Numancia de la Sagra - Toledo

La concesionaria culpa al estado de pérdidas acumuladas de casi 30 millones de euros
Fomento negocia un arreglo para la AP-41 antes de que decida el Tribunal Supremo
La compañía espera contar con una sentencia favorable a mediados del año que viene. Una compensación de 420 millones o abrir la vía con un peaje en la sombra serían las soluciones para convertir su concesión durante 36 años en viable


En una comparecencia el pasado martes para exponer la llegada del tren de mercancía a Toledo, el alcalde capitalino Emiliano García-Page recordaba las vías de comunicación de que dispone la ciudad para albergar una plataforma logística. Y entre ellas, citaba de pasada «la alta velocidad, autovías, autopista... Quien sabe si la autopista no terminará siendo incluso autovía».
Con esta alusión, el regidor demostraba estar al tanto del contencioso planteado ante el Tribunal Supremo por la concesionaria de la autopista AP-41 Madrid-Toledo contra el Ministerio de Fomento, al que achaca las pérdidas de casi 30 millones que acumula esta vía abierta en 2007 por no cumplirse las condiciones de adjudicación y quedar el tráfico reducido a un 10 por ciento de lo previsto. Tras presentarse en mayo la demanda, en la que se pide una indemnización de 420 millones de euros por no poder rentabilizarse la inversión acometida en los 36 años que dura la concesión, Fomento mantiene contactos con la compañía para buscar una solución antes de que dictamine el alto tribunal. La resolución podría llegar a mediados del año que viene.
La sociedad Concesionaria Española de Autopistas -en la que participan empresas como Isolux, Sando, Comsa, Azvi y Banco Espirito Santo- confía en que en este plazo llegue la resolución y le sea favorable. De su parte, tienen la cláusula de la adjudicación de esta infraestructura en 2003 donde se establece que «si la actuación de la Administración determinara de forma directa la ruptura sustancial de la economía de la concesión, la Administración deberá restablecer el equilibrio económico-financiero del contrato, en beneficio de la parte que corresponda».
En este punto, la concesionaria recuerda que la Madrid-Toledo fue planeada como un tramo de una gran autopista que debía unir la capital de España con Córdoba a través de Ciudad Real, como alternativa de pago a la Autovía de Andalucía A-4. Esta gran autopista debía estar terminada en 2009, según el Plan de Infraestructuras diseñado por Fomento cuando lo dirigía el ‘popular’ Francisco Álvarez Cascos. Pero el hecho de que el proyecto no obtuviera una declaración de impacto ambiental favorable hizo que no se convirtiera en realidad.
A esto se sumó la construcción por la Comunidad de Madrid de una autovía, la M-407, que va paralela a la AP-41 en su trayecto por la región vecina. Todo esto, mantiene la concesionaria, ha contribuido a que no se cumpla la previsión de un tráfico de 17.000 vehículos diarios con que se sacó la obra a concurso. De hecho, sólo se llega ahora a 1.700.
El director general de la compañía. Félix Villaluenga, señala que ante la justificación de la demanda Fomento ha proseguido sus contactos con la concesionaria para un arreglo. «Nos consta que están estudiando nuestro caso», comenta para añadir que también «ellos-en referencia al Ministerio- saben los plazos» en que la Sala de lo Contencioso del Supremo puede resolver el pleito.
El reequilibrio financiero que reclama la concesionaria para ser viable y afrontar los créditos bancarios que solicitaron para soportar los gastos de construcción, expropiaciones y personal de la autopista pasa por la indemnización de 420 millones de euros u otras vías. Entre ellas, Villaluenga cita el peaje en la sombra, la apertura de la vía a todos los vehículos a cambio de que el Estado sufrague su mantenimiento. «Desde luego, sería lamentable que esta infraestructura, con sus puestos de trabajo, quedara inservible», recuerda el responsable a la hora de pedir un respiro para sus inversores.

A la expectativa con la Toledo-Ciudad Real.
En cuanto al nuevo proyecto para unir Toledo y Ciudad Real por autovía que promueve la Junta, Villaluenga se muestra prudente. Así, señala que habrá que esperar a conocer el trazado definitivo y conocer luego si se adjudicará como autovía o como vía de peaje . Aunque reconoce que la sociedad no tiene privilegios para optar a la construcción de la infraestructura, respalda que de una manera u otra salga adelante. «Todo lo que sea prolongar nuestro corredor hacia el Sur aumentará nuestro volumen de tráfico», razona el director general de la concesionaria de la autopista AP-41.

hola soy una afectada de la despropiacion. y muchas gracias por la informacion. aver si se soluciona ya este tema de una vez por todas.