Puente Duero-Esparragal - Valladolid

Ayer me comentaba un amigo, que el dia 31 de octubre pasado, se acercaron por la mañana al cementerio de Puente Duero a depositar un ramo de flores naturales y otro de flores de tela. Hasta ahí, todo normal.
La sorpresa fue que por la tarde se acercó otro de los hijos a realizar otra dejada de flores y cual fue su sorpresa que los que habían depositado por la mañana, habián desaparecido.
La indignación de mi amigo era evidente y digo yo, que hay gente sin corazón ni escrupulos que puedan herir la sensibilidad de las personas, haciendo una cosa semejante.
Si uno por circustancias de la vida no puede depositar flores a sus seres queridos, no debe ser ningún problema, se acerca a la tumba y hace lo más importante, rezar por ellos, pero nunca dedicarse a robar las flores de otras tumbas.
Hay que darse cuenta que entre vecinos nos debemos de respetar y más tratándose como en este caso de sentimientos muy profundos.
Esperemos que no vuelva a suceder.