Saelices del Payuelo - León

desde luego el Manta ya tenia artes de carnicero

CONH, danos una pistilla de los que aqui aparecen, Manuel...??...

EL QUE ESTA TUMBADO EN EL BANCO ES EL GOCHO
MAGALLANES

Qué hábil eres Magallanes!!!
Pues los de la foto son Manuel, Esteban y El_Manta. Es graciosa eh!!!!

Parece que nos quedamos en el blanco y negro. Faltan dos días para Samartino y no se ha oido a ningún gocho lamentarse de su destino en este foro.

¿Algún forero ha sangrado alguna vez un cerdo?. Yo, no. Mi trabajo en la matanza siempre fue de subalterno. Ahora, ni matanza siquiera.

Eso sí, el alabar el chorizo casero se nos da que ni pintado. Y con razón. Pero, ¿cuántos hacen chorizo en casa?.

Si, algún forero ha sangrado el gocho.
Saludos. Con el cuchillo en la mano.

No sé quien es el Manta en la actualidad,pero en la foto está de ¡¡rechupete¡¡Saludos.

Y como dice el refran; A todo cerdo le llega su Samartino.
Mañana sera al primer dia de Samartino.. Feliz dia..!!
Alguien va a Mansilla a matar... el dia..??

¿Es San Martín el patrón de los gochos?. Con "protectores" así no hacen falta enemigos.

Me imagino cuál fue la broma que Manuel y papi le gastaron a El-Manta siendo niño.
Eran tremendos. El señor Esteban me preparó a mí muchas faenas. Al ser (yo) amigo fiel de Pedro (hermano mayor de El-Manta ) e ir por allí cada dos días ..., pues, si coincidía con el señor Esteban, venía 'pa' casa con dos bromas al hombro, que para mí equivalían a otras tantas dudas existenciales.

En cuanto a la escena fotografiada, supongo que, una vez matado el gocho, a Manuel o a papi se les ocurrió decir:
- "Yo creo que ya está muerto. Niño, muérdele en el rabo 'pa' saber si 'entodavía' gruñe".
Eran tremendos, verdaderos maestros (como el señor Nazario y muchos más) en el arte de manejar un humor ahora 'malvisto' por los pijos.

La instantánea es todo un documento (a la foto, me refiero)

¡Oye|, Sahelicense: tú que fuiste cómplice en encender la mecha de otrora aventura, a ver si apremias a explicarnos cuan le acontesció a Jandro por esconderse bajo una talega.