El Carpio de Tajo - Toledo

Es sabido que cuando Dolores de Cospedal fue traída a Castilla-La Mancha como presidenta regional del PP y tardó unos cuantos meses en renunciar a la canonjía de la Consejería de Infraestructuras de Madrid, fiel al dos por uno que tantos réditos pecuniarios y sociales le aporta a una mujer tan pagada de sí misma, como apuntó el portavoz del Gobierno con Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, en su blog; es conocido que optó por un secretario regional que no le hiciera sombra.

Vicente Tirado, un hombre poco dado a los accesos de ira entonces, quedó de número dos de la jefa de la oposición que anunció en una revista muy vendida que con un "día y medio a la semana" sería suficiente para llegar a gobernar en nuestra región.

Sin embargo, el carácter en apariencia tranquilo de Tirado se ha tornado en los últimos tiempos en un temperamento fiero, indomable, que lanza insultos contra el presidente regional con la misma facilidad con que el dragón escupía fuego contra San Jorge, por citar un referente cercano en el calendario.

Este sábado, en una rueda de prensa, acalorado y tremebundo, Tirado ha detallado todo un repertorio de baldones, flanqueado siempre por Leandro Esteban y Carmen Riolobos, dos zagueros populares siempre en ausencia de Cospedal. A su izquierda tenía a Ana Guarinos que le susurraba in situ al oído, cual apuntador entre bastidores, las líneas maestras para un discurso lo más ortodoxo posible, tal como les fue encomendado por la número dos de Rajoy.

"Cobarde" y "traidor" es lo menos que le ha dicho a Barreda el ínclito Tirado, "ante notario", al que el cine de José Luis Garci parece haber enseñado poco. Tendría que volver a ver "Luz de Domingo" y recordar qué vana y peligrosa es la palabrería de los políticos venales.



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quién te los dicta a tí?