Escalona - Toledo

Hoy quiero exponer este mensaje, en intentar animar nuestro ego, basándome en que la historia de la humanidad guarda mucha relación en las circunstancias que nos tocan vivir hoy.

Debemos de reconocer que nuestro dolor es insoportable, que nos destruye, pero cuando no nos destruye es que es soportable, porque por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes, y que no es más grande aquel que nunca falla sino el que nunca se da por vencido, porque no merecerá nuestras lagrimas, pero si las merece nunca te hará llorar, si lloramos por lo que no tenemos, no podremos sonreír por todo aquello que nos rodea.

Nuestro fracaso consiste en no luchar, en desanimarnos después de cometer un error, el no ser capaces de levantarnos después de sufrir una gran caída, siempre tendremos que tener muy presente que nadie puede hacernos que nos sintamos inferiores, si nosotros no se lo permitimos, nuestra esperanza es el sueño que nos mantiene despiertos, siempre hay que reconocer que en el corazón de todas nuestras tristezas o mejor dicho de nuestros inviernos vive un primavera palpitante, y que detrás de cada noche, viene una aurora sonriente, porque por muy duradera que sea nuestro pesar en la tormenta, el sol volverá a brillar.

Para que podamos triunfar en nuestra vida, la base fundamental no es el llegar primero, simplemente hay que saber llegar, levantándonos cada vez que tropecemos en la misma piedra, debemos de tener muy presente que si no nos esforzamos hasta consumir nuestras fuerzas, como podremos saber donde están nuestros límites, reconociendo en base que cada fracaso que tengamos nos supone una nueva lucha mas en el transcurrir de nuestra vida, y que será una lección que debemos aprender para ayudarnos a mejorar nuestro propio ego. No debemos jamás desanimarnos por los fracasos en nuestras vidas, debemos de saber sacar tajada de cada uno, para poder aprender y seguir avanzando, pero que para poder marcarnos este camino, nos hará falta mucha valentía, y que lograremos terminar nuestro trabajo, con la perseverancia.

Si pretendemos triunfar en la vida no podemos quedarnos mirando a la escalera, debemos de saber empezar a subir, escalón a escalón, peldaño a peldaño, hasta que lleguemos al final, sin fijarte en lo mas mínimo en lo que hemos perdido, sino en lo que nos queda por ganar, debemos de saber utilizar nuestra imaginación, no para asustarnos, sino para crear ideas las cuales nos lleven a lograr lo inimaginable, porque si no soñamos nunca podremos encontrar lo que tenemos mas allá de nuestros sueños.

Es muy bueno reconocer lo duro que es el fracaso en nuestras vidas, pero es mucho más duro no intentar superarlo, ya que si salimos airosos nuestra gloria más grande consistirá en no haber tropezado nunca, sino en habernos levantado después de nuestro tropiezo, los grandes luchadores siempre han tenido que luchar contra una oposición feroz de mentes mediocres, ya que aunque tengamos sabiduría en nuestros problemas, la base fundamental es saber cómo poder aplicar nuestras soluciones, porque aunque tengamos voluntad no será suficiente, si no que debemos de trabajarla para llevarla a buen puerto.

Nunca debemos de culpar a nadie, porque somos nosotros mismos los dueños de nuestros destinos, ya que en nuestras razones nosotros somos los que mandamos, y marcándonos que nunca podremos conseguir nada sin tener entusiasmo, ya que el futuro solo pertenecen a aquellos que creen en sus sueños, en sus ideas, teniendo muy en cuenta que la desesperanza tiene su base en lo que sabemos, que en resumen no es nada, y que nuestra esperanza lo es todo y para todo, ya que nos llevara a un estado de satisfacción, pero que si no sabemos aplicarla nos llevara a un estado de desesperación, ya que nuestra esperanza nos mantendrá despiertos, y a que nuestro viaje por la vida pleno de esperanza, nos ayudara a cultivar, y animar a nuestro ego.

Gracias por leerme
luismgon