Muelas de los Caballeros - Zamora

Leedlo. Merece le pena.

La renta básica de ciudadanía, la forma más sencilla de acabar con la pobreza

LA RENTA BÁSICA

RAFAEL PINILLA PALLEJÀ - Médico, economista y vicepresidente de la Red Renta Básica

El nuevo Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana incluye en su artículo 15 el «derecho de todo ciudadano valenciano en estado de necesidad a la solidaridad y a una renta mínima de ciudadanía». Tanto el presidente Camps como el líder de la oposición se han felicitado por la inclusión de la renta mínima de ciudadanía como un derecho de todos los valencianos, de modo que cabe esperar que el derecho a la renta de ciudadanía sea aprobado también por el Congreso de los Diputados por una amplia mayoría.

Que el Estatuto reconozca el derecho de todos los ciudadanos a una renta mínima es un paso importante por el que podemos felicitarnos, pero inmediatamente surge una serie de preguntas: ¿cuándo se materializará el derecho efectivo a una renta mínima?, ¿cómo se va a garantizar?, ¿habrá presupuesto para todos los que la necesiten?, ¿con qué criterios se repartirá?. Aunque la Comunidad Valenciana haya sido la primera en introducir la renta mínima en su Estatuto, es una de las Comunidades más atrasadas en la generosidad y extensión de sus programas de garantía de rentas; a muchas distancia del País Vasco, Navarra o incluso la Comunidad de Madrid. Esperemos que la aprobación del Estatuto sirva para dar un impulso a estos programas, tanto en la cuantía del presupuesto como en la forma de administrarlos.

La persistencia de bolsas de exclusión y pobreza en los países que presumimos de desarrollados constituye un auténtico fracaso de nuestro sistema institucional. El desarrollo económico y la creación de riqueza son necesarios, pero para asegurar la cohesión social hay que garantizar que todos los ciudadanos participen de la riqueza creada. Los programas de rentas mínimas se pusieron en marcha ante la evidencia de que hay personas que no pueden lograr por sí mismas una renta suficiente en el mercado de trabajo. Los programas más restrictivos son conocidos como de renta mínima de inserción. Para que una persona pueda recibir la renta mínima ha de demostrar que es pobre, que no tiene otras rentas ni puede lograrlas, que carece de patrimonio, que desea trabajar y no puede, que está dispuesta a aceptar cualquier tipo de empleo, etc. Éste es el tipo de programa que existe actualmente en la Comunidad Valenciana.

Los programas de renta mínima de inserción han servido para ayudar temporalmente a algunas personas en situación muy precaria, pero el exceso de control hace que la mayor parte de quienes necesitarían ayuda no la reciban. Es por ello que se han propuesto otras modalidades. La denominada renta básica de ciudadanía es forma más generosa, sencilla y eficaz de garantizar a todos una renta mínima. Se ha definido la renta básica de ciudadanía como «un ingreso modesto, pero suficiente para cubrir las necesidades básicas de la vida, a pagar a cada miembro de la sociedad como un derecho, y no sujeto a otra condición que la de ciudadanía o residencia».

Entre la restrictiva renta mínima de inserción y la generosa renta básica de ciudadanía existe multitud de modelos intermedios. Para debatir sobre las distintas formas de garantizar una renta mínima de ciudadanía, hasta hoy, 21 de octubre, estamos celebrando en la Universidad de Valencia el quinto simposio sobre La renta básica de ciudadanía (www.uv.es/rentabasica). Esperamos que el mejor conocimiento de este tipo de programas contribuya a hacer realidad los buenos deseos del Estatuto.

A mi esto de la renta básica de ciudadanía, no es que no me guste, es que me suena a utopía. Al menos en una economía como la actual, porque eso supondría una redistribución de la riqueza tan radical que los dueños de los medios que producen esa riqueza, es decir, los dueños de las empresas, los capitales, no estarían dispuestos a perder o dejar de ganar o regalar sus beneficios a los "vagos". Por otro lado eso supondría una libertad sin precedentes en la elección del estilo de vida, y una libertad o independencia económica de los ciudadanos respecto de los poderes económicos que daría al traste con la explotación de personal en las grandes empresas. Los sueldos tendrían que ser más que dignos, muy superiores a los actuales, para justificar que un trabajador, libre de necesidad, se someta a la disciplina laboral y vea interesante una remuneración por el trabajo. Todo esto si, realmente, la renta básica de ciudadanís garantizara las necesidades básicas: comida, abrigo y refugio. Todo esto supondría que la riqueza dejaría de estar concentrada de forma indecente en unos pocos sitios. Por eso me parece utópico.

saludos
agustin

Querido Agustín:

Para mí no hay utopías: convertir nuestro mundo en un espacio más justo, libre y solidario es la máxima tarea que debe emprender el mono desnudo. Mientras tanto, lo demás es perder el tiempo. Hay gente desfavorecida y maltratada por el despreciable estado del bienestar que tanto nos gusta: hay enfermos mentales que deben sufrir un calvario para cobrar doscientos euros mensuales, hay jubilados, viudas o incapacitados que cobran miserias... En fin, hay mucha gente que no tiene derecho a un salario mínimo porque nadie quiere repartir.

