Puebla del Príncipe - Ciudad Real

La solidaridad es un negocio de no te menees, si quieres puedes comprar solidaridad por cuartos, resulta baratísima tan fácil como aportar un euro y , dormir tranquilo. Se trata de limpiar la conciencia y, que el costo sea mínimo para nuestro bolsillo.

Pero lo peor lo estamos viendo en los bancos, ¡son unos campeones!, utilizan su desFACHAtez, su falta de escrúpulos y consideración para continuar con su política de ande yo caliente y ríase la gente, aprovechan hasta lo más mísero del ser humano para que los resultados de sus cuentas den múltiples beneficios.
¿No hay un convenio para que las cuentas solidarias no tengan comisiones? Pues no oye, están cobrando comisiones que llegan en algunos casos al 70% por cada donativo que se ingresa en la cuenta solidaria creada para la ayuda a Haití. Es decir, haciendo las cuentas que hacía mi abuela, si llevan recaudados posiblemente tres millones de euros los bancos han ganado cerca de dos millones, dinero ganado con el negocio de la muerte, con el hambre, la desgracia y el sufrimiento. No conozco a nadie tan mezquino, esta vez se han pasado. Y luego presumirán de sus beneficios o aprovecharan ese dinero para pagar a Ferrari para que el cabezón de Alonso siga cobrando sueldos estratosféricos y luego pague sus impuestos Dios sabe donde.
El banco de Botín ahora dice que devolverá las comisiones a quien las reclame, no me veo yo a los haitianos reclamando, bastante tienen.
¿Qué pasa con esto…? Pues que la gente cada vez desconfía más y es más remisa a dar dinero para las causas humanitarias, porque al final, nos cansamos de fraudes en las Ong´s. y no tenemos claro quién controla ese dinero, donde va, como lo reparten entre la gente ni quien lo administra. Nunca se sabe y esa sombra oscura aparta toda buena intención.
¿Para que voy a dar mas ayuda humanitaria si se acumula en el aeropuerto de la capital de Haití, sin poder ser repartida entre la gente de forma correcta? ¿Cómo van a ser capaces de repartir el dinero que les llega de los gobiernos cerca de quinientos millones de euros, si no saben repartir mantas ni cajas de galletas?

Ha hecho falta un terremoto para dar dinero a Haití, cuando la ONU ya estaba harta de pedir ayuda para erradicar el hambre de este país antes del terremoto.
Otra cosa es la manera en la que se está utilizando la tragedia de este país para manipular la opinión pública o para influir en cómo afrontamos la crisis.
Se le está dando una cobertura informativa exagerada alargando esta agonía en directo y vía satélite.
Dentro de una semana o quizá un mes, cuando ya Haití deje de ser noticia, desaparezca de los medios y se apaguen los focos, nadie se preocupará. La gente dará por hecho que la ayuda llegó y se repartió con éxito. Los haitianos volverán a ser invisibles. Volverán a ser el tranquilo e insignificante país más pobre del mundo y todo volverá a estar en su sitio.
Mientras morían en cámara lenta no hacíamos caso. Han tenido que morir de una forma más rápida para empujarnos fuera de nuestros sillones. ¿Hay que llegar a este extremo? Ayudemos. Ayudemos aunque no haya terremotos o huracanes. Abramos los ojos, y las manos a las desgracias aunque no salgan en la tele.

La próxima vez remítenos a este enlace, , y no resaltes desFACHAtez, con clara alusión a una idiología, que tienes menos verguenza que un gato en una mantanza.
Debes tener tú propia opinión sobre las cosas.
Copiar y pegar ese enlace y vereis la opinión del periodista Pablo Jato.
Eres la persona de siempre con tú odio hacia una orientación política.
No estoy en desacuerdo con el artículo pero si estoy en desacuerdo con tú clara alusión y manipulación política.
Emilio.

Buena labor de investigación, maravillosa, ¿Lo ha hecho usted solito? Es calcado, pero igualito ¿eh? al del Sr. Jato. Excelente capacidad de análisis la de usted.
Gracias por ir descubriéndonos webs de contra-información, esta me encanta, la voy a poner en favoritos, que no se me olvide, le estoy agradecidísimo, me ha encantado la sección de “Campañas destacadas” la de “Contra la ilegalización de las ideas” (siiiií una que tiene una careta con la boca tachada o tapada para que no hable) gracias, repito muchísimas gracias.

Hágase mirar “SU” ordenador creo que no le funciona la auto corrección, (idiologia, verguenza, mantanza, vereis) y, el del trabajo también tendrá que mirarlo que va mal, pero bueno de esto último siempre le podemos echar la culpa a Zapatero, por no poner pc´s en condiciones.

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¿¿Puedo opinar sin ofender las ideas de nadie??Espero que así sea por el buen clima del foro.
Puedo opinar y opino que hay muchas necesidades en muchísimos puntos del planeta a las que, por desgracia,no podemos llegar a tiempo y mucho menos el ciudadano de a pié que nos limitamos a contribuir con algo.
Solo parece salir a la luz el problema cuando, como en esta catastrofe de Haití, sale a la luz publica, vía televisiones y prensa en general, pero es en el día a día cuando hay que ser solidarios y que los mandatarios de todos los países desarrollados se unan y unifiquen criterios al respecto.
Poca cosa podemos hacer nosotros, a no ser sacarnos algo de nuestros bolsillos y que BIEN ADMINISTRADO llegue a esa pobre gente.
Que cada uno haga examen de conciencia, empezando por los políticos, que son los que administran lo que aportamos vía renta y se aprieten un poco el cinturón.Lo demás es pura demagogia que no solucina casi nada por desgracia.
Por cierto, he leído que por cada diez euros que se envían a Haití o a cualquier país, cuatro son para la entidad bancaria que lo gestiona y los más triste es que es totalmente legal.

Hola. Cada cual es libre de expresar lo que quiera, pero siempre he dicho y lo seguiré diciendo que la libertad de expresión tiene límite: uno: el respetar y no insultar y dos: no manipular la información con intereses partidistas.
Esa es la reinvidicación que hago para el foro y no me parece bien que nadie manipule información.
Cuando yo publico algo, me remito a la fuente de información, que ha sido el BOE y las publicaciones del BOE son las publicaciones de las Administraciones Públicas, no opiniones particulares, ni partidistas, ni manipuladas. Por lo tanto gorzan, en principio, de veracidad.
Emilio.