Versos - Amanecer en Gandía Una mañana temprano a la terraza salía, al tiempo que amanecía saliendo el sol del verano. Allá el horizonte enfrente que se abre como pariendo y lentamente saliendo el disco del sol naciente. Un sol de color dorado que en las aguas se retrata, convirtiéndose ya en plata cuando en ellas se ha posado. Una raya iluminada que entre las olas se mece, que a mis ojos adormece y a mi espíritu anonada. Rutilante pasarela del horizonte a la playa, me invita para que vaya a lomos de aquella estela, para llegar hasta el sol, como diciendo “te subes y contemplarás las nubes a las que doy su arrebol”. Esa imagen guardaré, acordándome del día que en la playa de Gandía tal milagro presencié. Un milagro no pequeño, como tampoco la playa y dudo yo de que haya otra igual si no es en sueño. De muy blanca y fina arena, mimosamente cuidada, por lo que es tan alabada por gente propia y ajena. He tenido la fortuna de conocer mucho mundo, pero aseguro rotundo que igual no encontré ninguna. Cristino Vidal Benavente. |