Villanueva de San Juan - Sevilla

Esta mañana he visto a un conocido de hace bastantes años. Este hombre, a pesar de que nunca hemos tenido una gran amistad, siempre que nos hemos encontrado nos hemos saludado y deseado salud para nosotros y para nuestras familias y alguna vez hemos tomado un café. La penúltima vez que le vi estaba en una situación… digamos regular, pues le vi que cojeaba y un brazo no se le veía lo bastante firme, me dijo que había tenido una embolia y que la parte derecha no le había quedado muy bien, con la desventaja de que había sufrido el percance no estando de alta en la seguridad social pues un tiempo antes se había despedido de forma voluntaria del trabajo que tenia, así que no tenía nada, ni siquiera paro. Le habían diagnosticado el 65% de discapacidad laboral y cobraba una pensión no contributiva de 350€. Jodida la cosa. ¡he!
Esta mañana de vuelta de mi paseo matinal, a una cierta distancia por la acera donde caminaba, vi a un hombre tirando de un carrito viejo y rebuscando en un conteiner, el miró y se cambió de acera, yo con la gorra bajada pasé a su altura sin mirar, al instante no pude mas y le llamé, la segunda vez le llamé por su nombre y apellido ya dirigiéndome hacia él. El se paro y me dijo que no me había reconocido, yo le dije que iba distraído y que casi no le veo. Después del saludo correspondiente y sin saber que decir ninguno de los dos, mirando el carrito me dijo- cojo algo de chatarra y la vendo. No recuerdo muy bien como fue el resto de la conversación, la cuestión es que me dijo que había tenido una revisión médica y que le habían bajado la discapacidad al 33% y en consecuencia le habían quitado la pensión. Le invité a entrar en el bar y desayunar, el no quiso, y ante mi reiterada insistencia, me dijo- mejor me das uno o dos euros que compro pan y me voy a casa (no estoy contando ningún cuento, me ha ocurrido esta misma mañana) saqué la cartera y le di lo que llevaba, 20€. Llegué a casa hecho polvo, le conté lo sucedido a mi mujer y nos emocionamos, pues no es lo mismo saber que hay gente que lo pasa mal, que conocer gente que lo pasa tan mal.
Pido disculpas por utilizar este foro para desahogarme pero necesitaba contarlo

He leído tu relato anterior (como todos los tuyos muy bien compuesto) y no puedo por menos que decirte que entiendo como te sientes ante este problema, pues es verdad que no es lo mismo, saber que hay gente que lo pasa mal, que conocer gente que lo está pasando muy mal. No se donde estás ni conozco tu entorno social pero a lo mejor puedes ayudar a esta persona conocida poniéndola en contacto con las organizaciones no gubernamentales o con los organismos oficiales que pueden ayudarle. Conozco casos de personas que no son capaces de buscar ayuda. Se encuentran tan deprimidos que no saben o no pueden hacerlo y ahí es donde podemos echarle una mano. En fin no está en mi ánimo darte consejos, pues no quiero caer en aquello de que, es más fácil predicar que dar trigo. Un afectuoso saludo y mi deseo de que este hombre encuentre la ayuda que necesita.