Mollina - Malaga

Juan Luis Valenzuela El Análisis de... Juan Luis Valenzuela

https://ww.elplural.com/wp-

content/uploads/userphoto/1000006.thumbnail.jpg

Mercedes Alaya, “Reina por un día”

https://ww.elplural.com/wp-content/uploads/5568604w.jpg

Imputados que al final no lo son pero que al mismo tiempo dice que son. Reconocimiento en el auto de que asume determinaciones para los que no es competente la juez...
11/09/2013


Dicen que hay que huir de quienes buscan su minuto de gloria aun a costa de joder a quienes tenga al lado. Son muy peligrosos pues cada uno de los 60 segundos ansiados se convierte en navaja de doble filo. Por esa lógica habrá que poner pies en polvorosa de quienes persiguen obsesivamente ser perejil de todas las salsas, muertos en el entierro y novios en la boda.

“Reina por un día”

En esa última categoría habría que ubicar a la superjueza estrella y nuevo gran icono de la derecha, la titular del Juzgado número de Sevilla, Mercedes Alaya. Los sucesos de ayer -porque así hay que tildar lo acontecido con el auto de marras, como sucesos- me recuerdan al programa de aquella TVE en blanco y negro y franquista titulado “Reina por un día”. Aquel programa, de la mano de los presentadores José Luis Barcelona y Mario Cabré, tenía como objetivo realizar los sueños de las mujeres de la España de los años 60. La ganadora o seleccionada por el equipo del programa para ser reina, era coronada simbólicamente y acomodada en el trono.

Alaya, jefa de la oposición en Andalucía

Mitad choteo, mitad en serio, se hablaba ayer que ante la incapacidad manifiestamente empeorable del pseudolíder y amigo de la juez, Juan Ignacio Zoido para parar el hundimiento de la derecha andaluza, la jefa de la oposición al Gobierno andaluz es de facto y sin pretenderlo la magistrada del caso ERE. Alaya y su increíble auto imputador sin imputaciones y competente para acusar pero incompetente para de verdad imputar, no solo logró un minuto de gloria, sino que se convirtió en portadas de prensa y apertura de informativos de radio y televisión nacionales. Es más, por horas consiguió que todos los medios señalásemos erróneamente a Griñán, Chaves y varios ex consejeros como imputados. Al final, tras desentrañar tan farragoso, incomprensible, ininteligible y extraño auto, nadie estaba imputado. Repasándolo tranquilamente parece más una declaración de deseos que una realidad tangible y legal.

Acaparadora de portadas

La verdad es que la juez de gesto hierático y quieto pero ultradinámica en su capacidad para ser eje y protagonista de la información el día que se levanta con gana de auto, con ansia de operaciones policiales o de imputaciones de destrucción masiva, pasa de la templanza aparente al tsunami nacional. Por cierto un maremoto que siempre coincide, casualidades de vida, con acontecimientos de relevancia para los socialistas andaluces.

El amigo Zoido

Lo cierto es que mujer contra mujer, Alaya le fastidió la fiesta de la democracia y el protagonismo legítimo a la nueva presidenta de la Junta de Andalucía. Si uno no fuera malpensado llegaría a la conclusión de que la juez tuvo un golpe sobrevenido de celos al llegar a la conclusión de que por varios años será otra mujer, Susana Díaz, la que realmente, y no por un día, la protagonista real del devenir de Andalucía y de los andaluces. Si así fuera, que no lo creo, haría bien la magistrada en que como su amigo Zoido, pedir la excedencia y presentarse a las elecciones, eso sí, con mejor resultado que el ex juez decano de Sevilla y hoy presidente provisional del PP andaluz.

“Más días que ollas”

Es muy lamentable y bochornoso que en la jornada más importante de un mandato democrático como es la presentación de un nuevo gobierno, Alaya desde su despacho acaparase todas las miradas, noticias y titulares. Como dicen en mi pueblo “hay más días que ollas” y la pregunta es ¿No había más días, ni siquiera otras horas para dar a conocer simultáneamente sincronizado el auto que no fuera coincidiendo con puntualidad suiza con la toma de posesión del nuevo gobierno?

Un scout contra el nuevo Gobierno andaluz

La realidad fue que la oportunidad o inoportunidad de la fecha elegida -según se mire desde el PP o desde el PSOE- significó todo un scout que dinamitó el gran día de la puesta en escena de renovación de la imagen socialista erosionada por los ERE, que se visualizaba ese mismo día y a la misma hora, en la toma de posesión del nuevo Gobierno de la Junta, dirigido por una nueva presidenta y un nuevo tiempo liberado y al margen del escándalo.

Intromisión periódica en los acontecimientos políticos

Alaya fue la contemporánea “Reina por un día” pero en color y pantalla de plasma. Lo malo es que ese reinado de una sola jornada comienza a ser excesivamente reiterativo. Para los que pensamos que los jueces deben trabajar, indagar, mandar investigar y finalmente dictar sentencias o cerrar sumarios de la manera más profesional, rigurosa y justa posible esta instrucción, la de los EREs, se sitúa en las antípodas de lo deseable por su intromisión periódica en los acontecimientos políticos, siempre, casualmente, dañando en el mismo lado.

El proceso de Kafka

No alcanzo a entender el extrañísimo paso dado ayer por la magistrada. Imputados que al final no lo son pero que al mismo tiempo dice que son. Reconocimiento de que señala asuntos de los que no es competente. Asunción y autolamentación de que lo que escribe puede someter a la “pena del telediario” al multiplicar los efectos mediáticos negativos para los inculpados a quienes imputa y luego desimputa. Y por último solo se puede calificar como kafkiano el invento sobrevenido de una nueva vía judicial: la autoimputación. Invitar a una serie de personas a la autoinculpación es algo jamás visto. Y además de inútil es simplemente patético.

Algún día alguien tendrá que explicarnos que hay realmente detrás de esta actuación. Muchas coincidencias y muchas casualidades se están quedando en el camino. Mucho reinado pero que como tal llegará mas tarde o temprano a una conclusión: Los reyes reinan pero no gobiernan… ni siquiera por un día.

Juan Luis Valenzuela, periodista e historiador, es coordinador de El PLURAL.COM en Andalucía