Villalba de Guardo - Palencia

EN EL RECUERDO

El día uno de este mes que entra será un día especial para el pueblo y sus gentes, porque el recuerdo a todos los hijos nacidos y que ya no están a nuestro lado pero si con nosotros, se adueña de nuestro pensamiento.
En estas fechas recuerdo a mis seres queridos y con ellos a todos los demás que nos han dejado.
Y quisiera levantar mi copa y brindar con ellos en la lejanía del tiempo y el espacio que queda, para podernos juntar en un mañana pleno y totalmente dichoso.
Nuestros muertos son nuestras raíces y nuestra historia, algo que no se puede cambiar.
Recordar a todos los que nos han dejado; a los que siguen alimentando esta tierra en la que nacieron por estar enterrados aquí y a los que reposan lejos de ella, pero unidos por una misma cuna, un mismo deseo y una misma esperanza.
Porque les queremos serán eternos porque nos quieren no moriremos.
Recordar a todas las personas que han pasado por nuestra vida, dejando huella y ya no están aquí. Después de su muerte algo ha cambiado en nosotros, ya nada es igual que antes, porque faltan, tú… abuela, padre, madre, hija esposo, amiga, vecino… has pasado por mi vida y te he sentido de tal manera mío que yo te pongo en ese lugar de mi vida de mi cuerpo y alma que te hace inmortal, y es, el amor. Porque el amor vence a la muerte y si hay amor hay inmortalidad. Y hay también esperanza de volvernos a encontrar y celebrar con el rostro iluminado, la sonrisa en los labios y los brazos abiertos ese encuentro.
Así pues, en estos días, recordemos a todos ellos, que no haya nadie que se quede sin nuestro pensamiento y nuestra plegaria.
Elevaremos al cielo muestras miradas para ayudar al aire a que eleve nuestra oración.
Que en estos días, nuestros momentos más íntimos e intensos sean para esos seres queridos y añorados, que no es que nos falten, pero sí echamos de menos.
Que cuiden de nosotros, nos protejan y llenen nuestro recuerdo porque a pesar del tiempo y la distancia, hoy son un poco más nuestros.