Espiel - Cordoba

"¿En qué gastas mi dinero?". Ésta es la pregunta de una campaña de recogida de firmas que ha emprendido el Partido Comunista de España (PCE) para averiguar en qué emplea el Rey la millonaria asignación que él y su familia reciben anualmente del Estado. Para los ciudadanos, es una incógnita. Y para los republicanos, un auténtico escándalo.

La iniciativa arrancó en el centro de Madrid. Los dirigentes del PCE se apostaron en la Puerta del Sol, frente a la emblemática estatua del Oso y el Madroño y a cinco minutos andando del Palacio Real. El lugar no se eligió al azar: fue allí donde los capitalinos celebraron el 14 de abril de 1931 la llegada de la II República, que terminó tras la Guerra Civil que desembocó en la dictadura franquista.

En una hora, el PCE ya había recogido unas 150 firmas. "La verdad es que estamos algo sorprendidos", manifestó el secretario general del partido, José Luis Centella. "Pensábamos que iba a haber cierto rechazo, pero la gente está firmando con toda naturalidad", añadió. Al mismo tiempo, defendió la campaña, mal vista en círculos monárquicos y conservadores. "Queremos saber cuál es el sueldo del Rey. Lo invitamos a que dé un paso adelante y que él sea el primero en responder al interés de los españoles en conocerlo", dijo Centella, quien recordó que ya muchos alcaldes o diputados hacen públicos sus ingresos en internet.

En este sentido, la responsable del movimiento republicano de PCE, Gloria Aguilar, criticó el "secretismo" en torno a las cuentas de la Casa del Rey, que para 2010 recibió una asignación de unos 8,9 millones de euros. "Ni siquiera la comisión de secretos oficiales del Congreso de los Diputados sabe en qué se gasta ese dinero", se quejó Aguilar. Tampoco lo sabe, agregó, el Tribunal de Cuentas. "Intentan blindar al Rey", apostilló Centella, quien también exige transparencia en cuanto a los regalos y donaciones que recibe la Familia Real.

El objetivo de la campaña, que durará tres meses y también se lleva a cabo en internet, es que el Congreso tramite una propuesta exigiendo que el presupuesto de la Casa Real no sea sólo público, sino que además sea sometido al control del Parlamento, como sucede con otras monarquías europeas.

Según el artículo 65 de la Constitución española, el monarca, como jefe de Estado, recibe de los Presupuestos Generales del Estado una cantidad global para el sostenimiento de su familia y la Casa del Rey que puede distribuir "libremente". Esto también incluye, por ejemplo, la asignación otorgada a los Príncipes de Asturias. "Pero eso no impide que el rey haga públicas sus cuentas", sostiene el líder del PCE.

En opinión de los comunistas, la opacidad de los gastos de la Casa Real "es una señal de la debilidad que tiene la monarquía en España, que necesita ocultar su verdadera realidad ante el temor de poner en evidencia el coste que supone para el conjunto de los españoles mantener una familia cuando tantas familias sufren las consecuencias de la crisis económica más dura de los últimos tiempos". "Mientras los de abajo lo pasan mal, la Casa Real continúa opaca", denuncia a este respecto Aguilar. El PCE apunta además, citando un artículo de la prensa belga, que Don Juan Carlos ocupa el tercer lugar en el ránking de las monarquías europeas en cuanto a su patrimonio, que rondaría según esas informaciones los 1.700 millones de euros.

La actual crisis, sin embargo, no ha sido ajena a los ingresos del Rey: en septiembre pasado y por primera vez en la historia, el Gobierno decidió congelar la asignación del Estado para la Casa del Rey. Por eso, el aporte se mantuvo en 8,9 millones de euros, la misma suma que en 2009. La iniciativa, en todo caso, partió del propio Don Juan Carlos, quien cumplió 72 años el pasado 5 de enero.