La Codosera - Badajoz

Angelines Rodríguez

Creo que este foro es un buen exponente de las cosas que ocurren en nuestro pueblo, ya que los de que aquí, la mayoría, por no decir todos de los que colaboramos estamos interesados en los temas nuestros, no los del pueblo de al lado, si no de lo que pasa aquí.

Aquí, como en todas partes, hay personas de todas las tendencias y formas de ser. Los hay presumidos y otros no tanto. Los hay que les gustan ayudar a los demás y otros son indiferentes a lo que le ocurra al vecino. Los hay trabajadores, currantes, y otros que huyen del trabajo a varas verdes.

Una de estas personas, con valores dentro de los adjetivos que hemos indicado, es Angelines Rodríguez, ó Angelines a seca ya que no hay otro nombre igual en todo el pueblo, con la salvedad de que de los tres grupos de palabras que hemos escrito, las buenas, son todas para ella.

En el tema educativo y de formación, la labor que ha realizado esta persona en años anteriores, para con las jóvenes de nuestro pueblo no tiene precio. Eran años inquietantes para la mujer que no estaba dispuesta a dejar pasar la oportunidad de situarse en los mismos planos de igualdad que el hombre. En el pueblo era difícil, por cuanto los centros educativos estaban a mucha distancia. Los primeros muchachos de secundaria y después universitarios, se desplazaron hasta Badajoz y vivieron en pensiones. En las niñas los padres no toleraban que sus hijas estuvieran desprotegidas, lejos de casa, tal como lo hacían los niños, por lo cual se quedaban en casa sin la oportunidad de estudiar en el futuro.

Angelines va a ser la persona que rompa esta inercia que impida que las niñas no tengan las mismas oportunidades que los niños, y comienza a trabajar para ello. Una labor callada, día a día, va a permitir que muchas chicas comiencen sus estudios en Badajoz.

Como componente de una Congregación religiosa, potencia a las jóvenes de su pueblo informándoles de las ayudas existentes y de las ventajas que hay en el Colegio donde ella trabaja. A casi todas les solicita las becas para que los estudios no les cuesten dinero a sus padres. Le reserva plazas en su Colegio, como ella le llama, y las apoya en todo momento. Angelines pasa a ser el Angel de la Guarda de todas ellas. Las madres de estas niñas saben que van a estar como en su casa, en unos años que no era como ahora, que a la mujer le costaba mucho salir del pueblo.

Y del Colegio a la Universidad. Y comenzaron a salir profesionales de Magisterio, de la Medicina, del Periodismo, etc., etc., y Angelines callada, sin darse importancia, paseando por las calles de nuestro pueblo los fines de semana y dándoles un hola tímido a las gentes. Mujer sencilla, humilde, pequeña de estatura pero grande de corazón.