Mora - Toledo

La canalización para los cables del semáforo y la arqueta para su conexión están ejecutadas. El edil de Urbanismo negoció antes de licitarse la obra que el proyecto incluyera la preinstalación

El Ayuntamiento de Toledo ha cerrado al tráfico los accesos a las dársenas para autobuses situadas a los pies de las nuevas escaleras mecánicas de Safont por la falta de un semáforo que regule la salida del apeadero hacia la avenida de Castilla-La Mancha por la falta de un semáforo cuyo coste no supera los 1.000 euros. Un coste calculado por los alto si las tres luminarias semafóricas utilizan tecnología led.
Aunque el semáforo físicamente no aparece recogido en el proyecto de obra, lo cierto es que en los trabajos ejecutado se ha tenido en cuenta la necesidad de regular la incorporación de los autobuses de turistas a la ronda. Para ello, la empresa adjudicataria del remonte de Safont ha dejado ejecutada la canalización para los cables del semáforo así como la arqueta para su conexión.
La negociación para la inclusión de la preinstalación del semáforo tuvo lugar antes de aprobarse el proyecto definitivo, que finalmente contó con el beneplácito municipal, ‘luz verde’ que el Ayuntamiento de Toledo otorgó en la Junta de Gobierno Local de 24 de abril de 2013 tras analizar toda la documentación presentada por Gicaman.
Las negociaciones de los detalles que debían incorporarse al proyecto las llevaron personalmente el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Toledo, Javier Nicolás, y el por entonces director general de Gicaman, Gustavo Nofuentes. Nicolás forma parte ahora de la comisión paritaria de seguimiento que deberá acordar el traspaso del remonte y de las dársenas al Ayuntamiento, una recepción que llevará aparejada el mantenimiento de las instalaciones. Ambos, a instancia del Ayuntamiento, acordaron, por tanto, que la preinstalación semafórica quedará ejecutada por la empresa adjudicataria del proyecto.
La clausura municipal de las dársenas por la ausencia del semáforo, que también hubiera podido solucionarse provisionalmente, según los técnicos, regulando el cruce de forma provisional con un semáforo ‘portátil’ de los que se colocan en las obras, sin duda, ha enturbiado la convocatoria inminente de la comisión de seguimiento de la obra en la que las dos administraciones están representadas de forma paritaria.
En el encuentro se hablará de los defectos que los técnicos municipales hayan podido encontrar en la ejecución de la obra, siempre tomando como referencia el proyecto.
No obstante, el pliego de prescripciones técnicas que rigió el concurso de adjudicación de las obras incluye una cláusula que evitará que el Gobierno regional deba asumir el sobrecoste que puedan generar las reparaciones que sean necesarias para poder entregar las obras al Ayuntamiento de Toledo. En este caso, quien corre con el gasto es Vías, la empresa adjudicataria. Así al menos figura en la cláusula 5.6, referente al apartado de recepción de las obras.
«Dado que las obras de Edificación se van a entregar al Excelentísimo Ayuntamiento de Toledo, el adjudicatario se obliga a aceptar todas las reparaciones y subsanaciones de defectos que los técnicos municipales puedan establecer, siempre que la Dirección Facultativa así lo corrobore, con independencia de si se hubiere producido o no la recepción entre la empresa constructora y Gicaman», señala literalmente el pliego. Sin embargo, la ausencia de semáforo no se puede considerar un defecto porque no aparece en el proyecto.

Eso no dicen nada, no saben no contestan, se le perdió el papel que lo decía.

no saben no contestan(cerrado por feria)

En este charco no entra

Es que si entra ya sabe lo que le pasa, a la calle con una mano delante y la otra detrás.

Y haber que hace si no sabe hacer otra cosa en la vida.