Morcín - Asturias

En El Comerico de hoy, bajo el título de "72 millones de euros en ladrillo, a la basura" se da un repaso a obras ejecutadas con cargo a los fondos mineros, y, como no podía ser de otra manera, se habla del Museo de la Lechería, diciendo entre otras cosas, que se invirtieron 1,1 millones de euros.
Pues bien, cuando se recibieron las obras, en octubre de 2009,el mismo periódico publicó la noticia, señalando que "Según el arquitecto que desarrolló el proyecto, las obras estaban tasadas en 857.000 euros, aunque se licitaron por 1,1 millones de euros. Por su parte, la constructora exigía 1,4 millones, añadiendo así un sobrecoste de 300.000 euros que, en un principio, el Consistorio no estaba dispuesto a abonar. Finalmente, el acuerdo logrado esta semana fija el precio de los trabajos en 1,2 millones.", o sea, que se pagaron 1,2 millones por unas obras valoradas en 857.000 euros.
Un buen acuerdo, si señor, pero para la constructora, y el Ayuntamiento tragó porque quería abrir el museo cuanto antes, bueno, pues cinco años más tarde el museo está sin abrir y convertido en una ruina.

Como cayó así como del cielo más de un millón de euros para el museo, alguien creyó que seguiría lloviendo millones y se lanzó a una demencial campaña para hacer un teleférico en La Madalena. El asunto terminó como debía terminar, con un estrepitoso fracaso, y menos mal que todo acabó antes de empezar la obras, porque de otra manera lo probable es que el Ayuntamiento estaría debiendo ahora mucho más dinero del que ya debe, que es muchísimo.

Graciano Torre (Oca) hijos de buena madre y padre desconocido: Museo del Queso de Morcín.
Triki, calzonazos la edad y los vermus de la paloma te dejan fuera de juego.
Cuervos se os avecina un invierno crudo.

La relación de Graciano Torre con OCA puede ser una leyenda urbana, pero lo cierto es que se habló y se habla mucho del asunto. No se si será de aplicación eso de cuando el rio suena agua lleva, quizás no, porque Triqui reconoció que metió la pata. A ver si van saliendo más cosas o todo queda en nada, es que con lo que se está descubriendo uno tiende a sospechar que cuando tanto se habla de una cosa algo hay de verdad en ello. Pero nada, debe ser que tantos contratos con la Administración están plenamente justificados porque los de OCA trabajan muy bien y muy barato, aunque aquí en Morcín hubo importantes diferencias en el precio y en la calidad de los trabajos para el Museo de la Lechería, ¿sería éste un caso aislado?.