Llerena - Badajoz

Uno, que es profano en menesteres sanitarios, conserva todavía un poco de sentido comun, creo.
Tras el desgraciado suceso del niño marroquí acaecida en el hospital Gregorio Marañon de Madrid, nos enteramos que las sondas nasogástricas y parentales son exactamente iguales y salen al exterior desde la incubadora por el mismo orificio. Las enfermeras para asegurarse de cuál es la que están tocando dan un pequeño tironcito. No me extraña que esta pobre sanitaria que hacía su primer de trabajo se haya equivocado.
En el mismo periódico que leo esto habla un pediátra que ejerce en un hospital de Valencia y dice que en su Comunidad diferencian las sondas parentales y las nasogástricas con un distinto color para cada una: rojas y verdes y además salen al exterior de la incubadura por distintos orificios. ¡Menoa mal! Un poco de sentido común. Aquí, en nuestra querida Extremadura, creo que no se diferencian tampoco.
A ver si con tanta superespecialización, con tanta autosuficiencia, nos vamos a olvidar que los edificios se empiezan por los cimientos.
De todas formas siempre les quedan los virus para justificar los errores.

Por lo que se ve es más importante la carpa de la fiesta.

Y qué quiere le contesten, si lleva Ud. toda la razón del mundo. Los que podrían hacerlo no lo harán porque no les interesa que se remuevan éstos temas. Salud