MITOLOGÍA ASTURIANA 16 PATARICO Tienen cierto parecido con los Cíclopes de la mitología grecorromana, especialmente el taimado Polifemo que a tan duros trabajos obligó a los héroes de "La Odisea" La mención más antígua del PATARICO aparece en la obra de los eruditos del occcidente asturiano Bernardo Acevedo Huelves y Marcelino Fernández, que nos lo presentan como un gigante de apariencia horrible y dotado de una inmensa fuerza, provisto de un único ojo en medio de la frente, cuya única obsesión es provocar el naufragio de los barcos donde huelen "a cristiano"; aún cuando reconocen que vive habitualmente en un país lejano, centran el campo de sus fechorias en el litoral cantábrico entre los ríos Eo y Navia. Añaden que están dotados de un olfato realmente especial para detectar náufragos, a los que luego tragan crudos y aportan la circunstancia no conocida de que parecen disponer de grandes tesoros escondidos. En toda Asturias perdura el cuento de una niña que le clava un hierro candente a un cíclope y se escapa disfrazada de oveja. Cuando él la sigue orientado por un anillo mágico que la niña lleva puesto esta se corta el dedo para poder deshacerse del anillo y lo tira al rio. El cíclope se despeña y muere, quedando la niña como dueña de todas las riquezas.
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