Torre de Juan Abad - Ciudad Real

DEL “PIZORRO MAGRAO” Y “LA HOYA DE LA TRAICION”
Torre de Juan Abad
El 15 de diciembre de 1575, ante el escribano Francisco Vázquez, los hombres buenos
y justos, hombres memoria, de Torre de Juan Abad, Juan Mexia y Francisco Morales el
“Viejo” respondían a la pregunta número 37* del cuestionario: “…que en la torre que
había en esta villa junto a señor Santiago donde estaba el dicho alcaide Juan Abad,
había gente de a caballo y de a peón para guarda de la tierra porque el castillo de
Xoray que esta media legua desta villa y agora esta derribado, era de moros y tenía
puestas treguas cristianos y moros para la seguridad de los ganaderos y con esta
conformidad se juntaron un muchacho cristiano y otro moro, que guardaban
ganados y el moro no traía de comer y le dixo al cristiano que no tenían bastimento
que lo estaban esperando que habían ido por ello a la ciudad de Alcaraz, de lo cual
dio noticia el muchacho christiano a su padre y su padre al alcaide y el dicho alcaide
salió con mucha gente y puso una emboscada en una hoya que agora se llama la
Hoya de la Traición que es en la dehesa de esta villa y aguardaron a la escolta de los
moros; y los cristianos dieron en ellos y los de la emboscada se metieron en la
fortaleza de Xoray y yéndose a recoger los moros a la fortaleza salieron los cristianos
a ellos y los tomaron en medio y los rompieron y los moros dieron a huir y el alcaide
dio tras el rey moro y lo alcanzo en un pizorro y le dixo que si él daba a Xoray y el rey
moro respondió que sí, aunque de mal grado, y entonces el alcaide le dio una
lanzada al rey moro, y dixo pues ansi se llame este pizorro y que después aca se
llamo el Pizarro Malgrado, y ansi se gano la fortaleza de Xoray….”
(Cuenta otra leyenda que este rey moro de Joray, Yusuf que fue el último, padre
perverso y mago encantador que encanto a su hija, hoy moza sanjuanera, por unos
amoríos no consentidos con un galán cristiano)
Eznavejor y su influencia en la zona, que fue notable, cayó en manos de los cristianos
en 1213, poco después lo haría Alcaraz. Eznavejor sería conquistada por parte del
ejercito que había vencido en las Navas de Tolosa junto a los antiguos pobladores
cristianos de Torre de Juan Abad, a pesar que pensamos que la mayoría de sus
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Libro "Con Once Orejas"
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habitantes habitaría en la fértil zona de la Vega de Santa María por razones obvias:
agua en abundancia, proliferación de huertas, bosque de encinas y robles al norte y
sur, pastos… y que serían menos los torreños que morarían en el actual asentamiento
del pueblo, entre ellos Juan Abad, al que la leyenda ha convertido en héroe epónimo
tras la derrota de los moros de Eznavejor. Nótese que uno de los informantes dice
“tenían puestas treguas cristianos y moros” por lo cual aceptamos una pacífica y
notoria coexistencia, varias veces centenaria, entre ambos pueblos. Convivencia rota
por la debilidad temporal de los moros, y descubierta de forma fortuita por los zagales
cristianos, que no tardaron en avisar a sus padres y estos a su vez dieron el aviso a las
vanguardias cristianas que andaban por la región.
El 17 de enero de 1996, Gerardo Velázquez, torreño de nación, relataba al fabulista,
lo que la memoria popular aun guardaba de esta leyenda etiológica: “Lo sucedido en la
“Hoya de la Traición”, que se encuentra en la parte de la solana de la dehesa Boyal
del pueblo, pues, según cuentan, los moros que ocupaban los pizorros del “Estrecho
de las Torres”, pues, un día se juntan los muchachos de nuestro pueblo con los
muchachos de los moros, zagales pastores, pastorcetes… allá, a la vera del royo de
“Las Aliagas”, y a lo hora del almuerzo los nuestros sacan el almuerzo y empiezan a
comer y en viendo que los moros no sacaban el suyo, los mozos cristianos les
preguntan que pasa que no comen, y los muchachos de los moros les dicen que no
tienen para comer y les dicen que sus padres estaban en Alcaraz a la búsqueda de
víveres… entonces al regreso, los muchachos del pueblo se lo cuentan a sus padres,
lo de la necesidad de la morería. Y es entonces cuando forman un grupo de guerrilla.
Y se atrincheraron y escondieron en la hoya mentada y al regreso de Alcaraz los
atacan y derrotan, es cuando toma el nombre de la Hoya de la Traición. Después, los
moros, fueron perseguidos y obligados a abandonar las posiciones que ocupaban. Al
pedirles los cristianos que entregaran las posiciones, el cabecilla moro contesto que
lo hacía de mal grado y de ahí nace el nombre que nosotros llamamos “Pizorro
Magrao”
Como se puede comprobar, casi cuatrocientos cincuenta años más tarde la leyenda no
ha sufrido gran deterioro, el mito permanece en el paisaje geográfico. ¿Por cuánto
tiempo? Nos maliciamos que el origen de ella, en su parte inicial, la “Hoya de la
Traición”, es de origen morisco, pues de ser cierta que es de la “Traición” y no de la
“Oración, se trato de un pérfido acto de deslealtad. Los vencidos que decidieron
permanecer en el lugar, conservarían el relato de los hechos para la posteridad,
recuerdo de su derrota y la felonía de los vecinos cristianos.
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Hay estudiosos que apuntan de Juan Abad, héroe de nuestra historia, más que alcaide
de la torre, sería su conservador y cuidador. Otros piensan que, tras la caída de
Eznavejor, y otorgada a la Orden de Santiago, fue un caballero, de este nombre y
santiaguista, el responsable de repoblar la zona y el que daría su nombre al pueblo.
*“Relaciones Histórico-Geográficas-Estadísticas de los Pueblos de España hechas por
iniciativa de Felipe II” Edición de Carmelo Viñas y Ramón Paz. Madrid 1971