Santiago del Campo - Caceres

Acabo de leer el nuevo libro de nuestro pueblo y dejo mi parecer.

Es un libro descriptivo principalmente de nuestras obras artísticas, acompañadas de muchas y bonitas fotografías. Está muy bien realizado y felicito a los autores por ello.

Ante el desconcierto que pueda originar algún pequeño error o interpretación (que son “pecata minuta”), salgo para su aclaración y corrección, sin ningún ánimo de llevar la contraria: 1.- La “jara” no invade nuestro término. 2.- La fotografía del “cauce del río” es la charca de la Era. 3.- Desde la “puerta de Garrovillas” de nuestra Iglesia no se divisa Garrovillas, sino que mira hacia esa localidad. 4.- En nuestras Candelas, son cuatro las cantoras, no llevan ningún roscón y la letra es muy parecida. Por favor que nadie vea mi deseo de tirar por tierra el libro, que es magnífico.

No estoy de acuerdo que hubiéramos pertenecido al señorío de Monroy y que el nombre de Santiago venga de Orden Militar de Santiago. Es verdad que eso también lo dicen otros investigadores e historiadores.
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Echo mucho de menos no intentar localizar la ermita de San Pedro y decir que la ermita de la Concepción debió estar por lo que hoy es el local del Hogar y la Casa de la Cultura y que la casa del Ayuntamiento actual fue la del boticario D. Félix Luceño y Luceño.

Me encanta el libro, por la gran confirmación que veo de lo mucho que yo he expuesto de él en reiteradas comunicaciones (citas históricas, hospital, la cofradía de San Pedro, etc.) y que suscita que los padres del arcediano Rodrigo Pérez pudieron ser Antonio Perez, casareño y María Rodríguez (tal vez santiagueña) y el posible paso del “camino mozárabe”. Esto puede desatar muchas hipótesis. Es muy interesante.

Reiteraré miles de veces el agradecimiento, por el acierto que habéis tenido de hacernos llegar el conocimiento verídico de nuestras obras.

Abrazos.

Hola,

Yo estuve en la presentación del libro, y los autores refirieron que la belleza artística de Santiago es tan grande que daría para otro libro semejante, incluso que la ermita de San Bartolomé podría ser restaurada para el disfrute de todos. Quizá se centren más en ella y en otras ermitas en el futuro, y de ahí que no hayan profundizado en ese tema.

Yo tampoco oí que la influencia del nombre de "Santiago" sea por los militares santiaguistas, aunque está clara su estancia en Garrovillas y su cercanía al pueblo.

Es un gran libro, la verdad

He leído el nuevo libro del pueblo. Mi agradecimiento y mi enhorabuena a los autores, pues nos ayudan a conocer nuestras raíces y nuestro patrimonio (como ya hizo Francisco Cerro Pantoja con su magnífico trabajo "Santiago del Campo, un pedazo de su historia"). Resalto la calidad de las fotografías y el valor de algunas de ellas, sobre todo las de la ermita de San Bartolomé, cuyo interior no conozco. Todos los capítulos son breves, porque un libro que pretende ser también una especie de guía turística no puede contener una información más exhaustiva. Añadiendo mi humilde aportación a lo señalado por Cerro de las Vacas, diré, como creo que ya lo hice en otra ocasión, que la ermita de San Pedro estaba en la calleja que, desde enfrente de la fuente del Tejar, se dirige a la Ortigosa y de la que aún se conservan restos en lo que hoy es un tinado. Y también que los padres del arcediano casareño, emigrado a Perú, Rodrigo Pérez, eran santiagueños. Asimismo es oportuno señalar que Santiago del Campo no fue nunca villa, sino lugar o aldea dependiente de Garrovillas.De todas formas con el fin del régimen señorial y con la creación de los municipios en el siglo XIX, villas, aldeas y lugares se igualaron en categoría.
Un saludo para todos mis paisanos.
BERNARDO DIONISIO FERNÁNDEZ.