Moratalla - Murcia

Esta tarde de mayo moratallero, paseando por nuestras calles bajo el vuelo acrobático y suicida de los vencejos, que como kamikaces se lanzaban en búsqueda de alimento entre giros vertiginosos y picados inverosímiles, ha llamado mi atención ver entre la cartelería electoral, lo que en principio parecía el reclamo de otro partido político, su nombre, Gran Circo Francés, presentaba un elenco de figuras circenses y de animales exóticos. En un principio pensé que podría tratarse de alguna opción política que se había atrevido a retratar de una manera casi perfecta el estado de nuestra actual democracia, y por que no decirlo, que había reflejado el declive de nuestra sociedad de una manera magistral: fieras salvajes, depredadores, domadores, payasos y equilibristas, aparecían en lo que a mí me parecía un cartel electoral que por fin me vendía algo de verdad, sin embargo, tan sólo se trataba de un circo ambulante, de los que proliferan cuando el hambre acecha y hay que buscarse la vida como sea. Curiosamente lo de Gran Circo Francés me ha recordado el incidente del Gerente del F.M.I, un franchute que ha sido pillado con las manos en la masa, aunque en este caso la masa era la de una camarera que lo ha denunciado por agresión sexual. Todo un socialista francés que duerme en hoteles de tres mil euros la noche y colecciona coches de lujo, me pregunto si tambien se pondrá la chaqueta de pana cuando vaya de mitin. El menda es ni más ni menos que el tipo que estaba destinado a jugarse la presidencia de “La Republique” con Napoleón Sarkozy, y va y le mete mano a una pobre trabajadora, metaforas del socialismo actual, cuya dignidad no consintió que este “enfant de la patrie” por muy gerente del F.M.I que fuese le tomase la bastilla. Oh, la la, si Roberpierre levantase su decapitada testa y viese lo que queda de la Marsellesa seguro que no dejaba títere con cabeza.

¿Y...?

Uhhhhhh, la izquierda francesa... Ahora seguro que están hablando de conspiración de Sarkozy.

Menos mal que en Estados Unidos no tienen un tribunal Constitucional que hace lo que quiere el presidente -como aquí en España- Prisión sin fianza para el insensato.

Estos del PP y su ley-moral.