Colmenar de Oreja - Madrid

Es cuando menos aventurado usar la inscripción “Apis aureliae” del curioso escudo de Colmenar para explicar el origen etimológico del nombre del municipio.

Se trata de un escudo de los denominados “parlantes”, creaciones más o menos arbitrarias cuyos elementos se añadían a los emblemas sin demasiado rigor. Era muy común acudir a los rudimentos de latín del erudito más cercano porque la presencia de la lengua de los romanos parecía dar enjundia a los escudos de linajes y villas. “Apis aureliae” es un buen ejemplo de este uso gratuito del latín en los escudos parlantes. "Apis" significa "abeja" y sobre "aureliae” aún no he investigado lo bastante pero todas las traducciones posibles no hacen sino aumentar la confusión. Se trata pues de un latinajo sin sentido que por lo que veo trae de cabeza a etimólogos e historiadores aficionados como yo.

En cualquier caso nadie puede seguir sosteniendo que el origen etimológico de las palabra colmenar y oreja son apis y aureliae respectivamente, ya que ambas cuentan con sus propios orígenes que nada tienen que ver con el latinajo que nos ocupa. Así es muy discutida por un lado la etimología de colmena, en la que se suele ver una raíz prerromana colmena, derivada de colmos (=paja) y de colmena en cualquier caso deriva colmenar; por otro lado la etimología de oreja parece ser bien clara, proviniendo del latín auricula, 'lóbulo' u 'oreja', diminutivo de auris, 'oreja', en ningún caso aurelia ni arueliae.

Lo que es claro es que fue antes Oreja que Colmenar. Tras la reinvasión cristiana, desde el castillo de Oreja se enviaron partidas para el repoblamiento de las zonas cercanas. Una de estas partidas se encargó de establecer un colmenar en cierto lugar. De este establecimiento surgió un núcleo que llegó a tener peso específico y que se segregó de Oreja en 1513, adquiriendo su nombre de Colmenar de Oreja, quedando clara en él la función y el lugar generadores del asentamiento.Así de sencillo y de bonito.

Claro que interesa y muchas gracias. Ya era hora de que alguien nos diera otra versión de lo que a algunos no nos cuadraba. Otra vez mi reconocimiento