Los otros valores de las tierras nuevas Mucho se ha debatido sobre el valor de las “Tierras Nuevas”. Para unos solo fueron tierras de secano; para otros un complemento de la renta de las explotaciones familiares; para el Ayuntamiento, una fuente de ingresos. En definitiva, cada cual le daba un valor diferente a esas tierras. Pero de entre todos se aprecia un punto en común, un sentimiento muy arraigado hacia las Tierras Nuevas”. Definamos entre todos cuál es ese sentimiento, por qué es tan profundo y marcado, y qué significado tenía para nuestros antepasados y sin saber por qué, sin conocer su verdadera razón, hemos seguido defendiendo la sensibilidad hacia esas tierras durante varias generaciones. Para comprender bien su significado, conviene retroceder hasta el reinado de Alfonso XIII, desde 1902. La situación político-social derivada de la pérdida de las colonias de Ultramar en 1898, el retraso y subdesarrollo industrial respecto al resto de Europa, y otros factores, exigen un Regeneracionismo Político, hasta entonces fundamentado en un sistema de turnismo de partidos en el Gobierno, de “pucherazo electoral”, y de reparto jurisdiccional, apoyados en la OLIGARQUÍA (Gobierno de unos pocos en su beneficio propio) y el CACIQUISMO (no confundir con terrateniente, pues este podía ser o no cacique, y estos a su vez, no tenían por qué ser terratenientes, podía ser un político de alto nivel, el dueño de una fábrica, y semejantes). Contra el Turnismo de los Partidos Liberal y Conservador, se enfrentaron PSOE, Partidos Republicanos de izquierdas y de derechas, Nacionalistas y sindicalistas. Son los propios políticos conservadores y liberales, quienes inician una desvinculación progresiva de las influencias oligarcas y caciquiles. Es un cambio político y social que no puede realizarse de un día para otro, pues entonces los políticos PIENSAN, no como ahora, en como emancipar la dependencia de los campesinos de los caciques, sin entrar en una lucha de clases que después, difícilmente se podría evitar. En los años 1920 y siguientes, a nivel nacional, se van introduciendo paulatinamente tímidas "Reformas" Agrarias, en las que se libera Tierras Comunales baldías para cultivo, que son asignadas a los campesinos o agricultores, proceso que dura hasta el inicio de la Guerra Civil, en el que se interrumpe, y que se materializa definitivamente durante los primeros años del Régimen, sin entrar a valorar aquí y ahora, esta otra etapa. Durante el tiempo que dura este proceso, no exento de conflictos sociales, hay sangre, sudor y lágrimas, gente que se exilió para nunca más volver, otros emigraron voluntariamente en busca de una vida mejor, y otros decidieron el cambio pacífico hacia la industria de las ciudades, para tampoco dejar nada atrás por lo que volver. Así se iniciaba la decadencia de la vida rural. Todos los sucesos acontecidos durante ese periodo significaron en éste y otros pueblos, y sobre todo, EL ACCESO A ESTAS TIERRAS, REPRESENTAN EL FINAL DE LA DEPENDENCIA DEL CACIQUISMO, EL FINAL DE LA OLIGARQUÍA. Para nuestros antepasados suponía necesariamente alcanzar EL LOGRO Y EL DISFRUTE PLENO del mayor de los DERECHOS ELEMENTALES, FUNDAMENTALES Y NECESARIOS del hombre, la LIBERTAD, sin dependencia de obrar y de pensar, y se establecía el tránsito hacia el siguiente estadio, la IGUALDAD y una nueva forma de vida. Es la historia la que nos permite entender las situaciones actuales. En este pueblo hemos tenido todos un sentimiento y pasado común, que ahora con esta Nueva Distribución de esas tierras, se priva a unas personas de tener y preservar su propia historia, sus propios recuerdos, los de su familia, y en cambio se otorga a otras, a algunas personas de las que nada tienen que ver en esa Memoria que se nos quita. Un pueblo sin memoria y sin historia, es siempre un pueblo condenado a volver a sufrirla. Por lo visto aquí, estos últimos años, desde la aceptación y negociación de las bases por este Ayuntamiento, hasta hoy, cada día es más cierto que 100 años después nos RESTAURAN la OLIGARQUÍA, CON PEORES ACTOS QUE LOS DEL CACIQUISMO, en un acto o intención de regresar al pasado. No se acierta a comprender con qué DERECHO LEGÍTIMO establece este Ayuntamiento Socialista, en contra de sus TEORÍAS DE JUSTICIA SOCIAL, las BASES de un Reparto que no es justo y racional, que favorece la DESIGUALDAD tanto en oportunidades como en el TRATO SOCIAL recibido, que fomenta la DIVISIÓN, que nos priva de poder seguir transmitiendo nuestra historia, y que otra vez condenan a muerte el recuerdo, de aquellos que sufrieron y lucharon para que hoy pudiéramos tener IGUALDAD, JUSTICIA y LIBERTAD, síntesis de lo que se nos está PRIVANDO. ¿Qué clase de “zoom politikom” (animal político) sois, ayuntamiento? para decidir qué casa, persona o familia puede o no puede tener y conservar su pasado y su historia. El resultado del Reparto, responde por sí mismo: prevalencia del interés particular y beneficio propio. ¿De verdad creéis que sois socialistas? ¿Y creéis que se os puede denominar “personas”? Tan solo sois el fruto de vuestra profunda ignorancia e incultura política, social e intelectual. Nadie os hemos pedido que la compartáis con nosotros, por lo que si os quedara DIGNIDAD, si es que sabéis qué es, mañana mismo dejaríais a disposición del pueblo lo que es del pueblo: el AYUNTAMIENTO, las Tierras que ILEGALMENTE (de forma sucia, hipócrita y rastrera) os habéis repartido y su HISTORIA. |