un testigo de jehová (chiste) Nada mejor que un chiste para sacudirnos la miseria y baja estofa intelectual que destila nuestras vidas Un testigo de Jehová se sienta junto a un andaluz en un vuelo Sevilla-Tenerife. Cuando el avión ha despegado empiezan a repartir bebidas a los pasajeros. El andaluz pide a la azafata un cubatita de ron y se lo sirven. La azafata le pregunta al testigo de Jehová si quiere beber algo. Contesta el testigo de Jehová con mal tono: "¡Prefiero ser raptado y violado salvajemente por una docena de señoritas de Babilonia antes que una gota de alcohol toque mis labios!". El andaluz le devuelve el cubata a la azafata y dice: "Yo también. No sabía que se podía elegir eso".
|