Un Estado democrático Platón era un visionario ;) "- La insaciabilidad unida a la falta de diligencia (améleia) es lo que altera un régimen político (politeía) y lo predispone a favor de la tiranía. - ¿Cómo ocurre eso? - Cuando un Estado democrático sediento de libertad carece de escanciadores comedidos, se embriaga más de la cuenta con el vino puro que le sirven. Entonces, pienso, castiga a los gobernantes que no le complacen por no servirle libertad en abundancia, y los acusa de criminales y oligárquicos. - Así sucede, en efecto. - Se comporta groseramente con los que son respetuosos con la autoridad (arkhé), despreciándolos por dejarse ningunear como esclavos voluntarios, mientras que alaba, aplaude y honra a las autoridades que se comportan como si carecieran de autoridad y a los que careciendo de autoridad se comportan como si la tuvieran. ¿No ha de ocurrir entonces que una comunidad (polis) así se deje guiar por cualquier antojo? - No podría ser de otro modo. - La falta de autoridad (anarkhía) se adueña de las casas particulares, y acaba por apoderarse hasta de los animales. - ¿Qué es lo que quieres decir con ésto? - Pues que el padre termina comportándose como si su hijo fuese igual que él, e incluso le tiene miedo, y el hijo como si fuera igual que su padre, sin respetarlo ni temerlo, creyendo que así es más libre; el meteco es igualado al ciudadano, el ciudadano al meteco, y lo mismo ocurre con los extranjeros. - Eso es lo que llega a ocurrir, en efecto. - Eso y alguna cosa más. El maestro teme y adula a los alumnos y los alumnos ningunean a los maestros y a los pedagogos; los jóvenes emulan a los mayores y rivalizan con ellos en palabras y obras; los mayores se muestran condescendientes, simpáticos, bromistas, imitando a los jóvenes, para no parecer ni antipáticos ni déspotas." Platón, República VIII, 562c-563b |