Delincuentes Constituidos Leo la prensa, veo el telediario de midiodia en general,y escasamente echo mano de la prácticamente pestilente programación televisiva de los cerca de cuarenta canales TDT, salvo muy esporádicamente y por razones que no vienen a cuento. Me es suficiente con ojear Internet. Y aún así estoy saturado, aburrido y asqueado de este país de truhanes y salteadores choriceros con carnet de políticos. Hace unos días se celebró el festejo de ese engendro que llaman Constitución militar del rey de Franco, con todas las alharacas previsibles y políticos a los que se les caía la habitual baba de memeces para glorificar a la ilustrísima, inmaculada, reverendísima Carta Magna, convertida desde hace tiempo en una futilidad trufada de desperdicios solemnes y jaculatorias franquistas que ha sido hecha a medida de los banqueros. Mientras en las calles algunos sacaban pecho españoleando, todo hay que decirlo, a golpe de mohoso nacionalismo rojigualdo paletomartinezsoria, en la otra parte, los nacionalismos cursis catalán y vasco hacían de las suyas ejerciendo de “oprimidos” y boicoteando la fiesta nacional con su no asistencia a los actos. Una escenificación muy pobre porque después tocará reclamar la soberanía del “todo por la pasta” y se sentarán a negociar como seguir manteniendo la saca bien llena de los CiU y La Caixa, el foralismo vasco y, por extensión, el navarro (aunque aquí no gobiernen los nacionalistas sino afiliados al Opus Dei, en alianza con el Psoe, el del GAL). Dos territorios (País Vasco y Navarra), que quede bien clarito, son pasto para el fraude fiscal legalizado y donde viven a cuerpo de rey las oligarquías peneuvistas y opusinas, respectivamente. El primero, País Vasco, dispone de tres Haciendas propias (que vaya cachondeo) y el segundo, la Navarra de san josemaría escrivá de Franco, ofrece un régimen fiscal-coladero que ha sido blindado para que las sociedades tributen (y defrauden) a la carta. Son territorios “históricos” que remontan sus derechos de pernada político-económicos, dicen, al medievo. De ahí que se conserve ese eufemismo con aroma a estafa territorial llamado fuero o “foralidad”. Pero yo pienso que el Pico Almanzor también es territorio histórico y no hay por qué pagar en maravedíes a los árabes. Pero este no era el tema. La Constitución del 78 no sirve para nada, salvo para garantizar una decrépita monarquía cuasifeudal (en razón de sus exorbitantes privilegios constitucionales) y de hazmerreír, que tiene cada vez menos babeantes lisonjeros de Estado y que está representada, como todos sabemos, por un balbuceante monarca al que ya no defienden ni las garrapatas de la Zarzuela. Ver ese desfile de cretinos y corruptos políticos, jueces nombrados a dedo por aquéllos, la pasma militar y demás herederos de Franco glosando la Santísima me daba cierta repugnancia. Porque a pie de calle las cosas están bastante jodidas, creo. Millones de parados, desahuciados, funcionarios puteados, reformas laborales que están incrementando de forma alarmante los expedientes de regulación de empleo, la pobreza que crece, la mendicidad cada vez más latente, una justicia (Gallardonazi está que se sale) y policía cada vez más represiva contra los más desfavorecidos, por no hablar de una distribución de la renta y la riqueza que está alcanzando unos niveles de desigualdad escandalosos. La nomenklatura sindical es un espantajo que no reacciona o lo hace de cara a la galería y la empresarial ya sabemos en qué percal se mueve: en el del pistolerismo contra los trabajadores. Díaz Ferrán el ex capo de la CEOE, ese que decía que “hay que trabajar más y cobrar menos”, ejemplifica a la perfección el bandidaje de las altas esferas político-económicas de este país y muchos piensan que las guillotinas deberían cobrar efectividad o reactivar otro tipo de escarmientos nada agradables. Me estoy acordando ahora mismo de esa serie televisiva de humor negro realmente divertido (cuando enciendo esporádicamente el cajón digital de aborregamiento masivo) llamada 1000 Maneras de morir. Se me ocurre alguna pero es demasiado pornográfica. Pero…un momento ¿a quién interesa mantener intocable un bodrio constitucional que fue pasteleado por franquistas y neofranquistas y que en la práctica no es más que un garabato jurídico inservible? Acabo de leer que Julio Anguita ha destapado una lista de políticos españoles con cuentas sucias en el paraíso fiscal de Suiza, la caja fuerte mundial de los delitos financieros. En total serían unos 269 más, por descontado, empresarios de este país. Aznar, Dolores de Cospedal, Zaplana, Boyer, el padre del superindependentista Artur Mas, José Folgado, el eurodiputado sociata Carlos Solchaga, Josep Piqué, Jordi Sevilla, el nacionalista vasco Josu Jon Imaz, Anna Birulés, Abel Matutes, Jose M. Michavila…..serían algunos de ellos y suma y sigue el bipartidismo ladrón. Claro está, el todopoderoso Botín debía de figurar en un puesto de honor entre todos ellos. Conviene refrescar la memoria de cómo el anterior gobierno socialista paralizó un expediente de delito contra la Hacienda Pública que iba a abrirse por la Agencia Tributaria contra Don Botinone por fraude fiscal y falsedad documental sobre unas cuentas patrimoniales que el banquero tenía situadas en Suiza. Las órdenes directas del Ministerio de Elena Salgado (experta en fruslerías económicas), quien se había reunido con “Don Emilio” días después de destaparse la trama delictiva de Botín y su familia, fueron taxativas: hay que dar un trato de favor a la mafia financiera del banquero. ¿Esto es o no un escandalazo, tráfico de influencias y gangsterismo político? Después, la AN, que ha trabajado a las órdenes de ese poder político, hizo el resto con un vergonzoso (otro más) auto judicial, archivando la causa que había enviado la Fiscalía Anticorrupción. ¿Pero desde cuando se regulariza un delito fiscal y de esas proporciones (más de 2.000 millones de euros)? Increíble y bochornoso. Hasta los Inspectores de Hacienda pillaron un cabreo de campeonato. Se encarcela a disidentes, estudiantes o trabajadores, por manifestarse en una huelga general, se desahucia al pueblo llano…mientras se indulta a policías torturadores, se premia a los terroristas financieros o promocionan a sus amiguetes o familiares a cargos políticos para que medren a placer. Algo no me cuadra en la Constitución de “todos” y para “todos”. La de los derechos indivisibles e inalienables. Los que pregonan las bondades del texto constitucional y los salvajes ajustes económicos contra los ciudadanos están delinquiendo a manos llenas. Y no somos capaces de cortárselas a dentelladas. |