas que dicta siempre van en perjuicio de las clases populares y de los trabajadores. No es de extrañar si se tiene en cuenta que responde a una filosofía ultraliberal que pone el acento en la flexibilización del mercado laboral, léase abaratamiento del despido y desaparición de la negociación colectiva, y en la reducción del gasto social que traducido al lenguaje común, significa recortar los servicios públicos de sanidad, educación, pensiones, el estado de bienestar en una palabra, decisivo para la cohesión social e indispensable para las clases más vulnerables del sistema. En suma, que a despecho de lo injusto e inmoral que resulte, el PAE hace recaer invariablemente el peso de la carga de los sacrificios sobre los más débiles economicamente hablando y no sobre los más poderosos. Esta circunstancia verificada desde hace muchos años en África, Asia y América Latina, se pone en evidencia de nuevo, una vez más en Europa, empezando por Grecia, siguiendo por España ( como dice un informe argentino en el diario Página 12," El FMI ahora se regodea con España"), Portugal,etcétera. De ahí que no pueda quedar ya la menor duda sobre la parcialidad y el carácter antipopular de los PAE del FMI. El FMI es un auténtico enemigo de los pueblos y por eso viene siendo condenado por "tribunales de opinión" como el Tribunal Permanente de los Pueblos, heredero histórico del célebre Tribunal Russell, desde la Sentencia de Berlín de septiembre de 1988 hasta nuestros días. Es cierto, y no es casual, que estas condenas y la existencia misma del Tribunal son desconocidos para la mayor parte de la ciudadanía. De eso se encargan precisamente los medios de desinformación del sistema pero, pese a todos los esfuerzos para evitarlo, cada vez somos más los que sabemos que como dijo en su momento Eduardo Galeano, " el Fondo Monetario Internacional y su gemelo el Banco Mundial son instrumentos de extorsión de un sistema que reduce a la condición de hormigas a la inmensa mayoría de los seres humanos". Cuando el FMI estaba más denostado, abandonado y olvidado por muchos países que sufrieron sus Programas de Ajuste Estructural-Hugo Chavez le dijo:Good bye-viene a Europa con nuevos bríos para ensañarse con los pobres. | |
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