Y ahora vengo yo. La Zarzamora - (Rafael de León) LA ZARZAMORA I En el café de Levante, entre palmas y alegría, cantaba la Zarzamora. Se lo pusieron de mote porque dicen que tenía los ojos como la mora. Le habló primero a un tratante, y olé, y luego fue de un marqué que la llenó de brillantes, y olé, de la cabeza a los pié Decía la gente que si era de hielo, que si de los hombres se estaba burlando, hasta que una noche, con rabia de celos, a la Zarzamora pillaron llorando. ESTRIBILLO ¿Qué tiene la Zarzamora que a todas horas llora que llora por los rincones? Ella que siempre reía y presumía de que partía los corazones. Del querer hizo la prueba y un cariño conoció que la trae y que la lleva por la calle del doló. Los flamencos del colmao la vigilan a deshora, porque están empesinaos en saber del queré desgrasiao que embrujó a la Zarzamora. II Cuando sonaban las doce, una copla de agonía lloraba la Zarzamora, mas nadie daba razones ni el intríngulis sabía de aquella pena traidora. Pero una noche al Levante, y olé, fue a buscarla una mujé; cuando la tuvo delante, y olé, se dijeron no sé qué. De aquello que hablaron ninguno ha sabío, mas la Zarzamora lo dijo llorando en una coplilla que pronto ha corrío y que ya la gente la va publicando: ESTRIBILLO ¿Qué tiene la Zarzamora que a todas horas llora que llora por los rincones? Ella que siempre reía y presumía de que partía los corazones. "Lleva anillo de casao", me vinieron a desí, pero ya lo había besao y era tarde para mí. Que publiquen mi pecao y el pesar que me devora y que tos me den de lao al saber del querer desgrasiao que embrujó a la Zarzamora. |