Ugena - Toledo

El PP tendrá que buscar fórmulas para pagar a partir del mes que viene las nóminas de los 70.000 funcionarios de la Junta porque la situación de la región es de "quiebra total", con una deuda a proveedores que asciende a 2.000 millones de euros, ha asegurado hoy el secretario general del PP, Vicente Tirado.

En una rueda de prensa tras la reunión del grupo parlamentario popular presidida por la presidenta electa de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, Tirado ha dicho que este mes sí cobrarán las nóminas los funcionarios, aunque ha lanzado un mensaje de tranquilidad porque el PP, ha añadido, buscará los mecanismos para pagarlos a partir de entonces, y ha citado, por ejemplo, la privatización de la televisión pública.

Ha señalado que por los primeros datos que van conociendo, aunque el hermetismo del gobierno en funciones es total y no les da ninguna documentación de la situación económica real de la región, la Junta "no tiene ni un euro" y no paga ni "la luz ni el teléfono ni a los proveedores".

Tirado ha asegurado que el PP va a exigir "responsabilidades" al presidente de la Junta, José María Barreda, y a la vicepresidenta de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, que irán "más allá de las responsabilidades políticas" si la situación es "tan grave" de haber "arruinado" a la región.

La presidenta electa de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, presidió ayer la reunión del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes regionales, un encuentro que sirvió para empezar a trabajar en las soluciones para salir de la situación de «quiebra total» que vive la región. Esos fueron los términos empleados por el secretario regional del PP, Vicente Tirado, quien calculó que la Junta tiene facturas pendientes de pago con proveedores que ascenderían a 2.000 millones de euros e, incluso, «ha puesto en peligro» las nóminas de 70.000 empleados públicos.

Así lo aseguró Tirado antes de la reunión de su partido, que considera que «es intolerable que el Gobierno en funciones esté desaparecido» ante esta situación. Asimismo, indicó, «no paga la luz, no paga el teléfono y no paga a ningún proveedor», por lo que pidió al presidente saliente, José María Barreda, que dé explicaciones porque «tiene paralizada la Administración y desde su irresponsabilidad quiere montar un campo de minas para que no se pueda pagar absolutamente nada».

De este modo, según explicó el dirigente popular, la Junta tendría pendiente de pago 2.000 millones de euros en facturas y servicios, de los cuales 1.500 serían de la Administración y 500 de las empresas públicas, lo que se suma a los 7.000 millones de deuda. «Estoy en condiciones de decir que no sólo se va a duplicar la cifra escandalosa de 90.000 facturas, sino que se puede multiplicar por 5 ó 6».

El secretario general de los populares castellano-manchegos destacó que a un solo proveedor, relacionado con la sanidad, se le deben 60 millones y que existen otros proveedores de la Junta a los que se adeudan unos 15 millones. Según Tirado, Barreda también tiene también «asfixiados» a los ayuntamientos de la región por concertar servicios «que no abona» y «no paga».

A todo ello, unió que Barreda ha hecho «presupuestos ficticios» con 9.000 millones de gasto cuando el ingreso era de 6.000 millones, por lo que señaló que el PP pedirá responsabilidades y explicaciones a Barreda y a la vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda interina, María Luisa Araújo, que pueden ir «más allá de las meramente políticas», si la situación es tan grave.

Así, Tirado aludió a la «macrodeuda» que el Gobierno de Barreda ha generado que, añadió, «está arruinando a pequeños y medianos empresarios y a autónomo». Por eso, espera que el Gobierno saliente no tome ninguna decisión «porque serían revisadas absolutamente todas» y reiteró que habrá auditorías «en todos los sitios». Además, insistió en que el proceso de traspaso de poderes «no se está dando documentación, pero lo que es más grave, a fecha de hoy la vicepresidenta económica no ha tenido tiempo para reunirse con el responsable del PP».