Pedrosa del Rey - Valladolid

El de las Pedralvas evidentemente no comulgaba con las ideas políticas de D. Adolfo Suárez, pero no por ello dejo de reconocer sus grandes méritos como presidente en un momento histórico de España y sus aciertos en esos momentos dando paso a una transición pacífica en la política española con el reconocimiento de los principales partidos.
Fue una pena que se viese traicionado desde sus propias filas por aquellos que una vez ejecutada la traición se pasaron como si no hubieran roto un plato a las filas entonces de A.P. dejando a D. Adolfo, humillado y hundido.
Sin duda ha sido el presidente más honroso y honrado en lo que llevamos de democracia (o lo que sea ahora) y un valiente sin lugar a dudas.
Mi reconocimiento más emocionado a su labor D. Adolfo.
Descanse usted en paz y reciba su familia mis condolencias más sinceras por tan lamentable pérdida.

Me uno a tus sentimientos Pedralvas, pues pienso que fue el político clave de la transición y quizás no suficientemente reconocido.
Nadie pensaba que una persona de su procedencia tuviera la valentía de hacer lo que hizo, reconociendo a todos los partidos y abriendo muchas esperanzas a todos los españoles.
Lástima que los políticos actuales no hayan aprendido nada de la gran lección que nos dio este hombre.
Descanse en paz.

!Todos le reconocen en la despedida!.(PB)Saludos.

Los restos mortales de Adofo Suárez están a punto de salir de la clinica Cemtro de Madrid para ser transladados el Congreso de los Diputados.Alli,en la sede de la soberania nacional,el lugar donde se inmortalizó para la Historia su resistencia al golpe del 23F,aguantando las balas de la extrema-derecha erguido en su escaño,se le van a rendir hoy honores de Estado.
Con todas las turbulencias en contra,la resistencia del régimen a su desmontaje,el terrorismo ultra,el terrorismo de ETA,el ruido constante en los cuarteles,un sistema económico absoleto con la inflación en el 30% por ciento.
Suárez, procedente del franquismo,entendió que el único camino posible era gobernar para todos los españoles tras 40 años de una dictadura despiadada con los perdedores de la guerra civil.
Y lideró en apenas dos años y medio la salida del franquismo a la democracia constitucional impulsada por el Rey.Don Juan Carlos lo calificaba ayer como uno de los periodos más brillantes de nuestra historia.
Fue devorado politicamente por los barones de su partido,la UCD y acosado por casi todos,pero hoy en su despedida,y desde hace ya muchos años,todos le reconocen la audacia,la inteligencia política y el valor que le dio a la palabra y a la practica del consenso.

Por mi parte,que nos esperé "allí" por muchos años.Adios.

Un adiós a un torero , un torero que supo lidiar un toro el cual venia de muy bravo ya que descendía de una ganadería de muy mala reputación , los militares que aun creían que Franco estaba entre ellos le quitaron el capote con el fin de que su faena no pudiera terminar . Como pudo puso la plaza patas arriba demostrando que sin dictaduras ni ataduras el arte del toreo se podía cambiar ,y así fue ya que legalizo unos partidos como el comunista y el socialista que estaban recluidos en el olvido . Un presidente de la cabeza a los pies ,un presidente honrado bueno y de un saber estar , .Dejo buena simiente para los que la quisieran sembrar , que pena que los que siguieron sus pasos los presidentes posteriores no copiaron nada de lo bueno que el sembró .Y es ahora después de muerto se dan cuenta lo bueno que fue , y se dan cuenta por que ellos fueron los malos los que no supieron gobernar los que han arruinado España a base de enriquecerse ellos . Es triste pero una realidad que hasta que uno no se muere es cuando le dedican toda clase de piropos que bueno era . Que pena me dan estos políticos que dicen ser que eran íntimos amigos de D. Adolfo Suarez y una mierda que se coman si no se han acordado de el nunca ,mentirosos eso es lo que son todos .Que Dios le tenga donde se merece ,

Amigo OGITAL, aunque ya se que a ti estas cosas te las traen al pairo, sin duda ayudarán a reforzar tu opinión sobre el fallecimiento del ex presidente Suárez, viendo lo falsos e hipócritas somos en este país, donde la sinceridad brilla por su ausencia y si el "paripé" y la actuación de cara a la galería manifestando justo lo contrario a lo que realmente pensamos porque la sinceridad nunca fue nuestro fuerte.

Elogios después de traiciones

Buena parte de los que han dedicado los elogios más solemnes a Adolfo Suárez tras su muerte están entre los que le hicieron la vida imposible.

