Frades de la Sierra - Salamanca

Invito a los participantes, o de forma indirecta a sus allegados a recordar anecdotas, vivencias, acontecimientos interesantes del pasado. Así refrescaríamos la memoria y reforzaríamos nuestra identidad. Aunque mirar atrás no es a veces recomendable, yo lo considero necesario, pués la vida es una historia y la historia debe ser recordada porque en ocasiones ayuda a construir el futuro.
Desgraciadamente faltan entre nosotros padres, abuelos, etc que eran pozos de sabiduría, ellos nos trasmitieron su conocimiento avalado por la experiencia de la vida.
Pués eso os animo a rememorar vivencias que nos unan. Saludos

Valiente 1995, ¿Será telepatía?; poco antes de leer tu mensaje me vino a la memoria el recuerdo de mis abuelos maternos Inocencio y Fe. Seguramente muchos de vosotros sabréis que regentaban la posada del pueblo en el mismo lugar donde ahora, Jesús, viven tus padres y prestan tan amablemente el servicio de panadería, como si ese rinconcito estuviera predestinado a ello.
Y con ello me viene el recuerdo de los más variopintos personajes que por allí desfilaban: Desde “Minado”, el ojalatero de Navarredonda que hacía unos magníficos faroles y candiles, pasando por Manolo el gallego vendiendo sus gafas y lentes, Agustín el pielero de Mozarbez, Borrega y Pedrín que acudían desde la Sierra para vender su vino, o los trilleros de Cantalejo que venían desde Segovia para reparar los trillos antes de comenzar las faenas del verano,¡ y cómo no!, los esperados músicos de San Esteban que acudían con sus caballerias transportando sus rudimentarios instrumentos musicales para amenizar las fiestas de San Antonio, allí en la era del Monte, y a los que los chiquillos salíamos a recibir con la más grande de las ilusiones. Son nostalgias del pasado, pero para que decir lo contrario, a mi a veces me levantan el ánimo. Saludos para todos

Claro que recordamos a la Sra. Fe y al Sr.Inocencio entrañablemente. Fueron una Institución en Frades y como dice abc1963, buena, muy buena gente. Ellos fueron los precursores del "alojamiento mas desayuno", no solo para los huéspedes, sino también para sus medios de transporte. Yo recibí de ellos las primeras lecciones de prudencia, cuando me decían que no me asomara " al pozo" que saldría el "coco" y me metería para adentro. Como recuerdo aquellos carruajes con toldo que llegaban al anochecer y llevaban, a modo de maletero un espacio bajo el asiento donde supuestamente portaban viandas y útiles necesarios para el viaje.
A propósito recuerdo la llegada le los "Húngaros", viajeros de de acampada libre que se asentaban en la "Fontanica". Recuerdo sus caras curtidas, sus sombreros y algún diente de oro asomando en las comisuras.
Transmitían un sentimiento mezcla de curiosidad y miedo, quizás por lo escuchado en casa " que te llevan los húngaros". Pero también recuerdo que alguien decía: a ti no te llevan porque alhajas con dientes no quieren. Un saludo y encantado

Los que tenemos ya una cierta edad, si nos dejamos llevar por la nostalgia y los buenos momentos vividos de niño en nuestro pueblo,tendriamos para contar mil y una vivencia,como dice Manuel ¨el de la Señora Serafina¨ yo tambien recuerdo personajes de esos que pasaban por casa de la Señora Fe,por cierto,buena mujer.Recuerdo cuando llegaba San Antonio todo ese regero de mujeres a casa de Justo para hacer el bollo y los niños deseando que nuestras madres llegaran a casa para probar el trocito que salia del bote que en medio le ponian.aunque en algunas casas se tocaba a poco,pues ahora las familias son cortitas pero antes.............. y si no recordar estos nombres: Las Señoras,Bene,Anastasia,Julia,Paz,Carmen etc etc,como para aburrirnos en Frades,anda que no eramos!

Yo soy bastante más joven que ustedes y no conocí a mi bisabuela Fe, pero son muchos los recuerdos de mi infancia que llegan a mi con nostalgia.
Las noches de verano en el parque con todos los amigos,los paseos de "la vuela a la charca", las tardes en la era, las mediodías sentados en el puente hablando con las amigas esperando que llegara la hora para ir a comer los macarrones de la abuela Avelina. Las frías noches de invierno en la Casa del Poeta y la celebración de los cumpleaños en la cochera de un gran amigo, esos entre otros muchos llegan a mi cabeza escuchando la mítica canción:
¿Recuerdas aquella noche en la Cabaña del Turbo?,
Las risas que nos hacíamos todos juntos,
hoy no queda casi nadie de los de antes,
y los que hay, han cambiado, han cambiado, ¡si!. 20 de abril.

Un saludo paisanos.

