Ahora que vamos despacio Vamos a contar mentiras, tralará, vamos a contar mentiras, tralará vamos a contar mentiiiiiiras. Que sí, que ya sé que es el último día del año y que no conviene dar el c0ñazo con asuntos políticos, pero no puedo dejar de decirlo hoy en fresco, recientito. Y es que me viene a la mente un señor con barba, que en su campaña, o más bien en su NO campaña, pues práctimente no dijo nada en ella más que tres cositas, a saber, lo malísimos que sus oponentes, lo bien que lo iba a hacer él hasta el punto de arreglar el cotarro en menos que canta un gallo y que no iba a subir los impuestos. En esto basó todo. Y ahora resulta que, a excepción de lo primero, lo de que sus oponentes son malísmos, que siguen opinándolo, de las otras dos cosas, nasty de plasty. Nos cuenta que esto no va mejorar al menos en los próxinos dos años y que por tanto tendremos que apretarnos el cinturón los mismos de siempre, y también nos dice que nos va a subir los impuestos. ¿Pero no quedamos en que eso no lo iba a hacer nunca? ¿pero eso no era contrario a las ideas ultraliberales que defiende? ¿los que le votaron no se sienten engañados?. Y aún no nos ha contado lo peor, que está por venir. Como quedan por delante las elecciones andaluzas, en las que están cebados y deseosos de ganar por fín, es posible que no muestren hasta después su cara real, y nos la vayan dosificando en pildorazos. Porque si hacen todo de una vez y antes de esa fecha, se exponen a no ganar en Andalucía, y ese sería un gran palo para ellos, un paso atrás difícil de asumir, dar aire y vida al contrincante. Saludos. Castaño |