Cuánto más engolado ha sido el ditirambo, mayor fue la traición. Buena parte de los que han dedicado los elogios más solemnes a Adolfo Suárez tras su muerte están entre los que le hicieron la vida imposible. Adolfo Suárez fue hostigado, en primer lugar, en su propio partido (UCD), donde desde Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón hasta Landelino Lavilla –pasando por el fallecido Francisco Fernández Ordóñez–, fue puesto en cuestión y sometido a un estado de conspiración permanente. Aquel partido se convirtió, con el paso del tiempo, en el hotel de los líos, las rencillas, las filtraciones al entonces partido de la oposición y la lucha a cuchillo por el poder dentro de UCD.

Suárez fue hostigado también, no solo hasta el golpe de Estado, por el sector más ultra del Ejército –en aquel momento plagado de mandos franquistas–, que no solo no le perdonaron la legalización del PCE, es que le consideraban un traidor, peor que si fuera rojo.

Hubo también un desapego del rey, una relación que empezó en la colaboración pero que se enfrió con el paso del tiempo hasta llegar también a una cierta hostilidad.

Parte de la jerarquía eclesiástica no tragaba con él, si bien es cierto que el entonces presidente de la Conferencia Episcopal, Vicente Enrique y Tarancón, era criticado con saña por la ultraderecha, que le mandaba al paredón siempre que podía por su apoyo a la Transición y por su defensa del sancionado obispo vasco, Antonio Añoveros.

Los socialistas le hicieron una oposición demoledora. Algunas de las brillantes intervenciones de Felipe González en el Congreso de los Diputados, no sólo la moción de censura de mayo del 80, fueron devastadoras para Suárez. Respondió a ellas con demasiados silencios y con una cierta aversión por comparecer en la Cámara.

Nada que ver con todo lo anterior, ni con lo que vendrá después, pero las Víctimas del Terrorismo, cuando aún no existían de forma organizada, fueron desgarradamente críticas con Suárez, al que consideraban un blando y un incapaz en la lucha contra una banda que se llevó por delante la vida de ¡92 personas en el año 80!

Las escenas protagonizadas por los familiares de los asesinados en Euskadi, reprochando a los representantes del Gobierno, que partían a Madrid después del funeral de turno, forman parte del paisaje terrible de aquellos años en los que Eta asesinó también a dirigentes vascos de la UCD.

Los nacionalistas vascos le montaron a Suárez un boicot cuando éste quiso visitar el País Vasco. Boicot convocado de forma estruendosa y que declaraba al entonces presidente del Gobierno como persona non grata en Euskadi.

Tampoco hubo precisamente cariño entre los nacionalistas catalanes respecto de Suárez, aunque no hubo el grado de animadversión con el que se le trató por parte del PNV y del Gobierno vasco de entonces, con Carlos Garaikoetxea de lehendakari y Xabier Arzalluz de líder.

Los medios de comunicación fueron muy críticos con Suárez, que se había construido una imagen buena desde el control de la televisión pública, que tenía carisma entre sectores importante de la población y que en muy poco tiempo perdió buena parte de esos apoyos. Hubo portadas y editoriales durísimos contra Suárez. Se le invitaba a irse.

Qué decir de los Fragas y Aznares, críticos con Suárez antes, durante y después de que fuera elegido presidente del Gobierno. Muy crítico Aznar con esa Constitución que Suárez impulsó y que un sector de la derecha española veía, antes de que se aprobara, como un anticipo de la República, de la ruptura de España y del triunfo de los rojos laicos.

En fin, los propios ciudadanos españoles le acabaron dando la espalda y contribuyeron a la soledad de Suárez. La UCD ganó las elecciones de junio de 1977 y de marzo de 1979, pero cuando Suárez montó el CDS se llevó muy pocos votos. Me quieren, pero no me votan, decía sonriendo.

En la manifestación contra el Golpe de Estado del 23-F se podían oír, en medio del silencio mayoritario, frases como: "Si Suárez lo sabía, por qué no lo decía", atribuyendo, de manera injusta y falsa, un supuesto conocimiento de Suárez de los entresijos previos al golpe.

Hemos asistido a intentos de apropiación de la imagen y la tarea de un político al que se ha identificado, justamente, con el diálogo, el consenso, la valentía, el coraje, la capacidad para inventar un camino propio para el que no había manuales. El caso más obsceno ha sido el de Artur Mas, que dijo, sin pudor, que Suárez le daría la razón a él, que se empataba en virtudes con el recién fallecido. Margallo, en sintonía parecida, le contestó que Suárez haría lo que esta haciendo Rajoy. Probablemente ninguno de los dos tiene razón. (J.Mª Calleja)

Un gran saludo para ti y no te preocupes por los negativos que menciona Pedrosa, por mi parte y cuando me lo permiten, siempre tendrás positivos que creo son merecidos ¡Cuídate!