Se nota el estilo MR, terminada la era ZP "Yo a usted no le debo absolutamente nada", fue la expresión más feliz escuchada en el salón de plenos del Congreso durante el debate de investidura. Así respondió el ya presidente Mariano Rajoy a los requerimientos del portavoz de Amaiur, antes de rematar la frase: "ni yo, ni la sociedad española. Somos los acreedores". Ha tenido más emoción la reacción al estreno de los diputados proetarras que la despedida a Rodríguez Zapatero, tan fría como discreta. Responder con esas palabras a la cantinela del batasuno Iñaki Antigüedad puede entenderse como búsqueda del aplauso popular o como declaración de intenciones hacia los que quieren negociar recompensas políticas por haber protegido a ETA. Si cabe la doble interpretación, mejor. Tengo la impresión de que los de Amaiur han tenido su minuto de gloria al intervenir en el debate de investidura, y poco más. Su paso por la Cámara Baja puede ser anecdótico y testimonial si repiten actitudes contradictorias como la de abstenerse en la votación sobre la elección de Rajoy con ese argumento pueril de "no participamos en la elección de un presidente del Gobierno español". |