PARO. Todo lo malo puede empeorar. La Encuesta de Población Activa (EPA) lo ha corroborado: España cuenta ya con 4.978.300 parados, el peor registro desde que comenzó la crisis. La tasa, situada en el 21,52%, es además la más elevada desde el cuarto trimestre de 1996. El pésimo dato económico es también un funesto dato para la campaña del PSOE, cuyos estrategas consideran que el desempleo es el gran talón de Aquiles de su candidato, Alfredo Pérez Rubalcaba. Las cifras son, sin duda, un aguacero gélido para las perspectivas socialistas, ya que supera con creces los peores augurios. Y, antes del 20-N, todavía se difundirán un nuevo indicador: el paro registrado en las oficinas de desempleo. A Rubalcaba, que tiene enfrente un panorama adverso según todas las encuestas, se le pone aún más difícil hacer creíbles sus propuestas para crear puestos de trabajo. Y todo lo que lastra a los socialistas contribuye a reforzar los mensajes del PP, que ha convertido la crisis económica y su efecto más traumático –el desempleo- en el caballo de Troya de su campaña para acceder a la Moncloa. La primera valoración de los datos fue la de Elena Valenciano, jefa de la campaña de Rubalcaba, que recibió la noticia durante una entrevista en RNE: "Desde agosto estamos en una recaída de la crisis de crédito y se traduce en el empleo". Según la Encuesta de la Población Activa que ha publicado hoy el INE, el número de personas que quieren trabajar pero no encuentran un empleo ha subido en 144.000 entre julio y septiembre, con lo que el total de desempleados ha llegado por primera vez desde que se realiza esta estadística a las 4.978.000 personas, al borde de la cifra psicológica de los cinco millones de parados. Tras este aumento, que también supone recuperar la tendencia negativa tras la leve tregua del segundo trimestre, la tasa de paro se incrementa en seis décimas y alcanza el 21,56%, otro récord desde que la crisis empezó a enseñar sus dientes a finales de 2007. Justo después de marcar un mínimo en el 8,02% en el tercer trimestre de aquel año. Por el lado del empleo, los datos del INE abundan en la idea de que, cuatro años después del inicio de los problemas en el sector inmobiliario, aún hay margen para un empeoramiento de la situación. En concreto, la ocupación baja en el tercer trimestre en 146.800 empleados, lo que deja el total de personas con un trabajo en 18.156.300. Asimismo, la persistencia de los problemas en el mercado laboral han llevado a 2.100 personas a abandonar la búsqueda del empleo, lo que se traduce en un descenso de la población activa, lo que modera en parte el repunte de seis décimas en la tasa de paro. El aumento del paro y la destrucción de empleo, además, se extienden por todos los sectores y hasta en la industria, donde baja el número de desempleados, tampoco se logra crear puestos de trabajo. Una vez más, es en los servicios el que peor parado sale en el retrato que trimestralmente realiza la EPA, considerado como el mejor termómetro del mercado laboral. 52.300 ocupados menos y 45.900 parados más es el balance del sector que más empleo proporciona en España pese a que el turismo, uno de sus baluartes, atraviesa en verano su mejor época del año. También aumenta el número de personas que no encuentran un trabajo y hace ya más de un año que dejaron su último empleo, que suben en 40.700 desempleados, y entre quienes buscan entrar por primera vez en el mercado laboral, que aumentan en otras 48.000 personas. El empeoramiento de las expectativas de estos dos colectivos pone de relieve, más si cabe, las dificultades que está teniendo el mercado laboral para reactivarse. El estancamiento económico que ha venido de la mano del recrudecimiento de la crisis fiscal complica su inserción laboral, lo que arroja problemas estructurales de difícil solución. Entre los sectores más afectados por la lacra del paro, el número de hogares que tienen a todos sus miembros activos en paro sube en 57.700 personas hasta los 1.425.200. Frente al tercer trimestre de 2010, hay 132.900 familias más en esta situación. Por sexos, el aumento del desempleo se concentra más entre las mujeres con 78.800 paradas más que entre los hombres, donde sube en 65.800 más. En cuanto a la geografía del empleo, el dibujo refleja grandes divergencias entre regiones. Así, mientras Navarra marca la tasa de paro más baja del Estado con un 11,68%, en el extremo opuesto Andalucía toca el 30,93%. |