Alboraya - Valencia

Compromís pide una moratoria urbanística y de infraestructuras


Compromís presentará una Proposición no de Ley en la que solicita al Consell "una moratoria urbanística y de las grandes infraestructuras como el AVE, la ampliación de la autovía o las obras del puerto", porque consideran que "afectan al área metropolitana". Esta moratoria debe ser efectiva al menos hasta la aprobación definitiva del Plan de Acción Territorial (PAT) "para poder adecuar estas obras al Plan de Acción Territorial de Protección de l´Horta (PATH) y evitar que de aprobarse este documento, sea inaplicable", señaló.

En este sentido, el portavoz de Iniciativa del Poble Valencià, -partido que forma parte del grupo parlamentario Compromís-, Paco García, solicitó que, "además de la recuperación de espacios de huerta, la moratoria afecte a las intervenciones sobre edificios o infraestructuras históricas con acequias, molinos, barracas u otro tipos de conjuntos arquitectónicos singulares para evitar su desaparición antes de la entrada en vigor de las medidas protectoras".

Para García, "el documento hecho público por la Conselleria de Medio Ambiente para la protección de la huerta de Valencia es magnífico desde un punto de vista académico, científico, e incluso propositivo". Sin embargo, lamentó que por lo que se refiere a "aspectos que deberían estar previstos como su desarrollo normativo, los órganos de gestión que se deben hacer cargo de su concreción cotidiana una vez aprobado, la financiación de las medidas o la exigencia de una inmediata moratoria para hacer factible su implantación, este documento es mucho deficiente".

Al respecto, añadió que "en este documento se puede diferenciar claramente aquellas cuestiones en las que la Conselleria ha intervenido y aquellos en que ha dejado trabajar a los expertos".

De este modo, criticó que "se haya dejado al margen de todo el proceso de elaboración a las entidades sociales que desde hace una década organizan las reivindicaciones de la ciudadanía a favor de la protección de la huerta" y que el documento cuya elaboración se acabó hace dos años, "ha estado en un cajón de la Conselleria de Medio Ambiente con la única finalidad de dar tiempo a que promotores inmobiliarios, constructores y ayuntamientos depredaran todo lo que desearan la huerta y así hacer inviable su puesta en marcha".

García consideró que "esto sí ha sido una verdadera moratoria de protección de la huerta de Valencia que ha permitido condenar y tapar con cemento millones de metros cuadrados de huerta protegida", en concreto, "más de 12 millones en una década, es decir seis veces el terreno que se recuperó en el viejo cauce del río Túria", apuntó.

En cuanto a la normativa, explicó que el PAT es un plan sectorial previsto en la Ley 4/2004 cuando debería de ser un plan integrado previsto en esta misma ley al tratarse de una área territorial concreta y compleja". Añadió que "no debería limitar sus objetivos a la protección de los valores paisajísticos culturales y medioambientales, sino ampliarlos a la defensa y protección de un uso concreto como el agrícola que es, en definitiva, el que ha dado pie y ha sostenido los valores paisajísticos, culturales y medioambientales que se pretenden proteger".

Para el diputado, el Plan de Protección de la Huerta de Valencia "debería tener como principal objetivo defender los usos y forma de vida y no sólo la defensa de un paisaje, puesto que se trata de un espacio emprendido por el ser humano, que ha sido sostenido durante siglos por los agricultores".

Asimismo, destacó que el sostenimiento por parte de los agricultores "ha permitido que la poblaciones de la huerta mantengan niveles de calidad de vida y desarrollen una cultura inalcanzable en otras partes de Europa", por lo que el PAT debe incluir "medidas para el mantenimiento de la actividad agrícola".

Así, aseguró que no entendía porque la Conselleria de Agricultura no intervenía en este proyecto, y señaló que "pretende convertir la huerta, o lo que quede de ella si no hay una inmediata moratoria urbanística y de las infraestructuras previstas, en un parque temático en qué el que los figurantes serán los agricultores y en el que los urbanistas puedan observar un paisaje teatralizado".

El portavoz de Iniciativa resaltó que "la pérdida de este tipo de suelo rico y productivo, junto con la pérdida de la población dedicada profesionalmente a la agricultura tiene consecuencias muy negativas, sobre las personas que residen y viven en la huerta, pero también sobre la calidad de vida del resto de personas, que dejarán de disfrutar de un medio ambiente saludable y sufrirán el empeoramiento de la calidad de vida urbana o la pérdida de productos de calidad a precios razonables por su proximidad al consumidor".

En este sentido, destacó que el PAT presentado "debe desarrollarse creando un órgano gestor con capacidad de intervención y no meramente propositivo en el qué se tienen que incorporar representantes de la población afectada para gestionar las actuaciones y medidas de protección activa de la huerta".


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