Tineo - Asturias

Más de 2.000 locales recuerdan que la norma no ha sido aprobada y exigen zonas de fumadores

Quieren transmitir el mensaje de que no está todo perdido y de que aún hay margen para luchar contra la modificación de la ley del tabaco que prohibirá fumar en cualquier establecimiento público. La hostelería asturiana se suma hoy a una campaña nacional que reclama que se creen espacios reservados para los fumadores. Asumen las campañas contra el hábito tabáquico y la protección de la salud de sus trabajadores, pero quieren que se respeten los derechos de todos sus clientes.
La asociación Hostelería de Asturias, que forma parte de la Federación Española de Hostelería (FERH), es la entidad que liderará este movimiento. Inicialmente la campaña se articulará a través de los más de 2.000 bares, cafeterías, restaurantes, discotecas y salones que tienen asociados. Sin embargo, el proyecto está abierto a la incorporación de otros profesionales que comulguen con estos principios y que también consideren que la normativa lesionará sus intereses.
Aunque desde el Gobierno ya se ha anunciado que la ley entrará en vigor el día 2 de enero, los hosteleros creen que tienen margen de maniobra. Recuerdan que el día está fijado dentro del texto de la normativa, pero matizan que la norma aún está en fase de debate, por lo que puede modificarse. La propuesta está actualmente en el Senado y todavía debe regresar al pleno del Congreso.

Hostelería de Asturias también apela a un informe elaborado por la FERH hace unos meses para justificar su postura. En ese documento se dice que comparten “el objetivo último de la ley de luchar contra el tabaquismo” y que quieren “una hostelería con más espacios libres de humos”. Pero temen las pérdidas que se pueden generar.
En el contexto europeo, señalan que sólo Irlanda y Chipre tienen la prohibición total de fumar, porque en el resto de países existen diferentes tipos de excepciones. Como ejemplo, citan que en Alemania los locales de menos de 75 metros cuadrados en los que no se sirven comidas permiten fumar o que en Austria los locales de más de 80 metros cuadrados pueden habilitar zonas específicas para el consumo de tabaco. También Bélgica, país en el que los locales en los que no se ofrece comida elaborada se puede fumar, ya que se entiende que son espacios para “socializar”.

Con estas premisas, Hostelería de Asturias se compromete a dar la batalla en las próximas semanas

yo no soy fumador,pero me parece que esto se está llevando a un terreno de pura dictadura,mejor se ocupaban de otros problemas bien serios.

Pura hipocresía. Nadie discute que el tabaco sea nocivo para la salud, pero en lugar de ir acotando poco a poco a los fumadores, lo que deberían de hacer era prohibirlo del todo. Pero claro, eso no les interesa, hay muchos mi9les de millones de euros en juego y el Estado saca buena tajada. Yo soy fumador y espero que pueda seguir echando un cigarro después de los cafés. La hostelería se va a resentir mucho y no están los tiempos como para perder clientes aunque "apestemos" a humo.

Por cierto, ¿habrán pensado los que tanto prohíben, que muchos jóvenes y no tan jóvenes, saldrán a fumar a la calle y producirán molestias a los vecinos? Imaginemos un bar de copas donde la mayoría de la gente fuma, saldrán a la calle con los vasos y a fumar, lo cual también está prohibido porque no se puede consumir alcohol en la vía pública.

¿O será que tanta prohibición solo busca rascarnos el bolsillo con multas a tutiplén?