Muelas de los Caballeros - Zamora

Hola Amigos de foro, me presento, soy de Madrid, y vivo en esta abrumadora cuidad de prisas y ruido, aunque no me importaría haber nacido en Muelas de los Caballeros. Mi pueblo adoptado
Por lo que a mi respecta os contaré una breve historia verídica y así se puede entender mi afición o "Pasión por Muelas".

Era por la epoca del servicio militar, por los años setenta y tantos... estabamos de maniobras por los montes del Teleno, provincia de León y muy cerca de los montes de Cabrera que hacen linde entre Zamora y León, en una de las arducias de nuestro entusiasta Capitán se le ocurrió la idea de ir a conocer el famoso lago de truchillas, que distaría tres montes mas o menos ( andando, subiendo y bajando),y todo esto en pleno mes de agosto andando entre las urces y escobas, ya que se nos despistó el lago, después de llevar mas de dos días andando, en uno de los pinares de la sierra ya en la Cabrera, nos encontramos con un gentíl hombre ( Daniel), que se ofreció a sacarnos de nuestra perdición y llevarnos a su pueblo: Muelas de los Caballeros, estaríamos por los montes de Velilla; nos llevaba de tal manera y a una velocidad andando que era imposible seguirle, pero nos sacó y estuvimos por el pueblo, y otros de la zona, Quintanilla, Justel, Rioconejos, y quedé tan prendido de la belleza de esos montes que me dije para mí: Yo tengo que venir a vivir por aquí. Transcurrío el tiempo me licencíe, y me puse a trabajar, y conocí a una amiga que me presentó un buen amigo de la Mili. Este (Tomás)ya tenía novia (Choni) y una semana santa decidimos ir todos de excursión al lago de Sanabría en tienda de campaña, cerca de este, se puso a nevar con tanta insistencia y pensando que nos podríamos quedar tirados en la carretera, Charo mi amiga por aquel entonces, nos aconsejó que debíamos ir a su pueblo ( Muelas ),para resguardarnos de la fuerte nevada, cosa que así hicimos.
Cual fúe mi sorpresa que la persona que nos abrío la puerta de su casa( la de Charo), fué ni mas ni menos que su padre, aquel gentíl hombre que nos sacó de los montes de Velilla unos años antes, ni que decir tiene que esa persona fué mi suegro. Como vereis los sueños se cumplen. Os contaré historias de Muelas y os iré preparandos 7 rutas, una para cada día de la semana partiendo desde Muelas.

Ni que decir tiene que aquel gentil hombre que andaba como el viento, más ligero aún que los soldados a pesar de ser ya mayor, el que resultó finalmente ser suegro de José María, o lo que es igual, padre de Charo, su mujer... Que aquel gentil hombre, digo, era exactamente mi padre. Porque Charo es exactamente mi hermana. No esperaba yo encontrarme hoy con él, por lo que le agradezco a mi cuñado no sólo la ocasión del encuentro, sino también la originalidad con la que lo ha propiciado. Y le saludo. "Ave, Caesar, morituri te salutant".

Añadiré solamente que es verdad, que andando por el monte, aquel gentil andariego dejaba sentado a cualquiera.

Os diré un secreto: Jose y Charo tienen trillados los montes de Muelas, especialmente los de Velilla. Es más, ya les vienen pequeños y están ampliando horizontes... Son tan andariegos como pudo serlo mi padre.

Un abrazo

A este paso, la verdad, creo que mi próximo viaje será a Muelas de los Caballeros, que algo de común tiene con el mío porque mi pueblo, se llama Real ciudad de Gáldar de los caballeros!!!!, aunque siempre le llamamos Gáldar a secas, es muy largo el nombre, jajaja.
Pues se me ha desatado tanto la imaginación, con esos hermosos valles verdes, y ese hermoso lago, que aquí no tenemos nadita de eso, que me estoy enamorando de un ideal de pueblo!!!!!
Una pregunta, hay casas rurales que te puedan dar acogida si vas????
Un abrazo
Natalia

Hola Jose, Es una tremenda historia la que has contado, bonita porque todo terminó bien, no sólo tienes una casa para vivir en el pueblo, sino que conquistaste a la hija de vuestro salvador. ¡Valla capitán¡¡¡¡
Bueno, ya nos prepararás esas rutas, una ya la hemos andado juntos.
Un abrazo.

Aunque no te conozco, antes de leer el comentario de Mariano, ya sabía que eras su cuñado, el único motivo está en que bien a través del foro o bien particularmente, cuando me interese por esa casa tan bonita que teneis en Muelas,Mariano, hizo un comentario de su hermana Charo y de su marido el madrileño. Digo esto, porque como verás, igual que algunos parajes de los que nombras,ambos me resultais familiares.

Has narrado una historia que ha servido para enriquecernos más nuestros conocimientos sobre esas tierras,tan lejanas y desconocidas antes para mi,y tan cercanas y familiares ahora. Espero nos sigas contando esas rutas que dices, que aunque por mi parte no te haga comentario alguno, quiero que sepas que te leeré atentamente. Un abrazo.

El mensaje de José María viene al pelo para demostrar que no existe la casualidad, sino la causalidad. No hay causa incausada; todo lo que ocurre es preciso que ocurra, y la aventura que describe conecta una aparente anécdota circunstancial con un acontecimiento clave en su vida. Cuando algunos dicen eso de "vaya coincidencia" no ven en realidad la causalidad.

Saludos.

Hola, Agustín: en el caso que nos ocupa, yo veo más bien la casualidad. En el caso de una tormenta, por poner un ejemplo de libro, están claros los efectos a partir de la causa. Y al revés, puede inferirse la causa a partir de determinados efectos.
Pero si esto fuera así en el caso de José Mª y de Charo, estaríamos hablando de predederminación. Y entraríamos en el tema del libre albedrío, de Dios, de evolución, de fe, de libertad... Pobres Jose y Charo. A lo mejor le estropeamos la fiesta. A ellos, que son un matrimonio feliz...

Un abrazo

Un abrazo

Me resisto a creen en el azar, amigo Mariano. A mi juicio, la causalidad no guarda relación con el determinismo: considero que Jose y Charo debían unirse necesariamente, que el cosmos así lo quiso, y que nada podía remediarlo. En cierta manera, sí estaban determinados; pero la causalidad exige un interconexión de voluntades, y creo que Jose y Charo -inconscientemente- unieron sus voluntades: no podían escapar de la voluntad Suprema y de su voluntad particular.

No obstante, dejamos aquí el debate, si te parece, porque no quisiera entrar en discusiones que nos conducirán a asuntos complejos y técnicos.

Saludos,