Últimamente acudo con frecuencia a la vieja escuela de “niños”, hoy como sabéis transformada en biblioteca y sala de usos múltiples, y la veo tal y como estaba en los años cincuenta cuando yo acudía a ella. Siento en mis huesos el frio de aquellos duros inviernos, y que combatíamos con nuestra calefacción individual (lata de sardinas con unas brasas que la mayoría de las veces terminaba apagándose a media mañana); y recuerdo aquel aula toda ella de madera, llena de pupitres bipersonales también de madera, emborronados con la tinta que cada dos por tres se nos caía. En el fondo de la izquierda, la tarima con una vieja y centenaria mesa y un sillón a la par que ella, los deteriorados mapas y el tablero de tres patas a modo de caballete, y en la tarima “ EL VIEJO MAESTRO DON PACO”, enjuto él, con el cigarrillo de tabaco picado entre los labios, y al que a veces se le quemaba el cuarterón que ponía a calentar al frio brasero de cisco. De ÉL aprendí los valores que a lo largo de treinta y siete años he tratado de inculcar a mis alumnos. Durante el recreo jugábamos al marro, a las vistas, a la chirumba… multitud de juegos populares, hoy desgraciadamente perdidos. Recuerdos, recuerdos, recuerdos, vaya el último para nuestro querido don Paco y para el que desde aquí, con el permiso de sus numerosos descendientes, reivindico algo, una placa, que la biblioteca lleva su nombre, lo que sea, pero algo que allí, en la vieja escuela donde él se dejó su vida y en la que con su sabiduría y eterna paciencia formó a dos generaciones completas de fradenses perdure su recuerdo para siempre.
A ti maestro, hombre o mujer, que vas dando
entre libros, mesas y niños , tu vida.
A ti, que diariamente renuevas tu ilusión de
vivir, convirtiéndote en eterno soñador.
A ti, que vas abriendo caminos
mientras siembras la verdad a manos llenas,
con la esperanza gozosa de la cosecha.
A ti, que te dejas robar el corazón mientras
enseñas a vivir, a soñar, a amar.
A ti, que valoras las cosas pequeñas porque en
ellas duermen grandes empresas
y sublimes proyectos.
A ti, que sabes amar, que sabes ser luz,
que entiendes los secretos del corazón,
que eres camino y senda para muchos.
A ti, que llevas la luz en tus ojos, que tienes
las manos abiertas para dar y acoger, que dices
palabras llenas de mensajes.
A ti, que sientes el paso de los años y ves que
otros empujan llevando algo de ti.
A ti que eres feliz.
A ti maestro.
Afectuosos saludos a todos.

Porciones / número de personas: 6 PERSONAS
Tiempo de Preparación: 30 minutos
Tiempo de cocción: 30 minutos
Categoría: Carnes
Dificultad: Fácil



Introducción:
A los cerdos hay que caparlos para después engordarlos y que no sepan a "macho"
los testiculos són un manjar exquisito pero ,hay que saberlos arreglar muy bien .
para que no sepan .


Ingredientes:
1 KG DE CRIADILLAS DE CERDO LIMPIAS.
1 KG DE TOMATE NATURAL
1 KG DE PIMIENTOS ROJOS
1 CEBOLLA
1 CABEZA DE AJOS
4 O 5 HOJAS DE LAUREL
ACEITE DE OLIVA
SAL
VINO TINTO (UN VASITO PEQUEÑO)

Instrucciones:

_Una vez ya limpia la criadilla se pone a cocer con agua, unas hojas de laurel y un chorrito de vino tinto.



se frien los ajitos ,las hojas de laurel y la cebolla ;se reserva y en ese aceite se frien bastantes pimientos rojos...


aparte hice bastante tomate natural ,del que conservo en tarritos:

una vez que el tomate estaba apurado (sin caldo)
le añadí los ajos ,cebolla,y los pimientos con el aceite donde se frieron
las criadillas cortadas en lonchas ,coció todo junto unos 15 o 20 mn y ...a comer...

Si, ya sé que ayer hubo barra libre para los COBARDES de siempre, yo pude hacer lo mismo pero no me sale de la entrepierna el hacerlo y seguiré justificando lo que escriba, aquí y en Roma si hace falta. Hasta ahora había tres EMES que me "jodían" sobre manera: Las Musas, las Misas y las Masas; ahora tendré que añadir al Mamarracho y Mal oliente Mastodonte que por el foro discurre.SALUDOS A LAS PERSONAS.

Pretendía ser un hilo de mensajes bonito e interesante pero algún energúmeno lo tuvo que empañar. Para los que no lo sepáis, si os fijáis debajo de cada mensaje aparece en color rojo (DENUNCIAR ABUSO - BORRAR), con esta opción se solicita a los moderadores que borren mensajes. Lógicamente han de estar motivados y con razones de peso. Acabo de solicitar a los moderadores del foro que borren el mensaje del irreverente. Cuando reciba respuesta os lo cuento.

Volviendo al tema principal. Yo también guardo muchos y bonitos recuerdos de Frades. Me viene ahora mismo a la memoria las tardes de un fin de semana cualquiera en la época en las que las cabras regresaban de pastar de la sierra. Llegaba el señor Enrique con ellas y yo iba con mi abuelo a recibirlas a las escleras del ayuntamiento viejo. ¡Qué listas eran! Ellas solas sabían dónde tenían que ir. Les llenábamos de cebada los saquitos que se le atan a la boca (seguro que alguno recordáis cómo se llaman) y mi abuelo las ordeñába. Cuando terminaba me daba el "puchero" y me decía: "Ten cuidao no la rames (no la tires)"