Cambrils - Tarragona

Dramatización de Beethoven.

700, 1.000?, quien sabe la cantidad de veces que he escuchado la 9ª. El pasaje del himno de la alegría, cada tono, cada nota, cada silencio, es como un gran camino placentero y doloroso a la vez, dificulto haya una obra mas completa y descriptiva de lo que es música en nuestras mentes, en cualesquiera de sus variantes, o arreglos que alguien hace, o ejecuta, siempre sus notas, transportan, enriquecen y se ve un destello, que ayer no viste.

Hoy ha sido especial, afloraron, afloraron los matices, a medida de que los actores (estupendos) han desgranado su vida, no puedo ni debo juzgar su vida, dura y sorda, pero me quedo con el genio, con su obra, con lo que la sordera física no pudo impedir, que en su mente vibrasen una correlación de notas, y tuviese la deferencia de colocarlas sobre un pentagrama, y fabricar una verdadera obra de arte, que nos legó a la humanidad, seguro hubo de sentirlas, ese alboroto dentro de su mente, esa fuerza, esa capacidad, el sufrimiento de no poder escucharlas en lo físico, pero saber que sus anotaciones estaban en la línea correcta, parece que es lo que mas le atormentaba, y es que en la vida de un creador, los sentidos despiertos y activos son necesarios y fundamentales, y tratando de montarme sobre sus zapatos, pienso que debe haber sido muy duro para su existencia.

Esa obra que ahora nos pertenece a todos y a ninguno, que es patrimonio de la humanidad, nos hace sacar de nuestro interior, lo mejor de nosotros mismos con respecto de las pasiones, esas que siempre están dormidas, en estado de latentes, y unas notas, abren esas puertas, se reactivan al momento.

Seguro es especial en el día de hoy, ayer ya era especial, pero mañana seguro será mas especial, despierta y despertará emociones, olvidadas tal vez, ignotas, o escondidas, pero que afloran ante esa magia, y se abren puertas, ventanas y sentires.

Y si, otros autores, Mozart, Tchaikovsky, Wagner, Rimsky Korsakoff, Mussorgsky, Prokofiev, Granados, Rodrigo, Falla, Falla, Falla, etc., etc., sin olvidar a algunos sinfónicos modernos, que han creado obras monumentales, Pink Floyd, Mike Oldfield, etc., y bajo sus influjos leí algunos libros, o ejecuté algunas obras, pero sin despreciar a ninguno, a ninguno de sus valores, la obra por antonomasia, (para mi pobre neurona) es esa, la 9ª sin lugar a dudas.

Y si, eso es arte, que te emociona, que en ese momento puedes ser capaz de disculpar las cagadas de la suegra, las barrabasadas de algún nieto, los insultos de un amigo, pero claro, pasa el tiempo, las notas se disipan, la suegra sigue jodiendo, el nieto se hace insoportable, ladra un perro cuando necesitas silencio, y el amigo ni se ha dado cuenta que te ha molestado, y sigue con su matraca, molestando mas que una china en un ojo.

Aunque no lo queramos seguimos siendo materia orgánica y en descomposición permanente, posiblemente en evolución, pero los cambios de crecimiento son tan sutiles, que en el transcurso de una vida, apenas se da uno cuenta, aunque le ponga empeño en la búsqueda de esas señales, y en esa búsqueda afortunadamente encontramos en nuestros baches del camino, remansos de paz, sosiego, o bálsamos que nos ayudan a seguir caminando, con destino a ninguna parte, pero siempre hacia delante, sedando un poco nuestros instintos animales.

Debe ser cierto, la música amansa a las fieras, debe ser por eso que hay tanta música y tanta fiera?

UNO MAS.