Yo soy partidario de subir los impuestos, y mucho. El estado de bienestar deviene en establo de bienestar.

Saludos.

¡Enhorabuena,Agustín! Me alegra que se haya llegado a un acuerdo, soy de los que me gusta que nadie pase necesidades vitales,es mejor llegar a un acuerdo que lo contrario, aunque pienso como Sardón, que no deja de ser una utopía. Hasta que no se invente un botón para que alguien lo apriete de buena mañana y se ponga toda la economía en movimiento,no hacemos nada, y hasta eso, ¡veríamos si encontrábamos al voluntario que lo apretara!

¿De verdad habéis pensado de dónde saldría el dinero para esa Renta Básica, cuando todos los presupuestos son deficitarios? ¿Habéis puesto un importe, como mínimo habría que aconsejar 600 u 800 euros, porque si no...? ¿En dónde estarian estas personas durante el horario laboral, porque si están en su casa, muchos de los que trabajan 8 horas y no les pagan ese salario básico, pasarían al paro y a vivir de la Renta Básica? ¿Qué pensaría mucha gente cuando vieran que, su contribución, va a parar a manos de algunos jóvenes, como los que vi hace 15 días en Puerto Lumbreras, tirados por el suelo y haciéndose una raya? Creo que no, a esos jóvenes y a todos los necesitados,lo que hay que hacer es ayudarles a salir del pozo en dónde muchos de ellos se encuentran, formarlos para que sepan ganarse su Renta Básica, y, algo más si son capaces. Y no se te ocurra proponer el aumento de impuestos, creo que no sabes lo que dices, eso provocaría una inflacción, un menor consumo, y, por consecuente, aumento de los tipos de interés, y a la vez, todos lo préstamos hipotecarios irian al alza, con lo cual, muchos no podrían ni pagarlo.Tal vez fuese un caos.

Creo que ahora tú eres el optimista y nosotros lo contrario.

Y lo de mi profe de Filosofía en 6º curso de Bachillerato, el Sr. Santamás, es cierto, quería hacerme creer que era más dificil elegir una profesión que ir a ver una película, a mi muchas veces me daba más dolor de cabeza elegir una película , que, elegir lo que pretendia ser en la vida, pero el buen señor no me entendía, lo mismo como tú, tal vez, no entiendas lo que digo arriba.

Venga, prepara el chalet de El Perelló, que vamos todos, tienen que darse cuenta que es una caseta no una mansión, Fernando ya piensa que eres un capitalista.


un abrazo.

Ni es una mansión ni una caseta: punto intermedio... Y con una tranquilidad y un espacio delicioso, con aire fresco y naranjos para mí.

La cantidad de una renta básica no puede ser superior a 300 euros: es básica, para comer (o malcomer) y pagar un alquiler (en un pueblecito, claro). Luego, el que quiera más que trabaje. Seguro que todos trabajarían; nadie quiere vivir con 300 euros al mes, pero más vale eso que nada. Y esa renta ayudaría a la gente a buscar un trabajo respetable, porque no estarían en la miseria absoluta.

Abrazos

Yo creo que la inclusión de la Renta Básica en el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana, es todo un avance. Otra cosa será su aplicación... La Constitución Española, tan cacareada por unos y por otros en estos días, dice que todos los españoles tienen derecho a una vivienda digna... ¿De verdad? ¿Y qué hacen los poderes que no se dejan la piel en el empeño?

¿Cuántas viviendas, o su valor equivalente, tiene el hombre más rico de España? ¿Diez mil? ¿Y cuántos ricos muy ricos hay en España? ¿Cien mil, trescientos mil? No sé, echad vosotros las cuentas. Yo creo que habría viviendas para todos...¿No es obsceno mil veces tener tantas viviendas o bienes por valor equivalente? ¿Por qué no se pone un tope a lo que cada uno puede tener? Un rico, por ejemplo, puede tener una vivienda para él, otra para su mujer, otra para cada uno de sus hijos y otra para la querida... ¿Para qué quiere las otras nueve mil novecientas noventa?

Por cierto, ¿alguien me puede aclarar lo que ha pasado con el salario de las amas de casa, aquellos famosos cien euros mensuales?

Un abrazo

Ahí has estado muy fino, Mariano. Coincido contigo al cien por cien. Imposible que añada una coma. Felicidades.

Abrazos.