Benahadux - Almeria

El PSOE confía en las "instituciones democráticas venezolanas".Elena Valenciano.

Claro, tenía que haber sido más mística y decir que ella también había visto al "pajarito".


Claro está harta de ver "pájaros" por todos lados:



No fueron ni uno ni dos. Invercaria concedió hasta tres préstamos participativos sin control alguno a los negocios de energías renovables que dirigía como consejero Federico «Quico» Mañero, exmarido de la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano. En tiempo récord, con nueve meses de diferencia (entre octubre de 2008 y julio de 2009), la sociedad de la Junta de Andalucía dedicada a apoyar proyectos empresariales mediante el capital riesgo prestó hasta 1,5 millones de euros de fondos públicos a sociedades que controlaba en aquella fecha el que fuera secretario general de Juventudes Socialistas (1981/84) con Felipe González.

Dos de los préstamos, de 408.000 y 700.000 euros, fueron a parar a Electria, nombre comercial de Compañía Eléctrica para el Desarrollo Sostenible, en cuyo consejo de administración estaba Mañero. Están siendo investigados por el juzgado de instrucción 16 de Sevilla. Las operaciones carecían de los requisitos indispensables para realizar una correcta evaluación del riesgo: un plan de negocio y una propuesta de inversión.

Tales omisiones no impidieron que el entonces presidente de Invercaria, Tomás Pérez-Sauquillo, aportara un tercer balón de oxígeno financiero a las empresas de Mañero. El nuevo apoyo se materializó, según ha podido saber ABC, el 15 de abril de 2009 con un nuevo préstamo de 400.000 euros a favor de Consultora para la Sostenibilidad Integral SL que eludió todos los controles internos. Ni siquiera consta que lo aprobara el consejo de administración de la empresa de la Junta.

Por partida doble
El timón de esta empresa dedicada también al sector de las energías renovables lo manejaban los mismos accionistas de Electria. Es decir, por partida doble se inyectaron fondos públicos a los negocios de Mañero, quien llevaba años separado de la número dos del PSOE y mano derecha de Alfredo Pérez Rubalcaba cuando se benefició de los créditos. Este figura desde el 13 de marzo de 2009 (un mes antes de recibir el préstamo) como consejero de la nueva sociedad, constituida a finales de 2008, y de la que se desvinculó a mediados de 2011 al desprenderse de sus acciones.

El descontrol en la gestión de Invercaria motivó la apertura de una investigación judicial por presuntos delitos de malversación de fondos públicos, falsedad y coacciones sufridas por un exdirectivo de Invercaria para que elaborase informes falsos sobre las empresas en las que se invertía. Entre las pruebas documentales que constan en sede judicial hay tres grabaciones realizadas en 2011 por el exdirector de Promoción, Cristóbal Cantos, a la entonces presidenta de Invercaria, Laura Gómiz, donde esta le ordenaba que montara expedientes sobre 38 proyectos que carecían de documentación.

Los entresijos que rodean a este nuevo préstamo participativo fueron aún más extraños que los anteriores. El 25 de mayo de 2011 Laura Gómiz, que era entonces la presidenta de la sociedad de capital riesgo de la Junta, recibió un correo electrónico de su director de Promoción, Cristóbal Cantos, en el que le indicaba que «no figuraba» ningún expediente sobre Consultora. Tampoco –le precisó– había rastro alguno del acta del consejo de administración que lo aprobara. «Sí existía en el Departamento de Recursos una póliza de préstamo participativo de fecha 15 de abril de 2009 por 400.000 euros» a nombre de Enrique Pablo García Chelle, otro socio de Mañero en Electria.

Y yo me pregunto, para que expropiar viviendas con expropiar a los sinvergüenzas que se lo han llevado crudo con el consentimiento de la Junta, ávidos de repartos de sobres, se podría evitar tanto desahucio, a qué si The Doctor.